Un verano para recordar © [COMPLETA✔️]

Capítulo 14

Alyssa White

Esperamos afuera un rato hasta que finalmente vimos llegar a Dylan en su camioneta, rápidamente todos nos montamos dentro y nos fuimos de inmediato a la comisaría dónde habían llevado a Joe.

Ahora estábamos allí, esperando en silencio a Dylan y a James quienes se encontraban hablando con los policías en una oficina. Nos moríamos de los nervios y con mucha razón, no todos los días arrestan a tu amigo. La que más estaba nerviosa era Kira pero trataba de disimularlo.

Y sentimos un profundo alivio cuando vimos a los chicos venir junto con Joe

–¡JOE!

Todos corrimos hacia el y los abrazamos al mismo tiempo, lo que hizo que se tambaleara y por poco se cae de culo al piso

–Me alegra tanto que estés bien–dije tomando su rostro es mis manos–ahora, me puedes explicar ¿Porque coño casi te meten a la cárcel?

–Bueno…verás, me subí arriba del pato gigante que estaba en la entrada por una apuesta que hice con James, pero al parecer no era permitido y vino el guardia a decirme que me bajara, e intente decirle en alemán "está bien, ya me voy a bajar" pero creo que en vez de eso lo insulte

¿Eh?

–Al parecer el guardia lo tomo como vandalismo así que lo retuvo contra la pared y llamo a los policías, intente aclarar la situación pero no me dejó y luego otros guardias me apartaron y ya saben–finalizó James

–Eres un grandísimo idiota, pero igual me alegra que te encuentres bien– le dijo Kira

La verdad solamente a Joe se le ocurre hacer semejante locura

–No hubo que pagar ninguna multa ni nada porque también fue abuso de poder de parte del guardia, le dejo a Joe algunos moretones en sus brazos. Lo más seguro es que lo despidan–dijo Dylan

–Que alivio

–Solo me dejaron una advertencia de que no vuelva a subirme a patos gigantes–mencionó Joe

Jamás pensé que escucharía algo así

–Gracias por ayudarme Dylan, lamento que hayas tenido que salir de tu trabajo para venir

–Tranquilo Joe–Dylan puso una mano en su hombro–mi jefe anda de buenas desde que se comprometió así que seguro no va a decirme nada

–Que bueno escucharlo, ahora mejor vayamonos. Fue un largo día–soltó James

Dicho eso salimos de la comisaría, la camioneta de Dylan estaba estacionada en frente. Nos subimos a esta y fuimos de regreso a la casa.

Dylan nos dejó en frente y luego se fue de regresó a su trabajo, aún le faltaban unas horas para salir

Entramos y después de tomar turnos para bañarnos, subimos a la terraza con algunas golosinas que habíamos comprado

–No sabes lo preocupados que estuvimos cuando te llevaron a la comisaría

–Lamento haber hecho que se preocuparan tanto, pero por suerte no me metieron a una celda y los oficiales se disculparon por esposarme, dijeron que era protocolo reglamentario.

–Por suerte, pero no vuelvas a hacer una locura así por favor– le dijo Dustin

–Tranquilo no lo haré, pero viendo el lado positivo, esta será una gran historia para contarle a mis nietos algún día

Todos reímos al escucharlo.

–Oye y tampoco intentes hablar alemán al menos que lo llegues a aprender bien. Acepta que no eres bilingüe

Joe puso mala cara ante lo que dijo James, pero no respondió nada. Supongo que porque sabe que es verdad

Seguimos conversando y viendo la vista de la ciudad, ya estaba atardeciendo así que el cielo se está tornado de tonos naranjas y rojos, es muy hermoso

De pronto Joe se levantó y en su teléfono colocó la canción Footloose de Kenny Loggins a todo volumen, lo dejo en una silla y comenzó a bailar al ritmo de la canción muy al estilo de Kevin Bacon en la película de los 80

–¡Vegan, bailen conmigo!

Hoy casi lo arrestan y ahora se pone a bailar, sin dudas Joe es único

Me levanté de un brinco y comencé a bailar o más bien a tratar de imitar los pasos de baile que él hacía. Después Kira y Dustin también de unieron, y aunque James al principio no quería al final cedió y terminamos bailando la canción todos juntos y cantándola al mismo tiempo

Kira hacia unos espectaculares pasos de Shuffle, mientras los chicos y yo (que no éramos tan buenos bailando) solo intentábamos seguir los pasos. Pero quedaban en eso, en intento. Sin embargo nos estábamos divirtiendo demasiado

Al finalizar la canción todos nos tumbamos en el piso riendo a carcajadas. Cuando paramos nos quedamos un momento allí en el suelo viendo el cielo estrellado ya había anochecido.

–¿Alguno quiere bailar otra canción?– pregunto Joe

Todos lo miramos y asentimos

–Claro que sí

Nos levantamos y Joe coloco otra canción, está vez let's Groove empezó a sonar a todo volumen. Todos comenzamos a bailar de nuevo, cantando la canción y riendo sin parar

Y en ese momento allí con todos, empecé a pensar que increíble es que algo tan simple como bailar con tus mejores amigos puede darte tanta alegría y paz al mismo tiempo, es algo tan mágico

Estos son los recuerdos que voy a atesorar siempre.