"Fieras". [Yaoi One Shots #1]

Lemmon sin sentido

-Lindas cortadas, ¿son nuevas?- demasiado tarde...

-L-Louis!- intenté esconder el tabaco tras de mí pero fue inútil -eeemm... y-yo...

-No lo escondas, igual te vi por la ventana, te he dicho...

-Sé lo qué me has dicho- le interrumpí -Pero... ¡es inevitable!- adoptó una posición más relajada, y con semblante serio me miró, realmente era lindo... Su pelirroja cabellera y sus lindos ojos verdes...

-El profesor Patrick me dijo lo sucedido, además de que olvidaste desdoblar las mangas de tu chaqueta...- suspiró -además te he dicho que no fumes en el salón, podría verte algún profesor

-Blah, blah, blah, regaño, regaño... ¿Por qué no mejor se relaja, señor presidente de la clase? - mostré el cigarrillo que aún no me había terminado, se acerco hasta a mí y lo arrebató de mi mano, sin dejar de mirarme dio una calada y me besó, el humo sabía bien pero de sus labios sabía mejor, hace tanto que no hacíamos esto...

-¿Mejor?- dije cuando nos separamos, soltando aquel bióxido de carbono que habíamos compartido

-Mmmhh...si... sabes que si- sonrió, se veía realmente radiante
quería más de él... no... necesitaba más de él.

Lo tomé de una mano y lo arrastre tras de mi.

-¿A-a donde vamos?-No respondí, más tarde que temprano se daría cuenta, era jodidamente inocente, o se hacía el inocente.

Nos metimos al baño, cerré la puerta detrás de nosotros y lo comencé a besar vorazmente, lo monte en los lavabos:

-haahh... N-no... sabes que tu serás castigado está vez- joder... como no sucumbir ante esa mirada llena de deseo y ese rostro sonrojado hasta el tope.
Bajo de los lavabos apartandome un poco...

-El castigo será... ¡No te correrás!

-¿Tan mal me he portado?

-Mmmhh...-asintió-has sido un gatito malo...-desabrocho mis pantalones

-Joder... e-el u-uniforme...- no me escuchó y bajó mis boxer, acto seguido comenzó a masajear mi miembro -aaahhh...- no quitaba la mirada de mí, al parecer yo también estaba comenzando a sonrojarme

-mmm... te ves tan pasivo así... mira como me pone...- bajo una de mis manos hacia su pantalón, y apreté su notable bulto

-aaahh... dí-dí qué me nececitas... mmnnghh... dí que me quieres dentro...- susurró en mí oído para después morder el lóbulo de esté

-nhhg, te, te quiero... dentro...- gruñí,  me tomó por las caderas y me giró, de un momento a otro no sentí sus manos en ningún lugar. De pronto sentí sus manos separando mis nalgas para después darme un beso negro, jugaba con su lengua en mi entrada, la metía y sacaba con lujuria

-agh, ngh- Introdujo un dedo y se levanto de su lugar para besar mi cuello y morder mi hombro, gemí. De manera inconsciente comencé a mover mis caderas al compás de su dedo, metió otro, solté un pequeño quejido, volteó mi rostro para besarme,  jadeos y gemidos eran ahogados en ese beso. Mis caderas se movían en busca de más.

-Has como gato si quieres que continúe- no tenía otra opción, pensaba castigarme y humillarme. Me giró para que me viese en el espejo y se posicionó atrás de mí, tomó mi cabello con fuerza

-Mirate, mira lo que vas ha hacer, mira como te voy a poner, mira lo que te voy a hacer... Ahora maulla- en mi rostro se veía la desesperación, el deseo y la vergüenza

-n-nya, nya

-muy bien, gatito- lamió mi cuello -desgraciadamente, esto es un castigo así que te haré esperar hasta que no puedas más...- sus dedos seguían en mi interior, realmente lo necesitaba, lo necesitaba desesperadamente

-¡Joder, métemela ya!- gruñí

-No te escucho maullar- canturreo

-nya, ny...- de una estocada entró -aaahh- comenzó a moverse lentamente, me sostenía del lavamanos que tenía delante. Sus manos estaban en mi cadera, en el espejo se reflejaba la escena más erótica que había visto,  de momento dejo de moverse.

-¡Maulla!- gruño

-nya... ny-a...

-quiero que por cada estocada que dé maúlles, ¿entendido?

-nnghh- asentí, me embistió, no podía creer que aquel chico que se veía tan amable y tranquilo fuera un maniático en el sexo

-nya- se movía, me embestía, yo maullaba, gemía, estaba desesperado, no podía más.

-¡Qui-ero más!- logré decir entré jadeos, parece haberse cansado de lo lento que iba esto así que aumentó la velocidad

-nyaa- ahora maullaba sin argumento alguno, lo sentía golpear mi próstata, seguía el ritmo de sus caderas, nuestras respiraciones se sincronizaban

-E-eres t-a-an dulce, t-aan ap-retado...- sus palabras eran mi perdición, no podía más, quería correrme...

-nnggh... n-o pue-do... me vengo...- tomó mi miembro, presionando el glande fuertemente para evitar que me corriera

-Matt... e-estas... cas-ti-ga-do- remarcó cada sílaba de esa deliciosa palabra. Sabía que tenía que aguantar hasta que el se corriese. Seguía el vaivén de sensaciones, placer, gemidos, y, aunque no lo pareciera... amor

-Matthew Williams...- mi nombre sonaba tan delicioso en sus labios -¡Te amo...!- se corrió dentro de mi, al fin podía liberarme. Soltó mi glande, me corrí, gritando incoherencias y manchando el lavamanos, no me importó, preferí seguir disfrutando el éxtasis que nos envolvía en ese momento...