Pequeño hurón

544 57 46
                                    

La tensión se sentía en el aire, el estudiante de Slytherin se acercaba de forma amenazante al Hufflepuff mientras lo miraba con completa soberbia. Cedric lejos de sentirse intimidado, se sentía irritado, está situación era sobre él y Harry, no necesitaba ningún tercero en el asunto.

– ¿Por qué no te metes en tus asuntos Malfoy? – Le respondió.

– Yo puedo meterme en lo que quiera. – Dijo con burla. – Además, me sorprende que seas tan tonto para no notar que los estúpidos rumores sobre ustedes están molestando a Potter, por eso quiere mantener distancia, pero al parecer la fama te pudrió el cerebro y no notas algo tan obvio.

Harry sintió su respiración cortarse por un segundo, los últimos días había continuado con su extraña situación de enviarse notas en las clases que compartían y le había mencionado lo molesto que estaba por los rumores y como algunos Hufflepuff no lo habían dejado en paz en los últimos días. Pero, no esperaba que Draco saliera a defenderlo en frente de todos.

– Si le molesta o no, es tema de nosotros dos. – Dijo y tomó a Harry del brazo. – Así que vete Malfoy.

– No. – Draco tomó el brazo de Cedric para que soltara el de Harry.

– Quítate Malfoy. – Cedric lo apartó con fuerza y se llevó a rastras a Harry del brazo.

– Cedric, sueltame. – Gruñó Harry.

Draco ofendido saco su varita e intentó atacar a Cedric por la espalda, lástima que no lo logró, ya que, se vió repentinamente convertido en un hurón albino por un desconocido.

– ¡Draco! – Dijeron sus amigos asustados.

Harry se soltó del agarre del Hufflepuff, aprovechando que estaba distraído viendo lo que había pasado con Malfoy.

– Hablaré luego contigo. – Dijo enojado y Cedric se congeló un segundo.

Si daba un poco de miedo.

Potter se abrió paso entre la multitud, su mirada buscaba al culpable detrás de la transformación de Draco en un hurón albino.

Finalmente, sus ojos se posaron en un individuo que le resultaba familiar. Allí estaba, manipulando su varita para levantar y bajar al pequeño hurón como si fuera una especie de castigo.

– Señor Alastor, deténgase. – Lo reconoció como Alastor Moody, un auror famoso por estar loco.

Había trabajado alguna vez con su padre en un caso y a veces iban a beber juntos.

Alastor dejo caer al pequeño hurón y Harry rápidamente corrió y lo tomo en brazos.

– ¿Por qué hizo eso? – Preguntó enojado.

– No hay nada más vil que atacar por la espalda. – Respondió con simpleza.

– ¿Qué está pasando? – Interrumpió la voz de la profesora Mcgonagall. – Señor Moody ¿Qué estaba haciendo? Debería estar en la oficina del profesor Dumbledore.

– Enseñando. – Respondió.

Minerva observó la situación, los estudiantes aún estaban riendo y vio a Harry Potter proteger un pequeño hurón albino en sus brazos.

– ¿Es ese... Un estudiante? – Cuestionó señalando al animalito en los brazos de Potter.

– Técnicamente es un hurón. – Dijo Moody.

– Harry, suéltalo por favor. – Pidió la mujer. – No le pasará nada.

Harry dejo con cuidado el pequeño hurón en el suelo y se puso de pie sin apartarse demasiado.

Entre tres corazones - Drarry [Harry Potter] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora