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Narrador omnisciente.

Ambas féminas se encontraban en silencio.

La presidenta de Shinhwa observaba de manera fija y serena a la joven de cabellos burdeos.

Por otro lado estaba Katheva, que se encontraba siendo observada por Jiyoung.

La joven se acomodo un poco en su asiento, y se aclaro la garganta.

—Entonces, señorita Yoo. Espero que mi presencia no sea una molestia mientras este en su territorio...

Katheva recibió un suave asentimiento.

—Puede estar tranquila, Ruinoc. Nos es agradable su presencia por estos lados.

Jiyoung miró a Katheva y después miró a la puerta de su oficina.

Poco tiempo paso para que dos hombres entrarán e irrumpieran la pequeña reunión.

—¡Presidenta!
.
.
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—Señorita Jiyoung, lamento la inconveniencia.

Un hombre vestido de negro se dirigió a la presidenta.

—Por favor, explíqueme la situación. —la de cabello azabache miró al hombre.

—La cosa es... —tratando de encontrar las palabras, este fue interrumpido por otro individuo.

—Lo explicaré. –esta vez un hombre de traje verde habló. —. Este miembro del comité quiere combatir contra Jisuk... —Se aclaró la garganta. –. Y desde luego que es mejor que batallen en un lugar donde no llamen la atención, por eso decidimos traerlos aquí.

—Inhyuk Goo. Wooin no es uno de nosotros. —hablo el de gabardina. —. Él simplemente esta bajo nuestra observación.

—¿No es la misma cosa? —Inhyuk miró mal al otro. —. Y si es así ¿no debería controlarlo mejor? Ten algo de responsabilidad.

—Más bien me gustaría pedirte que te encargaras mejor de tus propios miembros. —el de ojos grises devolvió la mala mirada. —. Creo que hay una gran posibilidad de que Wooin fuera provocado por Jisuk primero.

—¿Qué? ¿Cómo te atreves hablar de esa forma en nuestro territorio? —amenazó el de traje verde. —. ¿Acaso quieres pelea?

—Será un placer.

Ambos sujetos se miraron de forma agresiva, buscando pelea.

Por otro lado, la presidenta, que había estado escuchando la explicación, ahora ya una discusión, decidió intervenir.

—Ambos detenganse. —les reprochó. Los tomó por sorpresa y después suspiro. Volteo a ver a la joven de cabellos burdeos qué miraba a los más adultos. —. Lamento los inconvenientes qué has visto, Katheva.

—No pasa nada... —le sonrió a la azabache.

Katheva observó a los jóvenes en el espacio de entrenamiento, ambos pareciendo gallos de pelea.

Por otro lado, Inhyuk se acercó a su presidenta y pregunto por la menor, recibiendo una breve explicación de quien era.

—Oh.

Se alejo y al instante ambos jóvenes activaron su habilidad. Dando indicios de un combate.

—¡Imbécil, eres carne muerta! —el de cabello gris amenazó.

En cambio, el joven de lentes solo lo observó y poco después lo sorprendió con un ataque.

—Bastardo... Eso fue repentino. —el más bronceado reclamo, esquivando el ataque.

Ruinoc ▪︎ Eleceed ▪︎Where stories live. Discover now