Amo a mi familia

Capitulo 17:Eres hermosa

Meses antes de que Bell llegara a la ciudad de Orario la situación de Ardee era distinta, mucho más distinta de lo que era ahora.

Se sentía mal por sus quemaduras, si pero no era tanto, incluso no se sentía avergonzada de mostrar su rostro a los demás aunque siempre utilizaba máscara ya que le gustaba, decía que parecía una chica misteriosa, una heroina en las sombras.

En ese tiempo que Bell aún no había llegado a Orario, Ardee conoció a un chico, uno el cual lo llegó a considerar como un buen amigo.

Se miraban de vez en cuando a lo largo de la semana y ya que Ardee hacia amistades con facilidad no tardo en tenerle confianza aunque Shakti nunca le cayó bien diciendo que parecía alguien desagradable pero Ardee lo negaba.

A pesar que tenían unos cuantos meses de conocerse Ardee jamás le mostró su rostro, no era porque le diera vergüenza, simplemente siempre se encontraban cuando ella utilizaba máscara y ella se negaba a quitársela por diversión.

El amigo de Ardee no tenía gusto por las historias de héroes pero a pesar de eso ella le recomendaba libros diciéndole que le gustarían, unas pocas veces leyó alguna de sus recomendaciones y eso alegraba a Ardee estando ansiosa por prestarle en alguna ocasión su libro favorito, Argonauta.

El punto es que Ardee lo consideraba un buen amigo y una buena persona.

Desgraciadamente en muchas de las ocasiones nunca se llega a conocer bien del todo a alguien, mayormente siempre ocultan parte de su personalidad ya sea porque es desagrable o porque tienen segundas intenciones o simplemente porque no tienen la confianza suficiente para mostrarse como verdaderamente son.

Y Ardee tuvo que entender eso por las malas, que jamás conoció a ese chico del todo y que el jamás la consideró una amiga.

Y también entendió que las palabras pueden llegar a ser más hirientes y dolorosas que muchas cosas físicas.

-¡Te vez bellísima Ardee!.

Dijeron dos chicas de la familia Ganesha después de ayudar a su amiga a vestirse para ese día.

Un día antes su amigo la había invitado a una cita para el día siguiente, cita la cual ella gustosamente acepto.

No estaba enamorada de él pero si le caía muy bien y una cita a su lado serviría para conocerse mejor, aunque claro, Shakti estuvo en desacuerdo con esa cita pero acepto la decisión de su hermana en ir.

-¿De verdad lo creen? -pregunto Ardee con una sonrisa avergonzada.

-completamente, te vez hermosa -elogiaron levantando el pulgar-. Ahora solo te queda ir y mostrar tu belleza.

-v‐vamos, no soy tan bonita -dijo avergonzada-. Las cicatrices restan puntos.

-con cicatrices o sin cicatrices eres hermosa, ten más confianza en ti misma.

El rostro de Ardee estaba cicatrizado con quemaduras, parecían como si fueran manchas en todo su rostro, según las personas que la curaron su rostro hubiera quedado peor pero lograron atenderla a tiempo y colocar pociones de gran calidad, eso evito que su piel quedara dañada pero fue imposible borrar las marcas de su rostro, al principio su piel se sentía rara pero con el pasar del tiempo su piel volvió a ser normal, una piel suave pero con la diferencia de tener todas esas manchas ocasionadas por las quemaduras.

Lo más notable era su ojo completamente blanco, su ojo también había quedado muy dañado pero gracias a los curanderos logró recuperarlo pero no recupero la visibilidad, Ardee siempre soltaba chistes que había pasado a ser decorativo.

Claro, los chistes eran para no sentir tanto dolor de esa guerra pasada y lo mucho que la afecto, a veces quería entrar en depresión pero su personalidad animada siempre era más fuerte tomando el control.