♡Epílogo♡

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-Y así, conocí a su bobo padre.- la niña pequeña brincaba en su regazo y su hermano mayor la cargo. Regañando levemente a su pequeña hermana.

La niña rubia hizo un puchero a su hermano mayor que le sonrió con calidez.

-Mami no puede hacer esfuerzos, Eisuki-Katsuki le sonrió a su querido hijo Kotaro, con solo trece años, era un muy buen hermano y lo cuidaba de maravilla.

-Ya ya, Kotaro. Cielo, no soy de cristal, tu hermana es como una pluma, además, solo tengo un mes de embarazo, por dios mi niño, no seas tan exagerado como tu padre.-su hijo asintió haciendo un puchero. Olvidaba aveces que era un niño, estaba seguro que aprendió esa actitud tan madura a su tío Shoto.

-Mami, cuéntame más...-pidió haciendo pucheros.

-Bien, bien, bueno pues, su padre entendió que yo ya no era un niño, me vio como debía verme y pues, pasó el tiempo, me gradué y... pum, nos casamos, después ya a mis veintitres tuve a este hermoso pedazo de sol... y a mis treinta y dos tuve a esta hermosa bailarina con complejo de pulga que salta por todos lados-Beso las regordeta mejillas de su pequeña que reía feliz con ella.-Y ahora viene un bebé en camino, estoy seguro que será alfa. ¿Que dices Kotaro?-Dijo su joven madre en comparación con su padre.

-mama... tienes genes demasiado fuertes como para solo pensar en un alfa, ya van dos, y te salimos omegas, ni modo mami, no hay de otra, papá se volverá loco con cuatro omegas en casa mamá.-

Katsuki suspiro haciendo pucheros.

-Igual a tu tío Shoto... ¿Que dices tu cielo?-Le pregunto a su bebe que la miraba con sus ojitos llenos de impaciencia, odiaba estar callada y sentada.

Quería hablar y dar su opinión

-Mami, yo se que será un alfa. Porque dice el tío Izuku que si creo algo-Katsuki lanzó un grito frustrado.

-Te has juntado mucho con el bobo de Deku y con el vejestorio de tu padre-su madre aún se mantiene tan juvenil como años atrás, tal cual como Kirishima, el cual escuchaba todo desde afuera de la puerta con una sonrisa, casa vez enamorándose más del hombre que tuvo a sus dos hijos y ahora tendría un tercero.

-mamá por dios, papá te escuchara jugar con el tema de su edad.. lloraría toda la noche, y de paso estaría todo el día preguntándonos si se le ven las canas o las arrugas.

-Ay por dios, papá es un llorón... Lo sé, pero, la edad pareciera que le favorece. Igual que el vino-Dijo coqueto guiñandole el ojo a su hijo menor.

-¡Mamá! Dios mio.... Pero frente a papá nunca dices cosas como estas, solo lo molestas he insultas-Katsuki se reía. Adoraba molestar a su mayor, era como el, pero aun así intentaba regular su carácter fuerte.

-También insultaban a tu padre, y aún insultas al hijo de Todoroki, pobre Shouko, siempre le pegas, será... que te pasa lo mismo que me pasa con tu papa?-Reveló y su hijo chilló de la vergüenza.

-¡Dios yo no puedo contigo mamá! ¡Como dices algo así! ¡Ese estúpido es un alfa mal hecho, esta obsesionado conmigo, eso es muy distinto! ¡Yo no tengo nada que ver con el!-

-Si no pudieron los padres, los hijos si.-Estalló en risas y la niña reía por que su madre lo hacia.

-Mamá basta, que si papá te escucha me hará sacar a mi hermana de aquí y nos dejara encargados con los tíos... Y yo se que hacen en su cuarto, no soy idiota, así que. Compórtate mamá-regaño su hijo a la madre, Katsuki pucherio y su hija tomó los cachetes de su mami.

-Mamita, tu di lo que quieras, yo te voy a proteger, no fui una alfa, pero soy como mami, igual de fuerte. Si papi dice algo yo voy a cuidar de mi mami, no le regañes hermanito.-a sus cuatro años... conquisto el corazón de todos los de la casa.

Muy pequeñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora