PÁJAROS CANTORES Y ROSAS (CoryoxLucy)

8. Vestuario

CAPÍTULO 8: VESTUARIO

POV CORIOLANUS

Lucy está dando vueltas en la habitación buscando ropa en el armario y yo solo observándola desde mi posición semi recostada en la cama con mi espalda en respaldo de nuestra cama. Hoy es el día del concierto, y está más nerviosa que de costumbre debido al embarazo. Lanza a mis pies de su lado de la cama cinco vestidos o conjuntos de dos piezas diferentes y los extiende bien para decidir que usar, luego arma conjuntos con algún tapado o chalina fina y brillante. Puedo reconocer la mano de mi prima en todos ellos. Tigris nos envía ropa a menudo a mí, Sejanus y al Covey. Apenas despertamos en la base, Sejanus se fue a visitar a su novia y yo vine a directamente a la casa de Lucy sabiendo que hoy necesitaba apoyo extra. No nos hemos dado más que dos besos tiernos, porque la cabeza de mi chica está en otra parte hoy. Puntualmente en lo que pasará en la noche y el poco tiempo que le queda para preparar todo.

−No sé qué ponerme, Coryo –confiesa evidentemente frustrada.

−Relájate, primero. Respira hondo y pon tu mente en blanco. No podrás pensar con claridad si sigues en ese estado.

−Sí, lo sé. Lo siento... es que estoy muy nerviosa.

Ella se acerca a mí cuando le hago espacio en la cama y se recuesta en mi regazo, depositando un beso inocente en mi cuello mientras yo la estrecho entre mis brazos.

−Hoy conoceremos a esa chica, ¿verdad?

−En teoría, sí. Será de forma muy casual. Te avisaré cuando me la presenten para que te ausentes del escenario un rato. Con suerte entre semana ya podrás realizarte los estudios médicos. Es necesario que ambas vayan el mismo día a primera hora para que Sejanus pueda cambiar las muestras sin levantar sospechas.

−Entonces, esto pronto va a terminar. ¿Pero qué haremos con los ultrasonidos?

−El padre de Sejanus nos enviará un equipo portátil especial para eso; y cuando el embarazo esté más avanzado, irás al hospital.

Lucy levanta la mirada y me observa pensativa.

−Pareces muy confiado. ¿Crees que esa chica mantenga su boca cerrada?

−Eso quiero creer, cariño. Pero si ha mantenido silencio respecto a la relación de su amiga con Sejanus... ¿Por qué nos delataría a nosotros dos?

−Tienes razón. Sejanus también quedaría pegado si habla sobre lo nuestro. Probablemente, él tendría que ser enviado a otro Distrito y su amiga quedaría destrozada.

−Por eso mismo... podemos confiar en ella, sea quien sea. Ya te dije que no la conozco ni de vista.

Levanto la blusa de mi novia para observar su vientre cada vez más redondo, dejando atrás su antiguo abdomen plano. Lo acaricio con delicadeza. Tal vez, Lucy tenga tres meses de embarazo como mucho.

−¿Y si usas un conjunto más entallado a la cintura, le agregas un corsé que oculte esta parte de tu cuerpo y le agregas una falda suelta con mucho volumen? Nadie notaría que tu vientre ha crecido –propongo.

−¿Cómo me vestí para los juegos?

−Como quieras –le digo sonriendo–. Tigris solía decir que los colores como el azul noche, el gris, el negro, el marrón oscuro, el violeta o el verde estilizaban la figura y hacían ver a una persona más delgada.

Lucy lo considera unos instantes, luego baja su blusa y se pone en movimiento con rapidez. Busca algo específico, esta vez en su vestidor. La observo removiendo perchas a través de la puerta abierta. Vuelve con corsé azul y negro con encaje y cintas negras cocidas o formando un moño en el medio de su pecho, también tiene mangas cortas de encaje negro y un pequeño vuelo del mismo material debajo de la cintura. Nunca lo había visto en todos nuestros años de relación. Lo debe haber comprado o conseguido recientemente, pero como no ha organizado ningún show hasta ahora, no ha tenido oportunidad de usarlo.