Mi jefe (Justin Bieber y tú)

Capítulo 25

Su voz. Definitivamente era el.

Justin.

-¿Qué haces?- pregunté girandome sobre sus manos para quedar frente a él.

-Me gustas mucho ________, y así vestida me volves loco.

Ay por dios.

Miro mi boca y se mordió el labio casi al punto de dañarselo.

-Me muero por besarte en este mismo instante- Dijo mirándome intensamente a los ojos.

Sus labios, sus carnosos y tentadores labios se estaban acercando a los míos. Sentí su respiración a milímetros de los míos.

Cuando estaba a punto de besarme.

Reaccioné.
Tengo novio y a pesar de todo lo amo.

-No Justin, esto no está bien. James es mi novio, no puedo hacerle algo asi. Ademas sos mi jefe, seria algo totalmente inaceptable.

Lo aparté.

-Perdón, en serio tengo un inmenso deseo por besarte. Pero no esta bien.-Dije.

Espero no arrepentirme de esto luego.

-Te entiendo. Y voy a esperarte hasta que sea el momento. Realmente te deseo como nunca deseé a nadie _______.

Sus palabras me dejaron confundida ya que después de decir eso, se fue.

Me mire en el espejo. Tenia las mejillas rosadas.

¿Que fue todo eso? ¿Realmente le gusto?
Necesito tomar algo fuerte.

Llegue a nuestra mesa y pedí otro trago. Nadie estaba ahí. Solo yo, todos los demás estaban en la pista o donde quieran que estén.

Pedí 2 tragos más. Que al ser tan fuertes, ya estaba mareada, pero lúcida.

Un celular de todos los que estaban en la mesa sonó.

Era el de James.

En su remitente decía "Dentista". Mire bastante confundida al celular. No creo que llame un dentista a esta hora. Aunque estemos en diferentes lugares allá también es tarde.

Sin dar mas vueltas atendí.

-¿Hola James?- Dijo una voz que me resultaba bastante conocida, pero no pude reconocerla.

-Hola... - Dije en un susurro para que no sepa que no soy James y siga hablando.

-James, mi amor, te extraño tanto. No voy la hora que vuelvas.

¿PERO QUE MIERDA? ¿QUE CARAJOS ES ESTO? ¿Me esta engañando con alguien?

La presión que hay en mi pecho es muy dolorosa. Nunca espere algo asi.

Colge y deje el celular todavía en shock arriba de la mesa.

Me levanté como pude del sillón y fui a buscar a James entre toda la multitud.

Me rompió el corazón.

Me dijo que me amaba, y yo creí en el. Como la ingenua que soy... le creí.

Años de relación para terminar en una infidelidad. Las lágrimas caían por mi rostro, no me importaba que se me este corriendo el maquillaje.

Divisé a James en la barra pidiendo un trago. Y fui caminando a gran velocidad hasta el.

Llegue a su lado. Me miro y dijo.

-Hola amor. ¿Vamos a bailar?

-Lo que menos tengo ganas en este momento es de bailar. Idiota.

Me miró confundido, sus ojos se abrieron como platos.