¿Me das tu número?

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A la mañana siguiente, Yang se levantó a las 8:30 para ir a su trabajo, debía de llegar temprano ya que no quería defraudar a nadie, y puede ser porque quería ver a un idol en especial...

Así que se levantó de su cómoda cama con algo de pereza y se dirigió hacia el baño para darse una ducha. Luego de eso se vistió, se puso ropa linda pero casual.

Bajo las escaleras de su casa hacia la cocina encontrándose con su madre y hermana en está preparando el desayuno para los tres. Les dio los buenos días a las dos mujeres que tanto amaba y se sentó al lado de su hermana mayor.

── Y bien Innie, ¿has logrado conseguir algún trabajo? ── pregunto su mayor con curiosidad.

── ¡Sí! ya conseguí un trabajo ── le respondió con una sonrisa.

── ¡Que bien! ¿de que consiste tu trabajo? ──

── Pues... soy maquillista de unos famosos idols ──

── ¡Me alegro mucho hermanito, se que lo harás exelente con todo lo que mamá y yo te enseñamos! ── le dió un abrazo aferrandose a él.

No tan sólo su madre estaba orgullosa de él, sino que también su hermana. Tanto su madre como ella lo vieron crecer sus veintidós años.

── ¡Muchas gracias! de verdad si no fuera por ustedes no estaría ahí en estos momentos. Las amo demasiado a las dos ── correspondió al abrazo de su hermana al cual se sumó su madre.

── Mis niños tan lindos... bien, el desayuno ya está, antes de que se vayan a trabajar ── les sirvió el desayuno siendo unos waffles junto a un jugó de naranja y se sentó a comer y platicar junto a ellos.

Estuvieron hablando asuntos de trabajos como cosas familiares. Les encantaba estar solo los tres juntos, sabían que podían contarse todo fuera malo o bueno, son una familia de tan sólo tres integrantes tan linda y unida.

Pero su larga charla y divertido momento acabo cuando finalizaron de comer y vieron la hora.

── Yo ya debo de irme luego, los chicos tienen que grabar el trailer de su comeback ── se levantó de la silla y tomó su plato y vaso para ir a dejarlos.

Se dirigió nuevamente al baño para lavar sus dientes y vio que ya eran las 8:50 y debía de estar en aquella empresa a las 9:20. Así que bajo a despedirse de su madre y hermana dándoles un fuerte abrazo y él recibiendo un beso en la frente de las mujeres.

Tomó sus pertenencias y salió de su hogar rumbo hacia su trabajo mientras iba con sus audífonos escuchando música.

Cuando escuchaba música se introducia en su propio mundo, sentía que estaba en tranquila soledad y paz. Estaba afuera del edificio y cuando estaba por entrar sintió que alguien tocó su hombro sacándole un pequeño susto.

── Uhm... lo siento no quería asustarte ── sonrió de una forma embobado al ver aquellos marrones ojos.

── No pasa nada, ChangBin. ¿necesitas algo? ── sonrió

── Nada, solo, vengo llegando recién y como te vi quise saludarte, pero mi intención no era asustarte ── río un poco.

── Oh, ya veo ── río también ── Bien, ¿pues que te parece si ya entramos? ── Seo asintió con la cabeza y fue adentro junto a Yang.

Llegaron a la habitación donde estaban todos los demás chicos y cuando los vieron llegar juntos todos se miraron entre ellos y sonrieron.

ChangBin entendió al instante porque sus amigos miraban así y fue a golpear a SeungMin quien fue que empezó a susurra algo que empezaron a susurrar entre ellos.

El staff de hermosos ojos | JeongBinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora