Capítulo Quince - La verdad

136 7 4
                                    


Quince - La verdad: 

Abrí mis ojos frente al cuerpo de Mike. Estaba dormido, una habitación oscura, neblina en el patio, pasos que rechinaban en la madera. Alguien abrió la puerta, era yo, me sentía como una cámara de vigilancia, observando la escena sin poder intervenir. Mike se despertó.

—No grites, puedo cortarte la lengua con esto —me oí decir, mientras la hoja reluciente de un cuchillo brilló en mi mano. Sentí mi pulso acelerase.

—Erick, yo lo s-siento mucho —Mike comenzó a llorar al ver el cuchillo frente a su rostro.

—No, no sientes nada, mentiroso.

—No me mates por favor, te doy lo que sea.

—¿Lo que sea?

—Si, te lo juro.

—¿Podrías amarme realmente por tan solo un minuto?

Su silencio me rompía por dentro, pude verlo en su rostro... en la expresión de mi rostro.

—Siempre será así, a menos que yo haga algo, si no te tengo a ti, ¿para que dejarte a la disposición de todos? Lo único que quiero es tu sangre sobre mí, saber que de mí dependió tu último suspiro.

Clavé el cuchillo en su pecho sin pensarlo, sus manos se alzaron delante de mi pecho para tratar de detenerme, pero ya era muy tarde. Su sangre comenzó a bañar el colchón de la cama.

Saqué el cuchillo de su cuerpo, lamí su sangre del mismo, volví a apuñalarlo, un pequeño chorro de aspecto parecido al vino salió disparado de su tórax.

Él me seguía mirando, seguía vivo temblando por el miedo y la desesperación, se cayó al suelo arrastrándose por el piso, lo miré mientras se arrastraba como gusano, retorciendo su cuerpo intentando alejarse de mí.  

—No te vayas, por favor —dije haciendo puchero.

—A-ayuda —dijo sin fuerzas por la sangre que entraba a sus pulmones.

Lo tomé de sus piernas, su piel mestiza se marcó con mis dedos, arrastré su cuerpo de vuelta dentro de la habitación. Comenzó a llorar con fuerza, poco a poco estaba muriendo.

Voltee su cuerpo poniéndolo boca arriba, me senté sobre él, sobre su abdomen manchado de sangre.

—Me gustabas tanto, y solo preferiste a ese imbécil —dije clavando nuevamente el cuchillo en su abdomen, gritó de dolor. No había nadie para escucharlo su padre ya estaba desangrándose en el piso de abajo.

—A-ayuda —dijo con sus últimos alientos.

Mis manos comenzaron a temblar. Me miraba a mí mismo actuar de esa manera, estaba loco, desquiciado, solo tenía sed de sangre, me sentía impotente, en tercera persona, no podía alterar nada de lo que pasaba, como un fantasma que solo observaba.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, mientras mi otro yo estaba sonriendo frente al cuerpo de Mike.

Mis manos comenzaron a llenarse de sangre, las sacudí desesperado pero esta no dejaba de chorrear. Mis dedos se habían manchado, sentí presión en mi pecho, comenzaba a sospechar de algo, algo que temía con toda mi alma.

—Que lindo se ve tu rostro maltratado —dije acariciando el rostro inmovil de Mike.

—Que lindo te ves sin poder opinar sobre nada, que lindo te ves sin amarlo a él.

Vi como me incliné, mi cabello cayó sobre mi rostro mientras le dejaba un corto beso en los labios a Mike.

—Solté algunas lágrimas por tí, antes de venir sabía que este sería el último día de tú vida.

DETRIMENTO BL/+18Where stories live. Discover now