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Ri'ya POV
El transcurso del día iba regular, los Metkayina trabajaban en sus asignadas labores felices por el regreso de los Tulkun pero extrañados por el clima. Estaba lloviendo y aunque en en mi antiguo clan era normal al parecer aquí no es muy común, pero a nadie le molestaba, algunos niños incluso jugaban bajo la leve lluvia.
Yo ayudaba a Kiri a hacer collares ya que para ella resultaba tedioso pero quería hacerle un regalo a su hermana. Reíamos y teníamos tranquilamente hasta que escuchamos un alboroto venir de un Marui, incluso habían soñado un caracol para que el pueblo se acercara así que tome la mano de Kiri y la arrastre conmigo, ambas llegamos justo a tiempo para escuchar a Ronal.
- ¡Mi hermana espiritual y su bebé fueron asesinados por las personas del cielo! - Kiri y yo nos acercamos a Neytiri preocupadas mientras el pueblo exclamaba, incluso Tonowari estaba furioso, cosa que no se veía muy seguido "Está guerra ha llegado a nosotros".
- Sabíamos de la casa de nuestro pueblo Tulkun, pero estaba en el horizonte, muy distante. ¡Pero ahora está aquí! - El pueblo hacía ruidos y expresiones de guerra, realmente se veían afectados por la situación. Jake intentó hacerles entender que era peligroso y que ellos no entienden el gran balance, pero no lo escucharon, al menos hasta que Neteyam se metió y le dijo a todos que escucharan a su padre. A pesar de ser una terrible situación no pude evitar sentirme orgullosa de Neteyam por hacerse escuchar entre tantas personas, era todo un líder.
Cuando Jake pidió a los Metkayina que hicieran que los Tulkun se fueran Ronal lucía aún más furiosa - ¡Vives entre nosotros y no has entendido nada! - El caos volvió a desatarse hasta que Jake tomó un objeto y lo levantó para que todos lo vieran; un rastreador.
- Díganles a los Tulkun que si les disparan uno de estos es una marca de muerte. Llámenme y yo lo silenciaré, salvar sus vidas es lo único que importa, ¿no? Salvar a sus familias - Fue entonces que Tonowari entendió y le dijo al pueblo que hicieran lo que Jake dijo.
Kiri se había ido hace un rato con Tuk para que la menor no se preocupara así a que cuando todo acababa mi plan era acercarme a Neteyam para ver si podía decirme qué había sucedido, pero él parecía ir hacia alguien más, lucía preocupado así a que supuse que seguía a Lo'ak.
El menor iba a buscar a Payakan y estaba llamando un Ilu cuando Neteyam y yo llegamos a él - Ni sueñes que vas a ir hermanito.
- Payakan debe saber de los arpones - Lo que Lo'ak decía me pareció razonable, después de todo era su hermano espiritual y Payakan estaba exiliado, pero Neteyam no pensó lo mismo y le negó el permiso a su hermano - ¡El está solo! Solamente yo puedo advertirle.
Neteyam tocó la cabeza de Lo'ak, un gesto que compartía con Jake - Bro, ¿por qué todo tiene que ser tan difícil contigo? - Fue entonces que mi amigo se molestó realmente y empujó con fuerza la mano de Neteyam.
- No, ¿te preguntas porque no soy el hijo perfecto como tú? El soldadito perfecto... ¡Pues no soy tu! ¿Está bien? No soy tu. El es mi hermano, y voy a ir - Pude ver que todo esto había lastimado a Neteyam, él trabajaba y sufría mucho para tener la aprobación de sus padres, para él eso no era vida, tenía que abstenerse de muchas cosas; de divertirse y ser un adolescente.
- ¿El es tu hermano! No, yo soy tu hermano - Tsireya, Ao'nung y Rotxo llegaron a interrumpir la conversación pero era muy tarde, Lo'ak estaba saltando a su Ilu para ir por Payakan. Neteyam y yo también llamamos a uno para poder seguir a Lo'ak y les dijimos a los Metkayina lo que sucedía, así que los cinco rápidamente seguimos a Lo'ak.
En el camino nos encontramos a Kiri y a Tuk, yo no quería decirles lo que pasaba para que no se acercaran o se metieran a algo que pudiera ser peligroso, pero Neteyam consideró conveniente avisarles así que ambas se unieron a nosotros. Todos llegamos a Payakan prácticamente al mismo tiempo que Lo'ak, pero él lucía asustado y desesperado.
- Tranquilo Payakan, yo te ayudo - Vi que mi hermano se subió a Payakan así que hice lo mismo - ¡De prisa, una nave se acerca! - Vimos el arpón y la espalda del Tulkun y entre todos intentamos sacarlo pero era inútil.
- ¡Lo'ak! Llama a Jake, el sabrá que hacer - Mientras él hacía lo que le pedí mis amigos y yo seguíamos tirando del arpón, a Neteyam se le ocurrió usar una cuerda y amarrarla al arpón y al Ilu para que esté lo jale. Cuando lo logramos Neteyam lo tomó.
-Váyanse, yo los distraigo - Tome su mano y sentí mis ojos lagrimear - Ri'ya, necesito que vayas con Lo'ak, por favor.
- No puedo Net - Junte mi frente con la suya y me beso una última vez antes de irse sobre su Ilu. Yo iba junto a Lo'ak y notamos naves acuáticas de la gente del cielo así que nadamos lo más rápido posible, una de ellas se acercó mucho pero logramos desviarnos antes de chocar.
Seguimos buscando una salida por unos minutos hasta que vimos a Tsireya nadando, al parecer a su Ilu le habían disparado así que Lo'ak no dudó en tomar su mano y subirla a su Ilu, nadamos aún más rápido y nos escondimos en una hoja donde podríamos respirar.
- ¡Tuk! - La abracé con fuerza al notar que ella estaba ahí, es la que me tenía más preocupada, es solo una niña. La verdad es que... todos nosotros somos niños: ocho, quince, dieciséis y diecisiete, yo dieciocho, no hemos tenido una vida tranquila, ninguno de nosotros.
- Aquí vienen, hay a que irnos - Los cuatro nos volvimos a sumergir y seguimos nadando, pero una red nos atrapó, a excepción de Lo'ak que apenas y logró salir. Él intentó cortar la red entre nuestros gritos, pero no fue suficiente tiempo y todos caímos en la nave.
Lo'ak le gruñó a los avatares que nos rodeaban y los amenazo con su cuchillo, pero fue inútil, lo tiraron y lo esposaron al igual que a Tuk, Tsireya y a mí - ¿!Que hacen!? ¡Deténganse!
- ¡Spider! - Mis ojos lloraron cuando vi a mi mejor amigo, no había pasado tanto tiempo, pero noté que su cabello lucía más largo y su pintura azul empezaba a quitarse. Lo'ak también lo llamó cuando lo vio.
- ¿Estás bien hermano? - Se que Spider nos hubiera ayudado, pero le fue imposible cuando las personas del cielo lo tomaron de los brazos a la fuerza.
- Si, estoy muy bien amigo, mejor que nunca - Lo'ak no podía ser serio no por un segundo, la crítica situación no lo detuvo de ser igual de sarcástico que siempre..
