𝙳𝚛𝚎𝚊𝚖𝚜 𝚠𝚒𝚝𝚑 𝚌𝚑𝚘𝚌𝚘𝚕𝚊𝚝𝚎 →Willy Wonka←

𝘾𝙖𝙥𝙞𝙩𝙪𝙡𝙤 4

Charlotte entro tarde a su habitación debido a los regaños de Fregoso y Lejía, al ingresar no encontró a Noodle así que suspiro y sospecho dónde estaría, camino dos habitaciones al lado, específicamente a la habitación de Wonka y tal como lo sospecho alli estába ella

—Noodle, ya es hora de dormir —Charlotte se recargo en el marco de la puerta

—Esta bien, adiós Willy —Se despidió la niña saliendo de allí

—Lo que sea que estén planeando deben pararlo ahora —Charlotte ingreso a la habitación y cerró la puerta tras de ella

—¿Cómo-

—Conozco a Noodle y los escuche cuando estaba en camino

—Ah —Wonka soltó un sonido de obviedad

—Escuche, señor, no lo tome a mal pero es muy poco probable salir de aquí, casi imposible

—Nada es imposible —Se levanto y se acerco a Charlotte

—Si, hay cosas imposibles, como por ejemplo que un chocolate te haga volar o tener una idea

—Bueno, tal vez es de las personas que necesitan ver para creer —Charlotte asintio— Bien, por suerte siempre guardo uno —Wonka extendió un pequeño chocolate hacia la mujer

—¿Pretende que esto me haga volar?  —Tomo el chocolate sin mucha emoción

—Solo pruebelo —Le sonrió Wonka

Charlotte llevo en chocolate en su boca masticandolo, tan pronto como lo hizo sintió sus pies elevarse de la madera soltando un pequeño grito

—Permitame —Wonka la tomo de la mano evitando que chocara con el techo, aún así se encontraba “acostada” en el aire

—¿Que brujería es esta? —Charlotte sostuvo los hombros del contrario

—Le dije que nada es imposible —Wonka la tomo de la cintura apegandola un poco a el para que se mantuviera recta

—¿Cuanto dura el efecto, Wonka? —Charlotte lo miro desde arriba, pues el la sostenía pero no evitaba que se elevará del todo

—Unos minutos más —Le sonrió— Usted es como un chocolate muy amargo

—¿Que insinuas? —Gracias a su enojo Charlotte comenzó a dejar las formalidades de lado

—Me gusta el chocolate amargo...

—¿Eh? —El corazón de Charlotte dió un pequeño salto mientras el contrario mantenía aquella sonrisa en su rostro

—Si, debería probarlo, es uno de mis favoritos

—Mi madre... Mi madre hacia chocolate amargo —La mirada de Charlotte se clavo en el suelo

—Apuesto a qué sabían deliciosos

—Si, solía hacerlos con ella —La voz de Charlotte bajo un poco y su mirada se suavizó

—Charlotte, la sacaré de aquí —La mirada de la pelinegra volvió al chocolatero — Sacaré a todos de aquí

De pronto Charlotte dejo de flotar y para suavizar la caída Wonka la apretó más contra el

—¿Por qué? —Susurro sin separarse

—Porque nadie merece que los exploten de estás manera y menos usted —Volvio a sonreírle

—¿No te duele la cara? Sonríes mucho — Pregunto

—Me gusta sonreír ¿Se ve mal? —Hizo una pequeña mueca relajando su rostro

—No, se ve... Lindo —Charlotte mantuvo su mirada en los ojos de Wonka, no sabía por qué lo estaba diciendo, solo sabía que se sentía bien

El estómago de Willy comenzó a hacerle cosquillas ¿Por qué? Charlotte era la que debía tener un animalito en su estómago, no el, el no habia comido el chocolate, pero ya se hacía una idea de que podía ser

—¿Por qué no leiste el contrato? —Pregunto de repente

Willy vaciló unos momentos — No se leer— Respondió luego de unos segundos

—Podria enseñarte, le enseñe a Noodle a leer, tengo algunos libros sobre eso

—¿Haria eso por mi? —Willy le miro con un brillo en los ojos que logro deleitar a la dama, a ninguno parecía incomodarle la posición en la que estaban

—Si, podríamos dejar las formalidades, mañana-

—¡Ya déjenme dormir! ¡Coquetean mañana! —Piper golpeó la pared, pues su habitación estaba al lado

Willy se rió nervioso y un color rojizo de formo en sus mejillas al notar por fin como la sostenía

—A-Ah, lo siento —Verdaderamente no quería soltarla, pero debía así que con cuidado retiro sus manos y está choco con la de Charlotte, que por primera vez desde que el llegó rio nerviosamente

Charlotte cubrió su boca instintivamente, pero la mano de Willy tomo la suya separandola

—Noodle tenía razón, tu sonrisa es verdaderamente hermosa...

Charlotte le miro con sus labios entre abiertos, pero pronto y sin poder evitarlo otra sonrisa se avecino a sus labios

—Deberias descansar, para ese maravilloso plan —La voz de Charlotte se torno más dulce

—Si... —El seguía sonriendo pero está vez de una manera diferente

—Buenas descansa, noches —Charlotte abrió la puerta pero se detuvo al darse cuenta de su error— Ah, era al revés

Willy rio con dulzura

—Descansa igual, Charlotte

La muchacha camino a su habitación sin poder quitar la sonrisa de sus labios tanto que comenzaba a sentir un hormigueo en sus mejilla.
Cuando ingreso agradeció al cielo que Noodle estuviera dormida, pues si la veía sonreír mal interpretaria todo

Pero siendo sinceros ¿Cuánto podría mal interpretar? ¿Cuánto sería verdad y cuánto sería mentira?

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