¿INALCANZABLE?

Capítulo 2: Recuerdos que sacan sonrisas

A bordo de un auto de lunas polarizadas iba un joven de cabello desordenado y mirada cálida, observando a través de las lunas polarizadas del auto hacia el exterior, mientras pensaba: Una vez más en Japón, una vez más con la esperanza de poder volver a verte, ya han pasado 5 años desde la última vez que nos vimos. La verdad no comprendo, ¿por qué de pronto dejaste de comunicarte conmigo?, lo único que sé es que ya no vives en el mismo lugar, aunque tampoco pude conseguir la nueva dirección de tu casa, y preguntarle ello a Ryo me da un poco de vergüenza, ya que él no es muy discreto que digamos y luego empiezan los demás con sus bromitas y yo no quiero estar como Hyuga discutiendo con todos por metiches, aunque en parte Ryo tenga razón, Sanae es especial para mí. Sanae hubiera sido maravilloso mantener aún contacto contigo, así no me sería necesario contratar a alguna chica para mi acompañante cada vez que necesito de una mujer a mi lado para algún compromiso, ya que tu como mi amiga serías quién me brindaría tu compañía cada vez que lo necesitará, como cuando éramos niños y me acompañabas a mis entrenamientos, o me apoyabas en ellos, o me acompañabas a alguna reunión de nuestros amigos, o cuando eras mi compañera de juegos.

A la mente del joven vino un recuerdo, que hizo que su mirada cobrara un brillo especial y una sonrisa se plasmara en su rostro.

-.Recuerdo.-

Un joven de cabello alborotado platicaba por celular, mientras sonreía al escuchar lo que su amiga le decía.

Ya no se me ocurre nada más, escucho.

Entonces gane yo, dijo con orgullo el jovencito de cabello desordenado.

Creo que sí, escucho.

Soy el rey de la cuenta regresiva, agrego el jovencito.

Solo me llevas 2 juegos ganados, escucho.

Cierto, cierto decía el apuesto joven.

-.Fin del recuerdo: Tiempo actual.-

La Cuenta Regresiva, nuestro juego de infancia, que lo continuamos por un par de años más durante la adolescencia, ya que luego empecé a perderte el rastro, ya no me llamabas, ya no me escribías, menos respondías mis llamadas ni mis mensajes, tras algunos meses de perder contacto contigo llegue a la conclusión que tal vez cambiaste de número de celular, pero luego me enteré por ti misma en uno de mis encuentros forzados para verte, que no era así, tu seguías manteniendo tu número de celular, solo que no me contactabas por que no tenías tiempo disponible, pensaba Tsubasa, al tiempo que un nuevo recuerdo apareció en su mente.

_-.Recuerdo.-

Una reunión de bienvenida, decía un joven cara de mono, mirando a un apuesto jovencito de cabello desordenado.

Sí, contestaba un apuesto jovencito de cabello alborotado.

Pero, ¿a quién le haremos la bienvenida, agregaba el joven cara de mono.

A mi Ryo, a quién más, bueno en realidad no tienes que hacer nada, solo prestar tu casa, e invitar a todos los chicos de la generación del Nankatsu, de nuestra aula, que no falten ningunos....

Bueno, ello me será fácil, pero no se supone que la bienvenida teníamos que hacerla nosotros a ti, pronunció el joven cara de mono.

Bueno sí, pero ya que a nadie se le ocurrió hacérmela, yo solo me la haré, eso sí, que todos piensen que tú me la organizaste, sobre todo Sanae, decía Tsubasa.

Ah,..., Sanae, expreso Ryo.

No empieces Ryo, si dije ello, es porque ya conoces a Sanae, se sentirá mal de haberse olvidado de hacerme mi bienvenida, ya sabes es mi mejor amiga....