Día 15 - ¿De dónde vienen los bebés?

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—¡Mami! —gritó Connor entrando a la habitación, haciendo un gran esfuerzo para tener a Asher en brazos— ¡Tu hijo escondió el gorrito de Cinamoroll!

Satoru levantó la cabeza de la almohada, ocultando su sonrisa mientras Connor dejaba a su hermano en la cama.

—¿El de gato?

—¡No, el de conejo! —el pequeño se llevó las manos al pelo y lo miro antes de tirarse al suelo dramáticamente.

—¡Ya lo encontré! —Cameron entró corriendo a la habitación, el gorrito de conejo lleno de tierra, haciendo que Connor soltara un grito dramático mientras se levantaba.

—¡No! ¡Lo enterró en una maceta! —gritó mientras se dejaba caer en los brazos de Cameron, quién lo atrapó antes de que los dos aparecieran al segundo siguiente en la cama, donde se dejaron caer.

Rieron con suavidad, Cameron realmente estaba mejorando con su habilidad, pero rápidamente Connor volvió a su dramatismo, obligando a ocultar su sonrisa.

—¡Y ahora Asher va a tener que lavar su gorrito! ¡Porque él lo ensució!

—Solo tiene un año, Connor, aún no puede ponerse pie él solo, no puedo lavar el gorro.

Connor se dejó caer antes de zarandear a Cameron.

—¡¿Qué hago?!

Cameron se levantó de hombros.

—¿Lavar tu?

—¡Yo no puedo! ¡Estoy chiquito!

Satoru reía contra la almohada mientras Asher se esforzaba por escalar su cuerpo.

—¿Qué sucede? —preguntó Suguru entrando a la habitación con una bandeja de comida que contenía una pequeña porción de papilla para Asher y panqueques para todos los demás.

—¡Papi! ¡Dile a tu hijo que lave el gorro de Cinamoroll!

—¿Cameron lo ensució?

—¡Yo no fui!

—No, de hecho, él lo encontró, ¡Fue tu otro hijo! —le informo señalando a Asher— yo estaba jugando, muy tranquilo como siempre, y dejé a Cinamoroll un momento para ir a buscar su gorrito de gatito, pero cuando llegué, ¡Su gorrito de conejo ya no estaba! Y lo busque, lo busque mucho, ¡Y Asher solo se reía de mi! Y no lo encontré, entonces vine con mami, pero él dice que Asher no puede lavarlo porque está chiquito, ¡Pero yo digo que sí puede!

Suguru lo miró, sin llegar a comer el trozo de panqueque que tenía en el tenedor.

Bueno, nadie podía negar que era hijo de Satoru.

—Bueno, es que aún no puede, peque... Aún es muy pequeño, como te dijo tu mami.

—¡Mentira! —gritó Connor mientras se acercaba a Asher y lo miraba fijamente, quién le sonrió mientras abría la boca para recibir otra porción de su papilla— ¡Se rió de mi! ¡La maldad, papi! ¡Castigalo!

Suguru aguantó la risa mientras le daba el plato con su desayuno.

—El lunes sin falta, te lo prometo.

Connor asintió, bastante satisfecho con la respuesta mientras comenzaba a comer.

Satoru se acomodo un poco más en la cama, Asher en medio de Suguru y de él, comenzaba a tratar de comer por sí mismo, pero aún así ensuciaba la sábana de vez en cuando.

—¡Y ahora manchó la sábana! ¡Yo digo que lave todo!

Cameron le dio un suave golpe en la nuca mientras le metía a la fuerza un pedazo de panqueque en la boca para que se callara.

Cachorros (SuguSato omegaverse)Where stories live. Discover now