Cariño, cariño, cariño

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"Ya que me has dado un bono, usaré eso para darte un regalo", dijo Robert.

"Pero eso no es un regalo para mí. Yo te daré uno primero. No hay necesidad de que te apresures", respondió Eugene.

Utilizando el adelanto que recibió de Berthu, Eugene se encargó de pagar el salario atrasado de Robert y además le dio un generoso bono.

Habían pasado solo unos meses desde que Eugene y Robert comenzaron a trabajar juntos. Aun así, Eugene había tenido suficiente tiempo para entender la lealtad y la dedicación de Robert, quien había servido sin recibir un salario durante más de un año. Eugene decidió que si se volvía rico, definitivamente recompensaría a Robert de manera adecuada.

"Sí, lo entiendo. Deja que me encargue de esto y ve a darte una ducha, señor".

Ante la insistencia de Robert, Eugene finalmente se levantó de su silla. Ahora tenía una hora para bañarse, arreglarse y vestirse adecuadamente.

*

Su cabello estaba peinado perfectamente y no había un solo cabello fuera de lugar. El traje ajustado a su cuerpo resaltaba su figura angular y creaba una atmósfera rígida.

Sin embargo, Eugene no estaba satisfecho con su reflejo en el espejo. Aunque se veía bonito en lugar de guapo, su rostro era más adecuado para ser descrito como lindo que como impresionante, sin importar cuánto se arreglara.

Mientras dejaba su insatisfacción en el espejo, Eugene se puso los guantes.

"¿Qué hago si me quedo dormido durante la ópera?"

En realidad, Eugene nunca había visto una ópera. Solo tenía un prejuicio vago de que eran aburridas.

"No debes quedarte dormido".

"Puedo quedarme dormido".

"También puedes pellizcarte el muslo".

"Voy a intentarlo".

Robert le enseñó un método extremo. Si no funcionaba, Eugene pensó que le pediría a Alexis que lo despertara.

Finalmente, Eugene se puso el abrigo y salió de la habitación, dirigiéndose hacia el salón de recepción. Allí, Alexis lo esperaba, igual que hace diez días.

El hombre vestido con un traje elegante, en lugar de su uniforme de caballero, estaba impecable de pies a cabeza. Y había algo en él que atraía todas las miradas.

En lugar del guapo rostro de Alexis, Eugene envidiaba más su figura bien desarrollada. El traje ajustado resaltaba su pecho musculoso, sus brazos gruesos, sus grandes manos y sus largas y fuertes piernas. Eugene suspiró, sabiendo que incluso si se ejercitaba, nunca podría tener un cuerpo como ese.

"Hola Gran Duque."

"Barón Linweisen. Lea la página 2".

Después de saludarse brevemente, Alexis le entregó el periódico que tenía en la mano a Eugene. Con una sensación de incredulidad, Eugene aceptó el periódico.

Era un periódico con un nombre extraño llamado "Shock World". Al abrir la segunda página, se encontró con grandes titulares en negrita. "¿El Marqués del Bigote Inamovible?" Era un titular realmente provocativo y de mala calidad. El contenido fue un paso más allá.

Había un rumor de que el Marqués del Bigote Inamovible, conocido por su elegante Bigote, ha estado manteniendo su taller de soltería sin tener ni esposa, ni acompañante, ni amante durante varios años. El artículo era especulativo y no mencionaba quién era el Marqués del Bigote Inamovible ni qué significaba "inamovible". Pero las personas adecuadas sabrían a quién se refería.