Maximiliano, pierde a su madre en un accidente automovilístico , tras ello pierde todo interés en la vida misma . Por tales consecuencias del accidente el chico debe mudarse a vivir con su tía ahora madrastra a otro país, Corea, ahí pasa toda su inf...
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3 HORAS ANTES.
Maximiliano.
El sonido del reloj resonaba en cada rincón de la sala de estar, mis dedos se deslizaron en una de las páginas de mi libro, estaba sumido en la lectura solia desvelarme leyendo .Lo podía hacer durante unas cuantas horas y no me cansaría de ello.
Un fuerte ruido llegó a mis oídos sacandome totalmente de mi lectura , cerré el libro y me levante del cómodo sofá. Me encamine hasta la cocina porque de ahí había venido aquel ruido , mi cuerpo tembló y un escalofrío recorrió mi espina dorsal mis pasos fueron lentos, precisos, me moví muy sigiloso hacia aquella área de mi casa.
Mis pies descalzos se detuvieron frente a la cocina . Sentí el vómito llegar a mi garganta y el estómago se me estrujo, alguien estaba forcejeando la puerta trasera de la cocina con una fuerza, tras unos minutos el ruido cesó. Mi corazón palpitaba con tanta intensidad que creía que se me saldría del pecho tuve que apoyarme sobre el marco de la puerta para no caer al piso.
____ Cálmate, Maximiliano— trate de tranquilizarme —.
Inhala y exhala.
Sentía hinchada la cabeza, las venas me palpitaban y las piernas me temblaban al igual que cada parte de mi cuerpo.
El ruido volvió hacerse presente pero está vez ese " alguien " impactaba con gran fuerza contra la puerta hasta el punto de abrirla, una figura masculina se dejó ver, era alto aún más alto que yo, llevaba puesta una máscara de teatro sobre su rostro una máscara realmente escalofriante y en su mano tenía un bate de béisbol.
El hombre avanzaba hacia mi y mi cuerpo no me respondía, se mantenía ahí, estático, aunque mi cabeza me gritara que corriera por mi vida mis pies no me respondían.
____ Estoy aquí por ti — hablo el hombro con una voz grabe, fría y escalofriante —. He venido por ti — volvió a repetir—.
Fue en ese momento que mi cuerpo entró en alerta y mis pies retrocedieron hacia atrás estaba nublado sin ninguna idea, la cabeza me palpitaba , mis ojos no abandonaban al hombre , mi mirada era fija en él a medida que este avanzaba yo más retrocedía hasta el punto de chocar contra el sofá que minutos antes estaba sentado sobre el mismo mientras leía.
Con el pecho subiendo y bajando , con la respiración a mil esquive como pude al hombre que estaba frente a mi, corrí con rapidez hasta llegar a mi habitación, podía escuchar sus botas resonar sobre el piso de madera. ¿ Por qué estás malditas cosas me pasan a mi?.
Mis pies torpemente se mueven hasta el balcón al salir afuera el crudo invierno invade mi cuerpo ,el frío me recorrió con violencia y tuve que acariciar mis brazos para darme algo de calor. Ver la escalera a un lado del balcón se sintió como una salida , un maldito escape, baje con cuidado cada escalón que me llevaba al jardín eso me daría alguna ventaja.
