"Nothing makes me to feel more alive"

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Los medios de prensa habían enloquecido, la empresa intentaba aplacar los rumores. Las fotos que habían publicado algunos fanes al encontrarse a cierta pareja en medio de una de sus citas no ayudaban con los planes del CEO.

Los videos de una cita en las cercanías río Han fueron los primeros en ser la pólvora que se necesitaba para ser el detonante que comenzaría con la avalancha de suposiciones acerca de la posible relación entre dos miembros de la famosa boyband, a eso le siguieron las fotos y videos tomados por seguidores o simples transeúntes que observaron a la pareja pasear por Santa Monica después de un concierto. Lo que sí provocó la ira del manager fue ver a Jeonghan y Joshua siendo captados por el lente de varias cámaras en Italia teniendo un íntimo desayuno, chillando como niño inconforme al percibir como muchos videos hacían zoom en un escandaloso detalle: la marca en el cuello del omega, la cual atrajo cientos de reflectores.

Muchos internautas comentaban que hacían una linda pareja, otros creían que Jeonghan había pasado muy rápido de un interés amoroso a otro, habían fanes felices, habían fanes enojadas.

El CEO golpeó sonoramente la mesa, desaprobando la idea de hacer un comunicado oficial acerca del romance del alfa y el omega, no le convendría tener en su contra a fanes poderosas, no sería una buena inversión desde su punto de vista.

Seungcheol quien había sido convocado a aquella reunión, al igual que Jihoon y Soonyoung mostró su desacuerdo con continuar aquella farsa que el CEO y unos de sus manager habían tejido.

Eran idols, no títeres, no eran marionetas de sus fanes, ni sus vidas les pertenecían a ellos, eran suyas. Adoraban los reflectores pero con el tiempo buscaban el mejor lugar para ocultarse de ellos.

Los rumores iban y venían, las personas se olvidaban fácilmente de las palabras, los finales eran tan sólo inicios, sólo les quedaba correr en búsqueda de lo que deseaban.

Los tres líderes y dos de los managers del grupo consideraron adecuado la idea  de oficializar el noviazgo de Jeonghan y Joshua en las redes, aunque fuera solo una formalidad más debido a que  medio mundo estaba enterado de aquello, la pareja había sido cuidadosa, sin embargo, ninguno de los dos pudo evitar emocionarse al escuchar al otro llamarle o acercarse, así de mágico era el amor.

Estarían rodeados de escándalos, agotados de luchar contra ellos, lideando con el obsesivo odio y amor, eran muy jóvenes, así que sólo corrieron, sabiendo que no los ayudarían muchos, ya que estaban ocupados ayudándose a sí mismos, no iban a cambiar, si no se cambiaban a sí mismos. Sólo ellos eran capaces de decirse que no estaban tan cansados como para luchar, era sólo cuestión de tiempo, a unos pocos pasos estaba la línea del final de aquella exhaustiva carrera.

A regañadientes el CEO permitió que el equipo que manejaba las redes sociales del grupo realizaran el dichoso anuncio.

Fue polémico ¿Acaso no todas las noticias lo eran? Hicieron lo que pudieron, muchos gritarían de alegría o ira en su interior, se olvidarían rápidamente de ellos.

Jeonghan abrazaba a Joshua mientras ambos dejaban olvidada frente a ellos una película que pretendían ver. El alfa depositaba cariñosos besos en el rostro del menor quien sonreía de puro júbilo, aferrándose más al mayor.

El de cabellos negros le sonrió al joven castaño quien pasaba las páginas de la revista para la cual habían modelado ambos hace unos meses, burlándose cariñosamente del cabello rizado del de angelicales facciones quien respondía a las "atroces" críticas con besitos en la marca de emparejamiento en el cuello de Joshua. El menor soltó una risita que fue una encantadora melodía para el enamorado corazón de Jeonghan.

Jisoo dejó a un lado lo que hacía al ser apartada delicadamente la revista de sus manos, centrando toda su atención en el alfa frente a él.

Yoon tomó suavemente las manos del omega, entrelazándolas con las suyas, sonriendo débilmente, sus comisuras temblaban, no sabían si llorar o reír.

¿Quién les diría a sus pequeños yo que ganarían aquella batalla? ¿Quién estaría asustados de su pequeños antiguos yo?

──Gracias por no darte por vencido.── En susurro intentado no llorar, con un nudo en la garganta Jeonghan confesó cabizbajo mirando las manos entrelazadas de ambos. ──Por darnos una segunda oportunidad, por enamorarte de mí, por estar aquí, por darme aliento cuando lo necesité, por no renunciar, por ser quien eres.── Con cada palabra una lágrima recorría los acaramelados pómulos de Jisoo, quien soltó las manos del alfa sólo por atraerlo a un abrazo, donde unieron no sólo sus cuerpos, sus almas necesitadas de amor también lo hicieron.

El menor sólo se apartó para acariciar con devoción las mejillas del mayor, uniendo ambos sus frentes mientras estaban ebrios de sus propias lágrimas.

──Gracias a ti por amarme a gritos, por hacerme crecer. Era demasiado inocente y amable hasta que este circo de la vida me hizo tomar decisiones no tan buenas.  Por herirme, por reparar mi corazón, por amarme, por no enterrar este amor. Por todo.── Joshua también le agradeció.

Los labios de ambos se unieron sellando una nueva promesa, una que sólo ellos sabrían.

Así era la vida, como un poema con cientos de versos, llenos de metáforas y símiles, de frases confusas, melodías, pacientes que no durarían ni una hora en el asilo en el cual nos criaron, de valientes y cobardes, sobrios y ebrios, amantes y odiosos, por ello continuaba persona cantando su propia línea en las estrofas que componían su vida, de la cual sólo éramos un trabajador más del departamento de poetas torturados.

Say Don't Go㆐JIHAN Where stories live. Discover now