Enamorada de... ¿Mi jefe?

Capitulo adicional:

Los años han pasado extremadamente rápidos. Los niños han crecido y se han puesto hermosos. Mi mejor amiga Rachel me visitará hoy en la tarde, dice que tiene una gran noticia que contarme. Estoy acurrucada en el regazo de Derek observando todo el trabajo que tiene que hacer desde su computador. Ambos estamos en la cama.

- No te dejan tranquilo -suspiro- tienes tanto trabajo.

- Así es la vida cariño, tengo que ganarme la vida de alguna manera.

Me levanto de golpe y lo observo. Paso una mano por su rostro, los años han pasado y aún sigue hermoso.

- ¿En qué piensas? -me pregunta Derek-.

Sonrío.

- En lo hermoso que eres aún con el pasar de los años.

Derek sonríe.

- Cada vez te veo más hermosa -dice Derek- eres hermosa.

- Lo sé, soy muy hermosa -digo orgullosamente-.

- Retiro lo dicho, eres horrible.

Abro mi boca y mis ojos como plato.

- ¿Cómo se atreve a herir mis sentimientos señor Smith? -digo llevando una mano a mi pecho muy dramáticamente-.

- ¿Y cómo es posible que usted sea tan orgullosa señora Smith? -reclama Derek-.

Sonrío. Me acerco a él y lo beso apasionadamente. Jamás me cansaré de sus labios.

- Despégate de mi -reclama Derek- no me dejas trabajar y si sigues molestando te juro que te follaré ahora.

- Entonces hazlo -digo alzando una de mis cejas-.

- Tengo trabajo.

Paso una de mis manos por su rostro y sigo bajando por su pecho desnudo hasta el broche de su pantalón. Lo miro.

- Quieres distraerme.

Desabrocho su pantalón y meto mi mano en su bóxer. Comienzo a toquetear su pene y puedo notar cómo se ha excitado.

- Ya basta de rodeos hagámoslo y ya -dice Derek poniendo su Mac en la mesita que está al lado de la cama-.

Sonrío. Derek se abalanza sobre mi y comienza besarme.

- ¿Cómo te fue hoy? -le pregunta Derek a la adorable Amahia que tiene 12 años mientras entra en nuestro vehículo-.

- No saben lo que ha ocurrido -dice Amahia muy emocionada-.

- Primero abróchate el cinturón señorita -le digo-.

Amahia se abrocha el cinturón.

- Puedes continuar -le digo-.

- ¿Recuerdan a Michael? ¿El chico que les dije que me había ayudado a recoger los libros que se me cayeron? -pregunta Amahia muy emocionada-.

- Si si si -digo volteándome hacia ella muy emocionada- ¿qué ocurrió?

Amahia aguanta las palabras por un momento y se sonroja. Seguro la habrá besado.

- ¿Te besó? -le pregunta Derek mirando por el retrovisor-.

- Siiiii -grita Amahia-.

- ¿Qué? -grita Derek- ¿Acabas de perder la virginidad de tus labios?

Observo a Derek con el ceño fruncido.

- ¿Qué diablos es lo que has dicho? -digo soltando una gran carcajada-.

- Amahia, dijiste que nunca besarías a alguien -reclama Derek-.

- Pero no fui yo -exclama Amahia-.