Capítulo 26

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Porque JungKook era vanidoso, le gustaba verse bien y estar en forma, cambiaba de estilo varias veces !No tratando de encontrarse a sí mismo, JungKook sabía quién era) a veces con un estilo más sutil y delicado y otras veces con un estilo más brusco, cuidando su piel y su cabello y por supuesto, viéndose en el espejo para sentirse orgulloso de sí mismo, porque se veía bien y era lindo.

─Me queda lindo. ─ Se dijo a sí mismo mientras se veía en el enorme espejo de su habitación, probandose unos pantalones que había pedido por Internet.

JiMin estaba casi muerto recostado en la cama, había llegado recién de sus prácticas de baloncesto en la escuela, así que se sentía cansado, pero igual prestaba ligera atención a su novio, porque quizá sí como quizá no, su opinión podría ser importante para JungKook.

─ ¡Hey! ¿Cómo me queda? ─ le llamó JungKook, y JiMin talló un poco sus ojos para poder ver mejor a su pareja.

─Te queda lindo, tienes un trasero enorme. ─ dijo JiMin, no mentiría, eso lo hacía feliz.

─ ¿Estoy gordo? ─ JungKook se miró de nuevo al espejo con el ceño fruncido.

JiMin escucho un sonido de alerta en su mente.

─ No estas gordo, pero tienes unas nalgas muy bien definidas por el ejercicio amorcito. ─ JungKook se relajó al escuchar eso, y JiMin finalmente dejó de escuchar su alerta mental.

JungKook siguió probando se ropa por un rato, pidiendo algunas veces la opinión de JiMin, cosa que realmente no sabía porqué seguía haciendo, si a los ojos de JiMin, todo le quedaba divino, precioso y fabuloso.

pasó un rato más, en el que JungKook se hizo una mini rutina de cuidado facial, bajo la cuidadosa mirada adormilada de JiMin, que lo esperaba pacientemente para poder ver alguna película juntos.

Pero era una trampa, JiMin solo quería dormir acurrucado con su gatito negro.

─Oh, JiMin, he usado un nuevo suero estos días ¿no ves mi rostro más luminoso? ─ preguntó JungKook, moviéndose de su tocador hacia la cama, para que JiMin pudiera verlo mejor.

Pero es que JiMin no tenía ni idea de a qué se refería JungKook ¿era una pregunta con trampa? ¿A caso no sabía JungKook qué a sus ojos se veía perfecto en cada momento? pero JiMin no era tan cobarde, así que respondió.

─ Uh, sí, se ve más hidratada ¿cuál usas? ─ había sido la respuesta correcta, pues JungKook sonrió un poco y le. mostró el pequeño frasco.

Un rato más pasó de JungKook y su (reitero) mini rutina, hasta que finalmente JungKook comenzó a guardar sus cosas para recostarse junto a JiMin.

JungKook era vanidoso en el buen sentido, alguien limpio y con un cuidado personal impecable, siempre procurando verse presentable en cualquier ocasión, incluso en el escenario más improbable JungKook quería verse bien.

Es por eso que a JiMin le enorgullecía mucho conocer ese pequeño lado descuidado de JungKook, donde lo había visto recién despierto, con alguna mancha de baba en la mejilla y el cabello revuelto, o transpirando y cansado por el ejercicio y la ropa con manchas de sudor.

Pero a JiMin no le podía importar menos, si cada vez que veía a JungKook existir se enamoraba más.





Bun bunny  𖤐  jikookDove le storie prendono vita. Scoprilo ora