Frialdad [Hannigram]

Parte 3

#Hannigram #Corto #Frialdad #Parte3

Will se miró al espejo por más de un minuto mientras pensaba si debía arreglarse la barba, al final optó por arreglarla un poco.

Salió de su habitación y suspiró al ver el montón de ropa sobre su cama, jamás había sido una persona indecisa con la ropa pero... Ahora por una extraña razón quería saber vestir bien aunque no tenía idea de cómo.

Ni siquiera sabía porque se sentía tan nervioso, era simplemente el día de su cita con Hannibal y normalmente iba a terapia al salir de su trabajo, no entendía está necesidad que tuvo de conducir hasta su casa para tomar un baño y cambiarse de ropa solo para eso... Se estaba comportando como un idiota.

Se miró por última vez en el espejo y estuvo conforme con su reflejo.

Llego al consultorio con cinco minutos de anticipo, el sofá en la sala de espera era cómodo y nunca lo había notado pero el ambiente del lugar olía a Hannibal. Will torció los ojos hacia arriba, no entendía porque su mente solo estaba llena de Hannibal.

Escuchó a Hannibal abrir la puerta.

— Agente Graham. - Dijo Hannibal mientras se apartaba un poco para dar a entender que ya podía entrar.

Will  sintió sus mejillas arder al darse cuenta que Hannibal ni lo había mirando del todo, se sintió como un tonto.  ¿Que esperaba obtener por arreglarse un poco?

El Doctor Lecter tomo asiendo en su sofá.

— Entonces... ¿Que era eso tan urgente que necesitabas conversar?

Las alarmas de Will brincaron, no había ningún tema urgente y había olvidado eso...

— Yo... Realmente ya no importa. - Dijo Will al no encontrar que decir. - Es solo mi mente llena de un montón de pensamientos.

— Uhmm... ¿Que tipo de pensamientos?

Will estuvo a punto de decir que todos sus pensamientos últimamente solo giraban entorno a Hannibal pero se contuvo.

— De los caso. Y mis sueños son...

— ¿Aún sueñas con Garrett Jacob Hobbs?

— No, no... Con él.

— ¿Con quién sueñas?

"Contigo" pensó Will.

— No lo recuerdo.

— Deberías descansar un poco más... Quizás una semana.

— Doctor Lecter... Fue realmente grosero el día en que lo visite. - Will se había prometido que no sacaría ese tema de conversación pero simplemente no soportó.

— No entiendo a que se refiere Agente Graham. Creo que es más grosero aparecer sin una invitación. - Está vez Hannibal lo miró directamente a los ojos.

Will se sintió un poco desequilibrado, ¿Que era esto que estaba sintiendo? Se está a comportando como un niño malcriado al que le han arrebatado el dulce que tenía en su mano.

— Dijo que su hogar siempre estaría disponible para mí.

— Como amigo. Me pediste que fuera profesional, - Hannibal sonrió con ironía - Recibirte a esa hora no sería muy profesional de mi parte.

— Antes no te importaba.

Hannibal entrecerró los ojos con suspicacia.

— No te entiendo Will. - Hannibal habló y Will sintió un temblor por su espina dorsal al escuchar luego de tanto tiempo su nombre en los labios de Hannibal. - Primero me pides que sea profesional y que me comporté a tu al rededor, luego... ¿Me reclamas por comportarme como lo haría con cualquier paciente?

— Yo... - Will sintió las mejillas arder al escucharlo de esa manera.

— Creo que lo mejor será que seas remitido a otro doctor.

— Absolutamente, no. - respondió Will al escuchar a Hannibal decir eso último, no quería verse con otro doctor, no quería y no lo aceptaría.

Se puso de pies y camino en círculos por el consultorio de Hannibal.

— Tengo dos amigos...

Hannibal miró a Will sentado desde su sofá, prestándole toda su atención.

— Digamos el señor A y la señora B. El señor A siempre ha sido extremadamente atento y hasta cierto punto cariñoso con la señora B pero ella no le correspondía nunca... Siempre fue...

— ¿Grosera? ¿Malhumorada?

— Y... Sí, algo así. La señora B le pidió al señor A qué no la molestará más y el señor A lo cumplió... Ha hecho todo lo que la señora B le pidió pero ahora... - Will miró a Hannibal directo a los ojos antes de decir - La señora B se encuentra añorando la atención del señor A y...

— Pienso que la señora B es una vanidosa, debería aprender valorar más los sentimientos antes de hablar con el señor A, quizás deba decidir que son realmente sus sentimientos - Hannibal se pasó la punta de la lengua por sus labios y Will siguió ese sutil movimiento con su vista - O quizás la señora B termine lastimando inmensamente al señor A.

Will se mantuvo en silencio unos segundos antes de volver a hablar.

— Tienes razón. Ya sé que consejo darle la próxima vez.

Hannibal miró su reloj y se puso de pies.

— Ya es la hora.

— ¿Qué? ¿Tan rápido? - Will frunció el ceño y reviso su reloj, efectivamente ya había pasado su hora a Hannibal antes jamás le había importado la hora.

— Ya debo irme, Agente Graham.

— Entiendo.

Mentira, Will no entendía nada... Esta última conversación con Hannibal lo había dejado más confundido. Realmente necesitaba un abrazo

#Conti?