Capitulo 8 "Prohibido"

943 121 180
                                    


Aquellos besos que me brindaba Steve eran una cruel adicción, que me hacían querer más, sabiendo bien que lo que hacía estaba mal, pero mí mente no me dejaba apartarme de él, era su dopamina que necesitaba para sentir que vivía, que acababa con mí dolor, comencé entonces a pasar mis manos por sobre su pecho intentando quitarle la camisa, a desabrocharla, quería hacer algo tan imprudente, Steve siente aquel accionar de mí parte, lo que acaricia mis brazos hasta llegar a mis manos tomándolas ambas en sus manos y deteniendo mis movimientos, quitándome de él, para luego soltarse de mis besos. Abrí mis ojos al sentir que él se alejaba de mí, soltandome suave para luego volver sobre él y acomodar su camisa mientras se disculpaba por lo que había sucedido segundos atrás, alejé mis manos hasta apoyarlas en mis piernas en lo que las apretaba por rabia de saber que ya no tenía en mí los besos de él, simplemente lo miraba sin poder soltar alguna palabra, se que todas esas palabras quedaron en sus besos, en sus labios, en su piel.

Steve:- ¡Perdón! Perdón! E-... Esto fue mí culpa... no quise ser irrespetuoso, dios...! Lo lamento tanto... esto no debía pasar ... Que carajos hice...? Me disculpo totalmente ante esta falta que tuve contigo

Tú:- Steve... esto no fue una falta, fue algo que queríamos ambos, yo sé que lo querías, lo deseabas... y yo también... porque entonces te detienes?

Steve:- Sabes que esto no está bien, no debía de faltarte el respeto, yo solo quise calmar tu malestar pero no sobrepasarme contigo... es que... esto está mal... tú eres la amiga de mí hija

Lo miré con algo de rabia al escuchar tales palabras, me hacía sentir tan inferior, tan desvalorada, aún sabiendo que él también lo quería, se notaba en su mirada, porqué ahora se retractaba? ¿Cómo era posible? Me hacía ver qué era solo un capricho y lo obtuvo, dejándome así como si no fuera nada que deseaba, volvían a mí aquellos dolores tanto físico como emocional, escucharlo de esa forma me hacía entender que yo malinterpretaba todo, volvían a mí las palabras de mi madre al decirme que era una maleducada, una caprichosa y quizás hasta tenía razón. Me di vuelta dejando de mirarlo para abrir la puerta del coche y salir, Steve me vió que me alejaba del coche para salir de dónde estábamos lo que baja también para ir detrás de mi, sentía mucho repudio ante todo lo que sucedía, solo quería desaparecer, intentaba alejarme de él y arrancar algo que se formaba dentro de mí, un sentimiento tan confuso pero que se sentía tan bien, sentí en mí brazo el agarre de él que me detenía, pero yo no quería verlo, seguía aún con esas ganas de irme a cualquier parte, sus palabras lograban detener mí andar como si mis piernas reaccionaban antes que mí mente

Steve:- dónde vas? No puedes irte así en medio de la noche, detente, no quise que te sientas rechazada

Tú:- No tengo nada que hacer contigo, ya me dijiste que esto está mal y tienes razón, lo que me queda es irme y ya no fastidiarte

Me di vueltas hacia donde estaba él notando su preocupación hacia mí, aunque quería alejarme él seguía siendo ese imán del cual me atraía más, mí cuerpo parecía reaccionar cada vez que lo veía, de alguna manera me obligaba a mí misma a alejarme de Steve quien me apretaba de mí brazo para que deje de moverme, que ya no me aleje de él, entonces le grité sacando aquel ahogo de mis palabras que salían como un chorro de agua fría

Tú:- Ya te quité esas ganas y ya puedes dejarme, ¿para qué quieres que siga aquí hablando contigo? Para que me hagas sentir esta culpa por haber hecho algo que necesitaba de ti?! ahora déjame ir, solo... solo dame una noche para olvidarte, si decides no tener esto conmigo entonces te pido que me des una sola noche y te olvidaré!

Me di vuelta para ya no verlo, no quería ver su reacción ante lo que le decía, esas palabras hasta a mí me dolían, no sabía cómo él iba a reaccionar, simplemente las solté esperando... que esperaba? Solo las dije y luego mí mente comenzó a carburar, que es lo que buscaba en él? que quería que hiciera? No lo sé, solo sé que volví a sentir su mano en mí brazo y este me estiró con fuerza hasta donde estaba él haciendo que me voltee confundida ante esa reacción que me hizo doler, pero al girarme para decir algo, aunque sea soltar un reclamo ante aquel dolor, solo se que él me atrapó de mí mentón con fuerza y me llevó hasta su boca, donde comenzó a besarme con fuerza, apretandome a su cuerpo, intenté quitarme de aquel beso, pero este me envolvía dejando que vuelva de nuevo a mí su sabor, sus besos, su lengua tan tibia que volvía a buscarme, se lo permitía, aunque mis brazos y mis manos querían rechazarlo, su maldita reacción hacían lo contrario en mí y me dejaba consumir ante aquel apasionado beso, él se hacía dueño de mis primeros besos, de mí boca, se adueñaba de cada parte, sin siquiera soltar de mí mentón el cual parecía jugar con mis sentidos, ese apretón me hacía quitar toda defensa que pudiera ofrecer y me dejaba dominar ante su fuerte carácter que se asomaba ante mí, su otra mano la cual había sido de mí agarre en mí brazo se alejó de este para ir hacia mí cintura, apretando mí remera con fuerza, este me atraía más a su cuerpo y yo inevitablemente me dejaba, aún mis manos estaban sobre su pecho queriendo quitarme pero cada vez que me besaba, estos se volvían más débiles, hasta que solo fueron caricias en su pecho, luego estos solo se acomodaron sobre su cuello, envolviéndolo para sujetarse con fuerza así este no se soltaba, estábamos liberando algo que nos pertenecía a ambos y ya no había vuelta atrás, ambos estábamos en falta, en algo que se debía prohibir, pero era tan exquisito ese sentir, lo tan incorrectamente correcto. Luego de sentir aquellos dominantes besos sobre mí, sentí como este se alejaba aún dejando un último fugaz beso, notando aquella saliva que no se quería soltar, aún quedaban esas ganas de continuar, mis mejillas ardían ante su mano que sujetaba mí rostro, mis ojos que apenas se abrían para verlo estaban sumergidos ante ese nuevo éxtasis que me había dado, él se encontraba serio mirándome, sin siquiera soltarme aún me mantenía cerca de él, pero sus palabras parecían encarcelarme más a él

Prohíbeme Amarte ( Steve Raglan x ti)Where stories live. Discover now