— Te lo juro, Ron – dijo Harry – Lockhart no escuchó nada, pero yo sí.

— Pero, ¿cómo es posible? – cuestionó Weasley.

— No lo sé – contestó – sólo sé que algo malo ocurre..

— No lo sé – contestó – sólo sé que algo malo ocurre

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

31 de octubre 1992..

Era la noche de Halloween, lo que significaba que en Hogwarts las decoraciones rondaban por el gran comedor y todo el castillo. Ron y Harry también fueron invitados por Nick casi decapitado a su fiesta de muerte, y aunque; por un momento lo dudó, Harry aceptó.

Draco y Hermione estaban muy emocionados de ir a su primera fiesta de muerte, ambos ansiaban que la hora de la fiesta llegara.

—¿Qué te pondrás? – preguntó Hermione, que salió con un vestido de color morado en su mano – yo me pondré esto, con la túnica encima; claro.

— ¿Entonces para que te lo pondrás, Granger? – habló Zabini desde una esquina.

— Porque...si alguno de los profesores nos ven, nos pueden castigar o quitar puntos – explicó ella.

— Si lo ves en ese sentido, Hermione si tiene razón, Blaise – dijo Draco, que había salido del baño.

Draco llevaba puesta una camisa blanca de mangas cortas, unos jeans negros y unos tenis negros. Su pelo estaba recogido con un poco de gel.

— Te ves bellísimo, Dray – halagó Hermione.

— Tú también, Hermione – contestó él.

— Pero, si no tengo el vestido puesto – dijo ella.

— Pero, igual te ves hermosa – ella se ruborizó y fue al baño, para luego salir con el precioso vestido morado puesto y con una trenza hecha.

— Faltan diez minutos – Draco miró su reloj, y junto a los chicos salieron, Blaise no iría porque según él; Nick casi decapitado lo odiaba.

Llegando a la fiesta, Draco notó que no sólo él y Hermione estaban ahí, también lo estaban Ron y Harry

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Llegando a la fiesta, Draco notó que no sólo él y Hermione estaban ahí, también lo estaban Ron y Harry.

Potter y Weasley llevaban sus uniformes, ninguno de los dos se propuso ir presentable a la fiesta. Harry notó la fugaz, pero fija mirada que Draco le lanzó y lo  analizó con paciencia.

— ¿Qué tanto ves, Harry? – preguntó Ron, que estaba tan perdido, como siempre.

— Al parecer no fuimos los únicos invitados – le dijo Harry con voz ronca, y Ron dirigió su mirada dónde estaba puesta la de Harry. Entonces comprendió porque la expresión de desagrado y odio se mantenía en el rostro de su amigo; Granger y Malfoy, las dos personas más desagradables en el mundo, para él, estaban ahí.

— ¿Malfoy y Granger aquí? – dijo con recelo – vaya, parece como si nos siguieran.

— Ni lo menciones, Ron – el ojiverde se volvió hacia su amigo, y se fueron lejos de unos fantasmas que estaban hablando de algo que poco les importaba.

— Si, Dray – escucharon la voz de Hermione cerca de ellos, y quisieron tener la capa de invisibilidad con ellos para desaparecer de ahí – te digo, realmente Fred me dijo eso.

— Ha, ha, ha – reía Malfoy – Hermione, ¿enserio?, ¿tú qué le dijiste?

— Qué lo pensaría, obvió – contestó ella y sin percatarse chocó con el hombro de Ron – ay, perdón.

— Fíjate primero, Granger – inquirió Ron, con estrés.

— Fue sin querer, lo siento – se disculpó ella – ¡ah, si!, cómo te decía.. él me invitó a tomar algo en...la cocina...y...¡le he dicho que si!

Draco le lanzó una mirada emocionada y soltó un chirrido, que aturdió a Harry.

— Mione, y así dices que yo..y, ya sabes somos como cursis – mencionó él.

— Es que si lo son, Draco – dijo ella con obviedad – cada que miras a su mesa, sonríes con idiotez.

El rubio no pudo contestar, pues, él y Harry escucharon nuevamente esa voz:

« Matar…quiero matar…desgarrar.. »

— Hermione – dijo Malfoy con poco aíre –  la voz, es esa voz nuevamente, sígueme.

Harry le indicó lo mismo a Ron, y los cuatro, mejor dicho los otros dos, se fueron de la fiesta, mientras; Draco y Harry los guiaban.

« Sangre…, huelo sangre, al fin podré matarte »

Ambos se dedicaron una mirada de terror y exclamaron:

— ¡Va a matar! – y salieron corriendo.

Después de correr por más de cuatro pasillos, los chicos se detuvieron frente a un muro, lo cuál a Ron no le hizo sentido.

— ¿Esto es todo? – preguntó – ¿para esto corrimos por medio castillo?

— ¡Miren! – dijo Hermione, señalando hacia el muro, y leyó:

La cámara de los secretos ha sido abierta, enemigos del heredero temed...

Los Elegidos  || Harco Where stories live. Discover now