Capítulo 1

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Samantha despertó por el sonido de la alarma de su teléfono, el ruido ensordecedor llenando la habitación mientras su mano intentaba encontrar el celular para apagarlo.

Una vez que lo encontró y pudo abrir sus ojos con claridad, solo una palabra se le vino a la mente: "Mierda", pensó al ver su alrededor. Otra vez, había despertado en un cuarto que no era el suyo, miró a su lado y vio como un hombre dormía pacíficamente debajo de las sábanas.

El sentimiento de pena la revolvió completamente, era la tercera vez en el mes y la preocupación de que los paparazzi estuviesen esperándola cuando saliera la invadió.

Aún mareada y con dolor de cabeza, decidió tomar su teléfono y levantarse de la cama para dirigirse al baño, ni siquiera sabía a qué dirección ir, pero supuso que era alguna de las puertas de la casa. No iba a mentir, la casa de aquel muchacho era bastante linda; estaba intentando recordar a cuál club había ido ayer, así podría darse una idea de qué había sucedido la noche anterior.

Al llegar al baño, sintió alivio de no tener que abrir más puertas.

"Será que yo soy una rica muy modesta o por qué yo no tengo tantos cuartos en mi casa" pensó para sí misma.

Es decir, su situación económica era más que excelente, sin embargo tenía que admitir que su casa era bastante normal al compararse con la que parecía tener aquel chico.

Al salir del baño, tomó su teléfono del bolsillo y miró algunas notificaciones y posts: Ya recordaba todo, incluso quién era aquel chico. Rodó los ojos con cansancio al ver un par de llamadas perdidas de su representante.

Regresó al cuatro en donde había despertado y comenzó a recoger sus pocas pertenencias que había en el lugar, también se miró al espejo por un por un momento tratando de arreglar su cabello. Al caminar hacia la salida de la habitación, la puerta rechinó al abrirse, causando un pequeño remolineo por parte del hombre en la cama. La chica se detuvo un momento para asegurarse que él siguiera durmiendo, a los pocos segundos, decidió seguir avanzando hacia la puerta principal.

–¿Sammy?– preguntó el hombre con voz somnolienta desde la cama

La nombrada solo cerró los ojos, su plan de escape perfecto se había arruinado, girando sobre su propio eje, la rubia se volteó hacia él desde el marco de la puerta, dándole una ligera sonrisa para no mostrar incomodidad.

–¿Ya te vas? Aún es temprano, podríamos salir a desayunar si quieres– él sugirió, sentándose en la cama mientras frotaba su cara

–Gracias, Dylan– dijo, intentando actuar lo más natural posible –Pero tengo que ir al estudio a grabar unas melodías, así que podemos pasarlo a otro día, ¿te parece?– preguntó intentando mostrar el mayor interés

–Claro, otro día será– dijo el chico desde la cama, mientras ellas se despedía con una sonrisa fingida acompañada de un ademán y se dirigía a la puerta principal

No lo iba a dejar para otro día, Samantha tenía eso muy claro, tampoco tenía que ir al estudio a grabar, sin embargo, nunca estaba de más la esperanza de seguir con la conexión que ambos tuvieron estando ebrios.

Al salir por la puerta principal con su bolsa en mano, lo primero que vió en vez de los escalones para poder bajar fueron los flashes cegadores de las cámaras que la estaban esperando.

Su primer instinto fue cubrir su cara sutilmente para evitar los flashes en sus ojos mientras los paparazzis le preguntaban cosas, otros simplemente se dedicaban a hacer su trabajo y tomarle fotos.

–¿Quién fue el afortunado de esta noche, Sam?– preguntó con ironía uno de los fotógrafos

Odiaba que le hicieran ese tipo de pregunta

–Tu papá– respondió ella con sarcasmo y una sonrisa falsa mientras caminaba hacia su auto

Ni siquiera sabía por qué preguntaban esa cosas cuando las fotos de su aventura de la noche anterior ya estaban por todos los medios.

Siguió ignorando a los paparazzis hasta que logró meterse en su auto. Rápidamente, arrancó en vehículo para irse de ahí lo más rápido que pudo.

Ya en medio camino hacia su casa,  su teléfono empezó a vibrar y a hacer un ruido estridente: la estaban llamando

Con una mano en el volante y la otra metida en su bolsa, la rubia logró sacar su teléfono de el bolso y contestar la llamada, poniéndola en altavoz

–¿Bueno?– preguntó al teléfono

–Sam, soy yo– dijo la mujer al teléfono

Era su representante

–Ah, hola Tammy– dijo sin importancia– ¿Pasa algo?– preguntó con los ojos en el camino

–Dylan O'Brien, ¿enserio?– preguntó la mujer con una sutil risa de ironía

La rubia rió un poco– ¿Qué tiene? Es lindo y soltero, no hay nada de malo– se excusó

–Tienes problemas Sam, serios problemas– dijo jugando su representante, causando que ambas rieran –Como sea, necesito que vengas al estudio, tienes una propuesta– le dijo cambiando la conversación

–¿Sí? ¿De qué?– preguntó con curiosidad la cantante

–¿Te suenan los juegos del hambre?– preguntó su representante

Estaba de suerte que no hubiera nadie en la carretera, porque la chica juraría que nunca había frenado tan rápido en su vida






Aclaraciones:
Primero que nada: HOLAAAAA, la verdad estoy muy feliz con este fanfic porque tengo muchas ideas de como llevar la historia
•Segundo: El único personaje de mi autoría es Samantha y algunos de sus amigos y familia
•Tercero: Samantha y su carrera están basadas en la carrera de Taylor Swift; solo que Sam tiene muchísimos escándalos y polémicas
•Cuatro: Tom aparece en el segundo capituló, aproximadamente
•Cinco: Está historia va a ser slow burn pero no tanto, así que ténganme paciencia
•Seis: NO SOY ESCRITORA PROFESIONAL: tengo 14 y esto es solo un hobby, así que por favor si ven una falta ortográfica o algo erróneo, háganmelo saber de manera respetuosa
•Siete: No he visto ninguna historia como la que estoy intentando escribir, o sea, si con él mismo plot de que la prota hace una canción para tbosas pero no igual a lo que estoy escribiendo. Por lo que si lees esta historia y la consideras plagio a alguna historia que conoces o a tu propia historia, te pido que me lo hagas saber para yo poder hablar con la autora/autor de la historia y arreglar la situación
•Ocho: Disfruten la historia tanto como yo estoy disfrutando escribirla

Xoxo, Cami

Daylight- Tom BlythWhere stories live. Discover now