Morticia era la esposa de Homero, pero un día Homero le presento a su hermana cuyo nombre es Bella.....
Bella sabía que Homero engañaba a Morticia con una mujer que ella conocía muy bien, pero ella estaba indecisa si decirle o no a Morticia sobre el...
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—Mejor entremos a la casa mis niñas, esta comenzando hacer frío. — dijo la mayor
—Es verdad, mejor entremos. — respondió de la misma manera
Las tres chicas junto con la mayor entraron por fin a la casa.
Pov. Larissa
Trate de no tirarme encima de la mujer que estaba enfrente mío, no me lo podía creer. No tiene cara para volver a venir como si nada, después de lo que me hizo.
—Que haces aquí!!? Vete! No te quiero ver en mi vida! — grite mientras mis ojos se cristalizaban
—Vine a verte mi querida Issa, me extrañaste? — me dijo con una sonrisa burlona
Sentí que mi sangre hervía de rabia, que cínica que es.
—Que te vayas! No te extrañe ni un poco, crees que te voy a extrañar después de lo que me hiciste?! — le grite mientras la mire con lagrimas en mis ojos
—Pero Issa, solo me fui porque el trabajo me lo pedía. Fue solo poco tiempo que me fui, no te pongas así. — respondió tranquilamente
—Ahora te haces la inocente?! Poco tiempo? Elizabeth te fuiste por 8 años y nunca volviste a buscarme! No me vengas con tus mentiras!! Vete — grite mientras apretaba el bolígrafo que tenia en mi mano
—No te hagas Issa yo se que si me extrañaste, por cierto quien es esa maldita que se hace llamar Bella? Quien es esa perra que toco lo que es mio? — pregunto con enojo y celos
—A Bella no la llames así, ella fue la que me salvo del sufrimiento que estaba teniendo por tu culpa. Y no soy tuya, no soy de nadie. — conteste con seriedad y enojo
—Que si eres mía, solo mía Larissa y lo sabes.
Ella se acercó a mi y yo solo retrocedí, mire que ella sonrió de forma cínica haciendo que me de un poco de miedo. Tenía miedo de lo que podría hacerme pero no puedo mostrar miedo ahora.
"Mierda! Bella donde estas cuando más te necesito! Ven por favor, te necesito!" Dije en mis pensamientos mientras seguía viendo a esa mujer.
—Acaso tienes miedo Issa? Awww la pequeña Larissa tiene miedo. — dijo en un tono burlon
—No te tengo miedo, es mejor que te vayas y nunca vuelvas porque no sabes de lo que soy capas.
Ella se acercó más y esta vez yo no retrocedí, su sonrisa se borro al ver que yo no retrocedí. Ella alzó la mano para así tomar mi cuello y acercar mi cara con la de ella.
—Eres mía Larissa, voy a matar a esa perra. Dime donde estas o a ti te irá peor. — dijo entre dientes con celos
—A ella no la metas idiota, y sueltame si no quieres que te mate yo con mis propias manos. — quite su mano rápidamente mientras la miraba sin ninguna expresión
