Capitulo 9 (Conóceme)

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Para Mikaela, encontrar la paz mental y un refugio seguro había sido una travesía amarga que, con el paso de los años, se volvió una búsqueda abandonada. Se conformó con escapar del infierno que era su hogar.

"Entonces Shinoa terminó en el piso cuando la cama se desarmó, me castigaron pero valió la pena", contaba Yuichiro mientras limpiaba la sangre del labio de su compañero.

"¿Y así quieres que ella no te haga bromas a ti?", mencionó el rubio con una cálida sonrisa, observando a Yuichiro de una manera que prometió no hacer jamás.

"No la conoces, es el diablo", dijo Yuichiro con un gesto de manos, provocando una leve risa de Mikaela. "Siempre me hace bromas e intenta perjudicarme, como con la foto..." El azabache se sonrojó tanto que su rostro empezó a arder.

"¿Yuu?" Mikaela estaba literalmente asustado, pensando que Yuichiro podía estar sufriendo un ataque de pánico o fiebre. Subió su mano a la frente del azabache. "¿Tan mala es esa foto? Estás caliente."

Para Yuichiro, la situación era extraña. Mikaela siempre lo sacaba de su zona de confort. ¿Cómo lo conoció? Se preguntó para sí mismo.

"No digas tonterías", dijo Yuichiro, presionando la herida cerca del labio del rubio, y lo miró con malicia cuando se escuchó un quejido. "Listo, ya quedó."

"No sé si darte las gracias o decirte que te quiero demandar por daños físicos", mencionó el rubio con una expresión de dolor. Yuichiro terminó colocando un pequeño cuadrito de micropor en la herida.

"Mejor agradece, porque es difícil lidiar con idiotas como tu amigo Lacus", dijo despreocupado.

La expresión de Mikaela cambió. Aún recordaba las palabras de su amigo de casi toda la vida: "Te ves similar a tu madre". ¿Cómo podía ser posible eso? Solo había hecho una expresión de enojo. En ese momento, la mente de Mikaela empezó a recordar varios sucesos. Junto con sus amigos, hacían la vida miserable a varias personas, se mofaban de las desgracias ajenas y lastimaban emocionalmente a varias chicas por rencor a su progenitora. Levantó la vista y miró a su acompañante. Él siempre fue fuerte, nunca cayó en las provocaciones que Mikaela intentaba que cayera. Por eso era especial, y Mikaela se fijó en él. ¿No sería muy superficial? Su cabeza era un caos hasta que escuchó el chasquido de los dedos de Yuichiro.

"Tierra llamando a Mika, despierta Mika, ¿estás bien? ¿El golpe te dejó mal?"

A pesar de las bromas, Yuichiro realmente vio la preocupación y otras expresiones en el rostro de su compañero. No es que le importara, pero... Cuando lo veía así de vulnerable, imaginaba varias cosas. Tal vez Mikaela no era solo la cáscara vacía que pensaba. Dormido, se veía inocente. Estos días había tenido varias marcas de ojeras y solía usar sacos de mangas largas. Él no era así. Siempre se fijaba en lo que llevaba el rubio.

Ambos se estaban mirando a los ojos, acercándose poco a poco, pero tal vez el sonido de la puerta abriéndose fue lo que interrumpió el momento de descubrir algo en los ojos del otro.

"Creo que es mejor que nos vayamos" dijo Mikaela, bajando de la camilla y Yuu recobro la compostura, salieron del lugar aún con la duda en su cuerpo "Yuu quería preguntarte si tu-"

"¡Mika!" Se escuchó a lo lejos esa voz era conocida para el azabache porque tenía que ser ella, y recordó lo que le hacía pensar en Mikaela como un ser despreciable, pero ahora no estaba seguro del porque se puso triste cuando vio que la chica abrazo a Mikaela de una manera tan cariñosa y acaricio el parche que el había colocado "~alejate de él~" resonó en su mente y eso fue extraño tan extraño que hizo que su cuerpo se escabullierá por el lugar y saliera corriendo, pensando exactamente ¿Porqué se sintió triste? siempre es enojo nunca tristeza, entro a los servicios a lavar su cara "creo que me estoy volviendo raro"

Mikaela estaba absorto en las palabras que quería pronunciar Que no se fijó cuando llegó la chica y empezó a tocarlo, la alejo de él, con un gesto caballeroso, ya no con el fastidio de siempre, ese empezaría a ser su cambio, no quería ser como su madre, no quería hacer daño a terceros que no tienen la culpa de sus conflictos internos, aún así no quería ser complaciente una cosa era aceptar que fue un patán, y otra que tenga que aceptar todo para no hacer sentir mal a las personas.

"Akane, estoy bien, gracias por preocuparte por mi, Yuu fue quien.." regresó a ver al azabache y este ya no se encontraba allí, Akane estaba desconcertada desde ¿cuándo Mikaela, no la apartaba con asco? y en especial desde ¿Cuándo le decía Yuu a Yuichiro?

"Mi...Mika ¿estás bien ?" Mencionó sorprendida, pero antes de que pudiera decir algo más el rubio se despidió rápido y corrió en busca de Yuichiro, no sabía si quería reparar todo lo que habia hecho o solo no quería crear otro malentendido entre ellos, pero el día paso y no lo encontró, tal vez mañana.... Mañana siempre es un buen lugar para empezar de cero y si no es un buen momento para seguir con el plan.

Continuará..........

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⏰ Last updated: Jun 13 ⏰

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Palabras que duelen, acciones que matanWhere stories live. Discover now