Capítulo 13 Desconfiar no es signo de debilidad

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Eda Miller

Los meses pasaban, ya era verano, la relación con Jahn era buena aunque seguía teniendo la parte de desconfianza. Era miércoles por la mañana, me encontraba en clase de economía

Última semana de instituto y seré libre, me evadí en mis pensamientos, a mediados de semana sería el baile de promoción, aquí era famoso la pedida de baile, hacían maravillas para pedir a las chicas que fueran al baile.

Al salir de la clase, la música resonaba del gimnasio, en medió del bullicio, un chico moreno se acercó nervioso hacia una chica rubia, la chica de la que llevaba enamorado desde el primer año. Con un ramo de flores en la mano y con el corazón acelerado, captó la atención de la chica que charlaba con unas amigas, sin demorarse le pidió que fuera su pareja para el baile. Con una expresión de emoción, la chica aceptó ir con él al baile y mis expectativas para el baile crecieron.

Solo me imaginaba si Jahn me pediría algo así, si sería igual de bonito.

Con las expectativas altas, busqué a mis amigas y caminamos hacia el jardín trasero del instituto, me habían dicho que fuera a verlo que era muy bonito y eso hice.

Allí, el sol se filtraba a través de las ramas de los árboles, pintando el jardín con flores, en medio de la brisa, Jahn nerviosamente, me esperaba en un rincón del jardín. Sostenía una caja envuelta de papel brillante y un ramillete mientras me observaba.

—Eda, ¿Te gustaría ir al baile conmigo?—Dijo arrodillados abriendo la caja

La caja contenía fotos nuestras y una corona que seguidamente se colocó en la cabeza.

Acepte el ramillete con una risa suave.

Era el momento que había estado imaginando, distinto a los que habían hecho, pero único.

Mis amigas observaban con alegría, lo que yo no sabía es que en ese momento lo tenían pactado.

—Gracias por esto Wilson-Sonreí mirándole a los ojos

—Tenía que hacerlo, eres especial Eda Miller—Dijo y me abrazo —El baile es el miércoles a las 20:00 en el gimnasio del instituto—Sonrió dándome un beso en el moflete y se fue

Después de eso se fue y yo me quedé un rato más con ellas.

—Ahora si se ha arrodillado—Dijo Becca riendo

—¿Cómo te sientes Eda, al ser la chica con más suerte de todo Colorado? —

—Nunca me he sentido tan bien como en este mismo instante—Reí mirándolas

Todas rieron, después de eso volvimos a clase.

Toda la mañana fue de lo mismo, personas pidiendo ir al baile, shows, música, luces y cosas bonitas. Nunca había experimentado algo así, en España era todo distinto, los bailes de promoción no se hacían, aquí vivían todo más intenso y se parecía a los libros que leía.

La tarde se pasó demasiada rápida, no hice demasiado, leer, buscar vestidos para ponerme en el baile, no me decidía por ninguno que había en mi fondo de armario a sí que, pase por el centro comercial a buscar un vestido.

Una vez allí, entre a tres tiendas distintas, me quede con la última, escogí un vestido de cóctel rojo, con hombros descubiertos y pierna abierta.

Después de eso pedí comida para llevar y me dormí.

Solo quedaba un día para el baile , me organice todo y baje a la planta de abajo donde estaba Tyler hablando con Adam.

—¿Cómo se le ocurre ? Ella es distinta a todas las mujeres con las que va—Miro al mas pequeño con el rostro serio

Cuando le pides un deseo a la lunaWhere stories live. Discover now