-Mi brillo en tu mirada-

Sentimientos encontrados

Me sentía como una tonta. Que ganaba pensando que Mía y Santiago tenían un secreto? Ugh me deje llevar por mis sentimientos. Bueno lo que veía. Además de cualquier manera que cosa podrían hacer juntos? Si fueran novios o algo así tienen todo el derecho de pasarla juntos. Pero no lo eran, o al menos Mía me lo hubiera contando, o no? Tal vez recién empezaban su relación y necesitaban tiempo a solas.

Pero entonces que tenían que practicar o que? Ay no,otra vez me estaba haciendo ideas que no tienen nada que ver.

Después de ver que Santiago se quedo junto a Mía en su casa tuve que olvidarme de mis dudas, o al menos tratar. Pablo me acompañó a mi casa y se fue. Fue un momento incómodo. Habíamos pensado cosas que no eran.

Además tenía que hablar con Mia. Si o si tenía que lograr que me contara lo que pasaba entre ella y Santiago.

┊Narra Mía┊

- Acá tienes, cambiate y nos vamos- le dije a Santi mientras le daba un uniforme de chico que por suerte tenía. De hecho en realidad era de Santi porque ya se había quedado a dormir mucha veces así que tenía algo de ropa de el, entre ellas su uniforme. Siempre lo guardaba porque podría servir de algo.

Santiago: Esto ya no me queda- se quejó señalando la camisa. Me acorde que cuando la quise lavar se me olvido sacarla y se seco más de lo debido por lo que encogió.

- Ni modos es lo único que hay- encogi los hombros para irme a mi cuarto y terminar de peinarme. Santi me seguio todavía quejándose sobre su camisa.

Santiago- Ya va dame una tuya, una que no utilizes y que sea grande. Se que tienes muchas de esas- me ofreció con una sonrisa. En otras palabras me estaba diciendo si podía buscar una camisa en mi closet.

- Está bien, pero no desórdenes nada- acepté irritada mientras Santi me agradecía. Quería ver su cara cuando se diera cuenta que ya no tengo ese tipo de camisas. Mi mama me las había pedido antes de salir de la casa y tardaría mucho en regresarmelas. Capaz ya las boto a la basura.

Volví a sentarme a cepillarme el pelo. Como me había bañado no tenía el pelo enredado así que era más fácil. Aún así, todavía no se me secaba así que tendría que llevarlo agarrado. Me agregue perfume, era uno con olor a fresas con una combinación de dulces. En fin era dulce pero tampoco tan fuerte.

Ya estaba lista así que baje a la sala a esperar a Santiago. Ya habíamos comido y solo faltaba que Santiago encontrara una camisa. Poco después bajo con una, y me sorprendió porque pensé que no habría ninguna. Aunque había un problemita, no tenía los dos botones de la parte de arriba. Por suerte no mostraba tanto pero si se notaba la falta de los botones. Me reí un poco mirando la expresión avergonzada de Santiago.

Santiago: No te rías es tu culpa, si supieras lavar ropa esto no hubiera pasado. Hasta yo se hacerlo mejor- me reprochó mientras paraba de reír.

Mía: De seguro tu grupo de fans va a perseguirte todo el día diciendo que traes un nuevo look. Muy bonito cuello eh- comenze a reír mas mientras a lo que Santiago se puso un collar para disimular un poco. Parecía mas una cadena, pude reconocer que era la que tenía desde que lo conocí. Era de plata y tenía una cruz colgando. Ahora si que complementaba su imagen de chico malo.

Mía: Eso lo hizo peor, pareces esos típicos chicos que se hacen los malos y se portan como perritos con la chica que les gusta.

Santiago: Me veo mejor que tú, eso seguro.- sonrió de lado mientras pasaba su mano por su cabello desordenándolo. Siempre hacia eso para tener el pelo libre y no le quedaba nada mal.

Mía: Idiota, vamos a llegar tarde. Gracias por demorarte tanto.

Santiago: No sería asi si alguien no hubiera insistido en que se rompió una uña, ¿ No crees?