Entre Balas Y Secretos

04

Ojos Cafés.

Francia, 10 años atrás

Genuina 

Toujours ausii authentique - me dijo su voz

Tu ne devrais pas demander quelque chose que tu sais déjá, idiot - respondí tranquilamente

Una sonrisa apareció en su rostro y se acercó lentamente a mi, una mano intentó acariciar mi mejilla derecha pero fui más rápida que él y di un paso hacía atrás.

Aussi froid que jamais - suspiró pesadamente

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Lentamente abrí mis ojos pesadez, la cabeza comenzaba a dolerme, mi mirada esta puesta en el techo, pero algo llamó mi atención. No estaba en mi habitación y cuando reaccione, mi corazón se aceleró y me senté; pude ver algunos cables conectados en mi muñeca y suero.

¿Dónde estoy?, Es la pregunta que esta rodeando en mi cabeza pero los recuerdos aparecieron en mi cabeza, él apareció.... apreté mis puños con fuerza, todo fue planeado, una emboscada; quería matarme pero logré huir de ahí, pude herirlo pero por la herida pude haber muerto.

Era cuestión de minutos y yo misma lo sabía, lo único que recuerdo era que me encontraba en ese callejón, esperando mi muerte pero cerré mis ojos y ahora me encuentro en una habitación, miré mis heridas y están suturadas.

¿Dónde estoy?

Volví a hacerme la misma pregunta y no lo pensé dos veces, me quité los cables conectados a mi cuerpo y mis pies tocaron el frío suelo, tomé una sudadera que me queda demasiado grande y con los pies descalzos caminé por esa habitación. Si fuera él, no estaría aquí ni mucho menos atendida, alguien más me salvo o él mismo lo hizo para torturarme.

Dos opciones tenía en este momento, la habitación no se mira nada sospechoso, decidí abrir la perilla de la puerta con mucho cuidado y silencio a la vez; miré un pasillo y una puerta en frente de esta, al mirar hacía los lados no hay ninguna persona, salí de ella y miré.

Decidí ir del lado derecho, estaba alerta para poder pelear y huir de este lugar. Cada paso que daba mi corazón se aceleraba, pude ver notar luces encendidas y voces, me detuve en seco pero esas voces comenzaban alejarse y al caminar rápidamente sin hacer ruido.

Observé una puerta principal, que solo era cruzar y salir de aquí. Las probabilidades que puedan dispararme eran altas pero no me importaba volver a salir lastimada con tal de salir, me recargué en la pared y seguí escuchando las voces masculinas pero hablaban en otro idioma que no entiendo.

Escuché pasos alejarse y esperé unos minutos, eran eternos, pero al no escuchar nada; estaba decidida en correr a gran velocidad y cuando me asomé de reojo no había nadie, pero antes que diera el primer paso, me giré rápidamente y di una patada en la entre pierna de esa persona.

Escuché como jadeo y rápidamente golpe su rostro, corrí hacía ese hombre y di un golpe con la rodilla nuevamente en su rostro; ese hombre cayó al suelo. Mi respiración se hizo agitada, al darme la vuelta ya estaba dispuesta a correr pero me detuve cuando pude ver esos ojos cafés que había visto en el hospital.

Ambos conectamos nuestras miradas y ninguno la despegó del uno del otro.

Ya despertaste fiore - habló tranquilamente 

¿Qué hago aquí? - pregunté molesta 

Escuché quejidos detrás mío y al mirar de reojo ese hombre se levantó con mucha dificultad, estaba por acercarse a mi cuando la voz de ese hombre lo detuve.

Se fai un passo verso di lei sei un uomo morto - habló con la voz ronca

Ese hombre se quedó en su mismo lugar y cuando volví a mirarlo, luce tranquilo. Su traje negro dejando descubierto tres botones, pude ver su pecho desnudo, por unos segundos mi mirada estaba en su pecho pero rápidamente levanté para seguir mirarlo.

No deberías estar de pie - dijo - Aún estas en reposo

¿Y estar en una casa de un extraño? - pregunté sarcásticamente

Mi nombre es Jimin - respondió - Y estas en mi apartamento 

Eres del hospital - hablé 

Jimin.- Veo que me recuerdas aún - dijo tranquilamente 

¿Olvidar a un paciente que llegó con dos heridas de bala? - hablé - ¿Delincuente debería decir?

 Jimin.- Tu as une fleur á langue pointue - me dijo fijamente

Veo que entiendes el francés bien - lo miré seria

Jimin.- Me consideró una persona con mucho dominio en los idiomas - sonrió levemente

Veo que tu me salvaste - me crucé de brazos - ¿Debería darte las gracias?

Jimin.- Un poco - se acercó a mi - Estás mejor, capaz de golpear a uno de mis hombres 

Son un poco débiles - respondí 

Escuché una risa salir de sus labios, lo miré confundida pero hizo señas con sus dedos y ese mismo hombre que golpe se acercó a él y se fue de nuestras vistas.

Jimin.- ¿Quieres tomar una taza de café? - me preguntó - Es la mejor manera para agradecerme de haberte rescatado 

Levanté una de mis cejas, la probabilidad de huir era ahora mínima, pude ver observar a varios hombres cercas de nosotros y me dio mala espina.

Jimin.- Solo estaremos nosotros solos - dijo - No te preocupes fiore

Si me niego eres capaz de matarme - levanté mis hombres y suspiré - Bien aceptó

Jimin.- Jamás haría algo así - respondió 

Al escuchar esas palabras, sentí escalofrío. Me pidió que lo siguiera y al seguirlo, esos hombres salieron por la puerta que vi y me dejó a solas con él; ingresamos a su sala, que es de tamaño mediano, y me detuve al ver la vista en frente de mis ojos.

Jimin.- Veo que te gusta la vista que ofrece Southwark - dijo tranquilo

No pude responder, estoy maravillada por la vista. Nunca había visto la vista desde las alturas al ver el Tower Bridge, siempre lo miraba de lejos pero ahora estoy sorprendida, me acerqué con paso hacía la ventana. Mis manos tocaron las ventanas y las luces, los colores era maravilloso.

Jimin.- ¿Te gusta la vista? - preguntó cerca de mi oído 

Escuchar sus palabras muy cerca mío me estremeció y cuando giré a verlo, él ya estaba muy cerca mío.

Jimin.- Sei cosí bella fiore - habló 

¿Qué idiomas hablas? - pregunté

Jimin.- Italiano fiore - respondió 

No entiendo la razón por la cual me trajiste aquí - le dije - Podrías haberme dejado en un hospital o haberme dejado morir

Jimin.- Jamás - negó - Y respondiendo a tu pregunta es mejor tomar un buen café antes de responder ¿No lo crees bella?