Capitulo 19

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El Americano apenas despertaba, miro hacia la ventana, habían llegado ya hace mes y medio y aún se encontraba en ese hospital. Lo habían operado y curado todas sus heridas además de estar recibiendo atención psicológica por el trauma que había vivido

Pero el menor se sentía muy triste y solo pues extrañaba mucho al ruso del cual no sabía nada, llevaba ya varios días sin tener muchas ganas de hacer algo, cosa que tenía muy preocupado a su familia. En ese momento entro su hermano Canadá con una caja de panqueques de la tienda favorita de su hermano

- hola Ame- el canadiense se acercó y le sonrió dulcemente

- hola...- el gringo lo mira

- dormiste bien?- este busca la mesita para comer del hospital

- ujum- este miro hacia la ventana

- traje tus favoritos, de Nutella, maní y fresas- este sonríe y pone los panqueques en la mesa

- ummm- este ve los panqueques- ya puedo comer eso?- este mira al canadiense

- no lo se... Pero se que te va a hacer feliz, o quieres seguir comiendo la comida de este lugar?- este lo dice con un tono de broma

El gringo se ríe levemente por aquello para así ver los panqueques y acomodarse con ayuda de su hermano y acercar la mesa y empezar a comer, disfrutando por completo aquello, pues la comida que le daban en el hospital era horrible, el canadiense sonrió con dulzura para así revisar su teléfono y levantarse, saliendo de la habitación y dejando confundido al americano

- ah? Canadá?- el gringo intenta ver a dónde se fue su hermano

El estadounidense decidió no tomarle mucha importancia a eso y siguió comiendo con gusto, la comida lo reconfortaba mucho y su familia lo sabía muy bien. Después de unos pocos minutos llegó el canadiense quien entró con un hermoso ramo de rosas blancas y un enorme girasol en todo el centro

- y eso?- el gringo se sorprende por eso y deja de comer

- te lo mando alguien especial- el canadiense le da el ramo

U.S.A agarro la tarjeta que tenía el ramo para así sonreír con emoción... Se lo había mandado el ruso, la tarjeta tenía un mensaje así que América la abrió y empezó a leerla. "Se que no te he escrito o llamado, pero me tienen agobiado con tantos problemas, te mando estás flores para que me perdones mi estrellita. Te ama. Rusky". Eso era lo que decía aquella tarjeta, cosas que lo hizo sonreír con amor y ternura tras leerla

- ya quiero verlo~- el gringo mira a su hermano

- debes tener paciencia Ame- este ríe levemente - por lo menos mando una señal de vida con esas flores-

- jsjsjs pues si- este se ríe y mira el ramo... Ya deseaba tener entre sus brazos a su amado ruso

-...-

El ruso se encontraba sentado en aquella enorme mesa junto a otros que pertenecían al gobierno y también varios de la militancia, estaba cansado y ya se quería ir de ahí, seguia preguntándose cómo podía ser posible que se estuviera tardando tanto y eso se debía a qué los estúpidos con los que tenía que arreglar las cosas sacaban más problemas

- bueno, todo esto fue culpa de ese gringo que decidió meterse a nuestro territorio!!- el militar dice con rabia - esos gringos como siempre haciendo lo que se les dé la gana-

- ese no es el problema! El problema es que 20 soldados fueron asesinados!- este miro al militar y miro a todos incluyendo al ruso

Todos se pusieron a discutir pero el mayor solo miro a otra parte deseando que se callarán rápido y que ya fuera la hora de almorzar para irse de ese maldito lugar. En ese momento la alarma que daba a entender que era la hora de almorzar sonó cosas que hizo sonreír al mayor y cuando vio que ya habían salido varios el se fue rápidamente

Russia salió del lugar y empezó a caminar hacia la salida mientras revisaba si ya habían entregado el ramo de flores que le había mandado a su querido Omega, pero en ese momento alguien lo detuvo en seco. El ruso miro a quien lo detuvo y soltar un suspiro pesado

- que quieres?- el ruso se cruza de brazos y mira al gobernador de Moscú

- tu fuiste el que mato a esos militares verdad?- este levanta una de sus cejas

- ummm- este desvía su mirada - porque vienes a decirme eso?-

- porque creo que es obvio... En la forma en que murieron... Además de que parecía que tenías una relación cercana con ese gringo...- este se cruza de brazos - lo se porque varios del pueblo se lo dijeron a mis informantes-

- umm pues si... Si tenía una relación bastante cercana- este recuerda todos los momentos divertidos que tuvo con el menor

- mataste a esos soldados por un americano?- el frunce el seño

-...- este se ríe levemente - porque los defienden tanto? Ellos se buscaron su muerte al hacerle eso a ese estadounidense... Más bien, deberíamos estar felices de que no estemos metido un problema internacional- este mira con desprecio al gobernador

- ellos no merecían un destino tan cruel- este se acerca más al mayor

- pues el estadounidense tampoco merecía que le hicieran eso- este lo mira desafiante - supongo que fue el karma que hizo su debido trabajo, aveces la vida no es justa- este sonríe de manera burlona - además... Cómo yo podría con tantos soldados armados solo? Sería un poco imposible... ¿No cree?-

- pues con su físico y altura lo creo muy factible- este entrecierra sus ojos

- bueno, no es mi estúpido problema que tú creas que yo haya hecho eso...- este se acerca al hombre - ahora con su permiso me quiero ir a tomar una deliciosa Solianka que venden a un par de cuadras de aquí... Tengo mucha hambre, que tengas una excelente tarde-

El ruso se fue, sin antes darle un pequeño golpe en el hombro a aquel gobernador quien solo lo siguió con su mirada con algo de rabia. Russia llegó a su auto y se empezó a reír por la actitud que tenía ese idiota, actitud que no era mucho de su agrado

- como sea...- este ve su teléfono el cual tenía como fondo de pantalla una foto del menor - ya quiero verte mi estrellita~- este suelta un suspiro cansado y con esperanza, para así encender el auto. Ya no veia la hora de poder ir a ver a su amado...

Sangre en la Nieve | countryhuman | Rusame | omegaversDonde viven las historias. Descúbrelo ahora