El primer lametón es suave, como si él disfrutara hacerme esperar, no puedo dejar de mirarlo, lleva una mano a mi centro y lo toca suave, aferro mis manos a la sabana y me aferro a ellas lo más que puedo.

Nada me preparó para lo que estaba por sentir, pero no es como si volviera un año atrás y me dijeran que me mudaría a un pueblo lleno de demonios y mucho menos ahora mismo tener entre mis piernas, al hombre más ardiente que eh conocido.

Empieza a lamer cada vez más rápido, pero manteniendo un mismo ritmo, antes de que pueda hacerme a la idea el dedo de él se encuentra en mi abertura y mis jadeos son cada vez más erráticos, estiro mi mano hacia el pelo de Astor.

— Córrete para mi Angel — sus ojos se encuentran con los míos y con eso estalló en placer, el orgasmo de la primera noche no se puede comparar a la sensación que está pasando mi cuerpo. Tardo unos segundos en procesar lo que estoy sintiendo, mi adrenalina baja y me siento cansada pero mis ojos solo lo miraran a él, como lame mis jugos, pero una vez que termina me ayuda a ponerme de pie — ahora ven.

Lo sigo, entramos a su baño, pero mi vista está perdida en algún punto extraño, todo mi cuerpo sensible.

Él se gira con una toalla y primero lo moja antes de volverse a mí.

— Te limpiaré y luego te daré una remera para que duermas mejor. — solo puedo asentir. él se arrodilla y separa mis piernas y limpia a toquecitos, tan delicado como si fuese una pluma.

Me agarra la mano una vez que termina y volvemos a la habitación, cuando estoy al lado de su cama me entrega una remera.

— Te ayudaré — dejo que me quite la remera y luego me pone la suya, por último, quita mi falda no sin antes dejar un beso en mis piernas.

—Gracias ... puedo ir a d-dormir a mi cama — aunque no quiero hacerlo.

— No — lo dice un poco molesto.

Su mano baja a mi espalda baja y me guía hacia adentro de las sábanas, pero antes de que él se acueste a mi lado se quita su remera.

Me arrastra a su pecho y entierro mi cara en su cuello, el olor de él me tranquiliza y trato de sincronizar mis latidos con los suyos.

—¿Qué significan tus tatuajes? — logro preguntar luego de un minuto.

— ¿Cuál de todos? — pregunta acariciando mi pelo.

—¿Los de tu espalda? —mis palabras salen más como pregunta que como respuesta.

— Son de origen antiguo — empieza a explicar — las líneas son un camino del infierno de donde provienen mis orígenes — se mueve un poco y lo miro — las líneas van también hacia mis brazos, como si el camino volviera siempre al mismo lugar. Después está el dragón que nos representa a nosotros, a los demonios que somos de aquí. — hace una respiración profunda antes de continuar —Después son cosas que he vivido en todo este tiempo.

Lo que estaba en mi mente era algo como decirle me gusta, pero mi boca me traiciono. 

—Me gustas... — no dios — eh perdón me gustan — dios que vergüenza, el solo se ríe.

— Lo se corazón, ahora vamos a dormir — con mis mejillas enrojecidas apoyo mi cara en su cuello y me abraza más fuerte.

—¿Mm Astor? — tengo que preguntarlo antes de olvidarme.

— Si corazón — vuelve con sus caricias.

—¿Sabes en donde puedo comprar pinturas y un lienzo?

— Si mañana te dejaré escrito, ahora duerme — sonrío y cierro mis ojos.

No pasa mucho para que mi cuerpo se relaje y la ensoñación empiece a atacarme.

....

Me despierto por la sensación de vacío, tardo un poco en darme cuenta en todo lo que pasó ayer y en donde estoy, miro hacia los ventanales y se puede ver recién el amanecer, Astor ya debió irse, giro hacia la mesa y puedo ver una nota.

Cuando despiertes ve al cuarto al final de mi pasillo, encontrarás todo lo que necesites.

                                                                                — A.

Trato de hacer memoria de a que se refiere, pero no lo entiendo, antes de levantarme, puedo escuchar unos pasos que vienen hacia aquí, pienso en Astor, pero dudo un poco.

— Pequeña pervertida, espero que estes cambiada — Habla Alexander antes de abrir la puerta.

—Buenos días — trato de que él no se dé cuenta que esta es la habitación de Astor.

Pero él lo sabe, su sonrisa es más grande que su cara.

— ¿Linda noche? — pregunta juguetón.

Me llevo las manos al rostro, dios, aunque debería sentir vergüenza por que el me acaba de encontrar en la cama de Astor con su ropa, siento todo lo contrario, con Alexander no existe la vergüenza o el arrepentimiento.

Me siento segura con mis pensamientos y emociones, sé que él no me juzgaría, aunque lo conozco hace más de un mes

— Vamos, nos haré el desayuno— se acerca un poco más y toma mi mano.

—¿Puedo bañarme? — pregunto cuando él me ayuda a ponerme de pie.

— Claro, pero antes dime como te gusta el cafe — salimos de la habitación.

—Con leche — respondo, una vez que él baja yo me dirijo a mi habitación

Una ducha caliente es lo que necesito en este momento.

Ya en la ducha la nota de Astor vuelve a mis pensamientos y me vuelvo a preguntar que sera lo que hay en el cuarto, ya tendre momento de explorar.

############################
¿Un poco de agua necesito yo también?🙈

Hola mis corazones espero que estén muy bien, les quiero decir dos cosas una es que tengo un grupo de lectores encontrarán el link en el perfil de mi Instagram, por sí quieren ser participe y dos lxs quiero mucho 🤍🦭

No se olviden de votar si les gusto.🔥

Un vínculo oscuro (Borrador) Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora