Prohíbeme Amarte ( Steve Raglan x ti)

Capítulo 14 " Abandono"

Aquellos besos tan tiernos y tan buscados fueron los que más me brindaba Steve, mientras ambos teníamos las manos entrelazadas y recostadas sobre el borde del asiento en lo que sentía como este empujaba suave dentro de mi, aun sosteniendo su cintura con mis piernas, sentía toda su calidez invadiendo mi cuerpo, sin detener aquel amor que desbordaba sobre mi piel, un sonido de una llamada nos devolvió a la realidad sintiendo como Steve se detenía y me soltaba de aquel tan embriagante beso, soltaba mis manos para poder reponerse sobre el asiento y acomodar su ropa, así despues moverse hacia adelante y tomar de su teléfono que aún seguía sonando, yo me levanté del asiento dejándole lugar a Steve que se sentaba a mi lado, aún con mis piernas sobre sus piernas en lo que él me dejaba ver quien era, en su teléfono se podía ver el nombre "Vanessa" Steve intentaba calmar su respiración y aclarar su garganta, en lo que atendió aquella llamada, yo solo pude tomar la camisa de él y colocarmela nuevamente

Steve: - Ho- Hola, cielo... ya estaba volviendo a casa... disculpa la tardanza... es que... (hubo un silencio y la voz de vanessa sonaba del otro lado) NO CIELO... se me hizo tarde.. y pinché con el auto ... Me costó conseguir ayuda... pero ya estoy de regreso... vete a dormir... en un rato llegaré... cielo... cielo... escucha... estoy bien... no vi a nadie... salí a recorrer... ya te dije que pasó... ya vino la ayuda y estaba regresando... no creí que iba a tardar tanto pero... estas cosas suceden sin previo aviso...

Me quité la camisa de Steve y busqué mis ropas mientras él terminaba de hablar con vanessa, él cada tanto me miraba y parecía perder su mirada en mi, en lo que veía, yo solo le acerqué su camisa y salí del coche para ir a la parte de adelante, escuchando como Steve terminaba la llamada saliendo de la parte de atrás del carro para subirse en la parte del conductor mientras terminaba de colocarse la camisa, entró en el carro y me observó, sabía que estaba molesta lo que solo puso su mano en mi mano la cual reposaba sobre mis piernas y se notó su preocupación por cómo había reaccionado

Steve: ¿Qué te sucede ahora...? Porque saliste así..?

Tú:- Nada... me molesta que esa "pinchadura" de carro ya haya sido arreglado y debamos volver...

Steve:(soltando una suave respiración sonrió en lo que tomaba de mi cabeza para besar mi frente) - No digas eso...quisiera que haya más tiempo para brindarte todo de mi pero es que ya se está haciendo de madrugada...mañana debes volver al instituto cariño...

Tú:- O sea que "ESTO" terminó verdad...?

Steve:- NO... no quiero que termine... tú quieres detenerlo...?

Tú: - No... pero ya veo que no podremos volver a esto Steve...

Steve:- Encontraremos tiempo y mejores lugares para volver a vernos, a sentirnos, porque no pienso dejarte... se que deberá mantenerse en secreto por ahora... hasta que se pueda aclarar todo con los que están a nuestro alrededor...

Steve me besó tratando de satisfacer mis caprichos hasta el último segundo y luego se colocó el cinturón de seguridad arrancando el auto, regresando en esa carretera oscura, solo la inmensidad de la noche era nuestra guia para regresar, aquella luna que parecía seguirnos, era cómplice de lo que habíamos hecho, siguiendonos detrás, esperando por ver si llegábamos o quizás solo esperaba por otro momento íntimo con Steve. Me recosté en su hombro mientras que él conducía, dejando que mis ojos se cerraran despacio, aun sintiendo el ruido del motor del auto en mis oídos, mi mano fue hasta su pecho donde tomé con fuerza su camisa y me dejé llevar por aquel sueño que aparecía para apagarme de esa realidad tan deseada.
El motor que se detenía me despertaban abruptamente, sintiendo en parte algo de susto, pero al acomodar mi cabeza y recordar dónde estaba, miré hacia afuera de la ventanilla notando la entrada de mi casa, me di vuelta notando que Steve me había colocado su abrigo a modo de una cobija dejandome entender que me había dormido en todo el viaje, logrando incluso acomodarme en el asiento para que yo pudiera dormir más cómoda, en su rostro se notaba su cansancio pero él mirándome podía soltar una sonrisa sabiendo que me había despertado, me repuse en el asiento despacio, quitando de mi cuerpo su abrigo, dejandolo sobre mis piernas, él acercándose hacia mí, comenzó a susurrar despacio como si pudieran escucharlo, él intentaba no llamar la atención al hablar, aun cuando solo estábamos los dos en el coche.