Cariño, cariño, cariño

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La reina llevaba una peluca blanca y voluminosa en la cabeza, adornada con mariposas de diferentes colores. Aunque la reina estaba elegantemente vestida, detrás de su sonrisa había una sombra de melancolía.

La novela no daba una descripción detallada de la reina, quien estaba bajo varias presiones tanto internas como externas. Aunque la protagonista femenina recopilaba información sobre el interior del palacio, no sabía qué pensaba la reina. Sin embargo, podía hacer suposiciones.

Si su esposo se estaba volviendo loco, seguramente también odiaría su posición.

Mientras Eugene se mordía la lengua en silencio, la reina se sentó en el trono preparado. El trono del rey, al lado de ella, estaba vacío. En los últimos años, el rey no había asistido a la Fiesta de las Reinas, por lo que nadie encontró extraño que no estuviera presente.

Después de la reina, las debutantes ingresaron al salón y el ambiente cambió. La fiesta comenzó con las jóvenes damas y sus parejas bailando en el piso.

Observando cómo los pies tensos de las damas se movían suavemente, Eugene le habló en voz baja a Alexis.

"¿Cuándo bailaremos nosotros?"

"En el tercer turno. Un Vals"

"¿Cómo te sientes al respecto?"

"Después de bailar, nos iremos"

La voz baja y gruñona de Alexis sonaba amenazante. Parecía estar irritado por tener que lidiar con muchas personas.

En realidad, Eugene no se sentía tan agobiado. Más bien, lo encontraba divertido en muchos aspectos. El deslumbrante salón de la fiesta, lleno de candelabros brillantes, el aroma del vino y el perfume, las tiaras y collares deslumbrantes de las damas, los vestidos exuberantes que ondeaban mientras bailaban, todo era nuevo para ella.

Todo parecía algo sacado de una película. Aunque no se había convertido en una protagonista de novela, todavía disfrutaba de experiencias que nunca podría tener en la Tierra.

Pero había algo más importante que la diversión y la emoción. Aún no habían tenido una conversación sincera entre los protagonistas masculino y femenino.

Aunque sus recuerdos eran un poco confusos, Degona y Christopher llegaron tarde a la Fiesta de las Reinas. Fue porque Christopher pisó el delicado encaje de Degona, rasgándolo.

Degona tuvo que quitarse el vestido y realizar magia de restauración, mientras regañaba a Christopher sin piedad. Christopher se inclinó como un perro reprendido y se disculpó.

Definitivamente, la trama romántica estaba centrada en los protagonistas masculino y femenino, no en Alexis.

Eugene, que seguía mirando hacia la entrada, se volvió hacia Alexis a su lado. Sintió un ligero pesar al ver que la prometedora relación de su amigo se había arruinado incluso antes de comenzar.

Justo en ese momento, sus miradas se encontraron cuando Alexis también miró en su dirección. Eugene apartó la mirada como si no fuera nada, pero parecía que Alexis había reconocido algo.

"Si tienes algo que decir, adelante"

"No, no tengo nada"

"No parece ser así"

"Jajaja, no, no tengo nada que decir"

Mientras Eugene intentaba desviar la conversación, la primera pieza musical llegó a su fin. La gente aplaudió a las debutantes de este año y la conversación se interrumpió de manera natural.