CAPÍTULO 8

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Tras esa junta se encontraban tanto Harumi como Matsuri sentadas una frente la otra, tomando una taza de café en una cafetería que encontraron cerca del lugar de la junta, ninguna de las dos decía siquiera una palabra, si bien no estaban peleadas era un poco incómodo el ambiente.

- ¿Crees que a Yuzucchi le gustaría este café? - Preguntó Harumi mientras veía como Matsuri simplemente suspiraba agotada.

- Le gustaría solo porque estamos nosotras - Respondió la peli-rosa mientras volteaba su vista al ventanal.

- Tienes razón - Mencionó Harumi mientras daba un sorbo a la taza - La extraño demasiado - Dijo al aire mientras notaba un leve asentimiento de la menor.

- Pase varios años lejos de ella sin poder verla, pero estos seis meses han sido peor que todos esos años, porque ahora no puedo simplemente tomar un tren y llegar a verla - Mencionó siendo ahora Harumi la que asiente.

- Bueno, ahora ella es feliz en Europa, ¿Inglaterra verdad? - Pregunto para que la menor simplemente asintiera - Aparte en una buena universidad, ni siquiera nos ha dicho que carrera están estudiando - Dijo en forma de queja, la menor solo se reía de manera incómoda.

- ¿Tu crees que ella se olvide de nosotras? - preguntó Matsuri con un claro tono de preocupación, cosa que pocas por no decir nunca había escuchado en ella.

- Solo espero que no - Dijo Harumi dándole el último sorbo a su café y sacando el dinero para pagar su cuenta - Mejor dicho, estoy segura que no lo hará - Dijo para acomodar sus cosas e irse del lugar.

Matsuri realizó las mismas acciones que Harumi y así ambas se fueron del local, dieron unas cuantas vueltas por la ciudad sintiéndose extrañas, es verdad que antes había ocasiones donde ellas dos salían a solas sin Yuzu, y el ambiente era cómodo, pero con la partida de ella las salidas no son las mismas, los chistes se sienten vacíos, la compra de ropa dejó de ser divertida, el miedo por que Yuzu no estuviese bien desalentaba a ambas, haciendo que esas salidas duren menos de lo que uno piensa.

Pasados unos cuantos días y al celular de Harumi había llegado un mensaje, un número desconocido, afirmando ser Matsuri la cual había cambiado de número, en el mismo mensaje decía que querían juntarse para dar unas cuantas vueltas por el centro, y ver como ambas podían animarse, con pesadez respondió que estaría allí, a paso lento sacó su mejor ropa y se la puso, acomodo su cabello y salió de su hogar.

Pasados los minutos finalmente llegó al punto de encuentro, siendo este los puestos de comida del centro comercial donde siempre frecuentaban, con una rápida mirada busco unos cabellos rosas, los cuales muy difíciles no fueron, pues parece que es la única chica en todo Tokio con ese color de cabello, calmadamente se acercó a la menor, aun si poder sacarse el pesar de que Yuzu se encontrara tan lejos.

- Demonio rosa, ya llegue - Dijo mientras notaba la sonrisa burlesca de la chica.

- Harumi se que quieres tener una vida privada conmigo, pero tener un número distinto para nuestras conversaciones ¿No eres muy romántica verdad? - preguntó Matsuri dejando completamente helada a Harumi.

- ¿Qué dices? Si la que cambió de número fuiste tu - Dijo sacando su móvil para mostrar la conversación.

- ¡¿Qué?!, se supone que tu cambiaste de número - Dijo Matsuri confundida sin saber que pasaba.

Ambas entendieron que fue un tercero el que les pidió que se juntaran, ahora no sabían ¿Quien podía ser ese tercero?, dudaron mucho que fueron unas de las otras chicas, pues si ellas querían juntarse simplemente mandaban el mensaje a su nombre, no harían nada de estos planes extraños, no sabían quién podía hacer eso . . . ¿Tal vez Mei?

¿Ahora si me quieres?Waar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu