Un verano para recordar © [COMPLETA✔️]

Capítulo 26 - Final

1 semana después

Alyssa White

Iba en camino a la casa de los padres de Dustin. Quería visitarlos y darles el pésame, ya que no había podido hacerlo en el funeral

Los últimos días han sido bastante difíciles. Lo extraño demasiado, sueño con el todas las noches, aún puedo escuchar su risa y su voz, el agradable olor que desprendía su ropa, su semblante alegre, su mirada…

Y cuando despierto y recuerdo que el ya no esta en este mundo, que ya no volveré a tomar su mano, ni a besar sus labios…que se fue y no volverá jamás, me provoca un dolor gigantesco en el pecho

Y se que este dolor tal vez no se vaya jamás, pero estoy intentando ser fuerte por Dustin, porque el querría que yo siguiera adelante y voy a hacerlo.

Llego a la casa de sus padres y observo un momento el pórtico, ese en dónde solía esperarme cada vez que venía. Casi podía verlo allí sentado con su suerte negro puesto y sonriendo al verme llegar

Una lágrima bajó por mi mejilla y me la limpie con rapidez, crucé el pórtico y toque el timbre de la casa, unos segundos después me abrió la puerta el señor Samuels

–Alyssa–me saludó

–Hola señor Samuels, ¿Podría pasar?

–Claro que si, adelante–dijo dejándome pasar y luego me invitó a tomar asiento

–Yo vine porque aquel día en el cementerio, no pude darles el pésame–dije sentándome en uno de los sofás de la sala–de verdad lo siento mucho…perder a un hijo debe ser horrible

El señor Samuels soltó un suspiro pesado y luego tomo asiento en el sofá frente a mí, se inclino un poco hacía delante apoyando sus brazos en sus piernas y juntando las manos, se quedó unos segundos mirando el suelo y luego respondió

–Lo es.–Dijo y tomo una pausa antes de seguir–Te invade una tristeza abrumadora por haberlo perdido, a tal punto que es difícil hasta levantarte en las mañanas, pero también una culpa extrema porque sientes que fallaste al protegerlo y que tal vez podría haber hecho más por el, haber hecho las cosas de otra manera…

Volvió a mirar hacia el suelo y pude percibir el dolor tan grande y la culpa que estaba sintiendo

–Así me siento todos los días–continuó con la mirada fija hacia abajo–porque yo le negué a mi hijo cosas a las que tenía derecho. Nunca lo lleve a la playa, ni a ningún viaje porque pensaba que era lo mejor y que así no empeoraría su salud, pero estaba equivocado, debí ser yo quien lo llevará a conocer Alemania como el quería y a conocer el mundo entero. Nunca me perdonaré por no haberlo hecho.

–Escuche señor Samuels, Dustin lo amaba muchísimo a usted y a su madre a pesar de que hayan cometido errores, así que no se culpe–le digo–Dustin siempre recordaba los buenos momentos con usted y su madre, cuando lo enseño a jugar ajedrez, cuando lo llevaba al acuario, cuando paseaban por el parque, cuando le compraba los libros que quería, o cuando veían películas los tres. Claro que le dio muy buenos momentos que lo hicieron feliz

El señor Samuels esbozó una pequeña sonrisa al oír mis palabras y se limpio rápidamente una lágrima que se le había escapado

–Gracias por tus palabras Alyssa–dijo aun con la sonrisa en su rostro–también quiero agradecerte por haber hecho a mi hijo feliz, todos ustedes fueron su verdadera familia y su motivación para seguir adelante

Le sonreí de vuelta

–Dustin los amaba muchísimo y estaba agradecido por todo lo que hicieron por el, nunca olvide eso–le respondí