ANDREW
Corría por el pasillo como un maldito maníaco.
¡La están matando!
¡La están matando!
¡La están matando!
¡La están matando!
Las palabras de Logan se repetían en mi mente.
¡No ella, no mi cachorro!
Espera, amor. La conecté mentalmente. Estoy aquí.
Estoy cerca. Por favor, no me sueltes. Por favor, no me dejes. No puedo perderte, amor. Eres la persona más importante de mi mundo. No me dejes.
Podía oír a Jacob y Drake corriendo a mi lado.
Nuestros guerreros estaban detrás de nosotros. Apenas podía oír la batalla que tenía lugar dentro de la habitación.
Podía oír a unos cuantos pícaros siguiéndonos, pero nuestros querreros se ocuparon de ellos antes de que se acercaran demasiado a nosotros.
Los pasillos estaban completamente borrosos. Ni siquiera miraba por dónde iba. Lo único en lo que me concentraba era en intentar oir u oler algo.
No quería ni pensar en perder a mi hermana. Si ella muriera, me volvería jodidamente loco. Mi vida ya no tendría sentido. No tenía pareja, no tenía hijos. La tenia a ella. La amaba más que a nada en este mundo. No podía perderla. No podía.
Recordé su risa. Recordaba su voz llamándome por mi nombre. Recordaba todas y cada una de las veces que corría a mis brazos cuando era pequeña. Me acordaba de cómo me rodeaba el cuello con sus bracitos. Me acordaba de cómo se acurrucaba en la piel de Asher cuando tenía frío. Me acordaba de cómo acudía a mí cuando estaba enferma. Recordaba cómo buscaba consuelo en mí. Me acordaba de todas y cada una de las veces que la hacía reír. Me acordaba de cómo pasábamos el tiempo juntos y de lo mucho que nos gustaba estar juntos. Lo recordaba todo y no podía perderlo.
No podía perderla.
Asher se quejó en voz alta.
Mi Emma. Gritó. Mi hermanita
Lo sé. Le dije. Vamos a encontrarla, Asher. Vamos a recuperar a nuestro cachorro.
Miré a Jacob. Tenía una expresión de determinación en el rostro. Parecía dispuesto a matar. Me alegré.
Necesitaba a alguien que estuviera dispuesto a despedazar a las brujas.
De repente, sentí su aroma.
¡Emma! gimió Asher en voz alta mientras empezaba a correr aún más rápido.
¡Veo una puerta! Jacob me vinculó mentalmente.
Yo también lo vi. Pude ver la luz parpadeando dentro de la habitación, y supe que Emma estaba allí. Estaban haciendo alguna mierda con ella. Estaban experimentando con mi hermana!
Dejé escapar un fuerte gruñido y estampé mi cuerpo
contra la puerta.
No estaba preparado para lo que vi dentro.
Mi cachorrita estaba colgada del techo. Sus manos estaban por encima de su cabeza, y había cadenas alrededor de sus muñecas. Su cabeza colgaba baja. Apenas llevaba ropa. La sudadera con capucha que llevaba estaba rasgada y podía ver la mayor parte de la parte superior de su cuerpo. Sus vaqueros estaban llenos de agujeros. Su cuerpo estaba lleno de moratones, cortes y quemaduras. Tenía el pelo empapado de sangre.
Tenía los ojos cerrados. Ni siquiera se dio cuenta de que habíamos entrado.
¿Se había ido de verdad?
No, no, no, no. iPor favor, no!
¡No mi hermosa hermanita!
Gruñí y me concentré en las cuatro brujas de la habitación.
Cambiaron su enfoque en nosotros, pero me di cuenta de que no estaban completamente presentes. Sus ojos eran de un blanco lechoso y su magia se centraba en Emma.
¡Matadlos! Gruñí a través del enlace mental con mis guerreros.
Saltamos sobre ellos, pero habían creado un escudo a su alrededor y Emma.
Gruñi, golpeándolo con mi cuerpo. No se rompió, pero noté que se doblaba un poco. No era tan fuerte como sospechaba.
Supuse que no podian romper lo que sea que le estuvieran haciendo a Emma. No podían acabar con ella y centrarse completamente en nosotros.
¡Tenemos que derribar el escudo! Grité a través del enlace mental. ¡Tenemos que matarlos antes de que completen el hechizo!
Mis guerreros y yo empezamos a golpear nuestros cuerpos contra el escudo invisible. Cada vez que lo hacíamos, un pequeño zumbido de electricidad sacudía nuestros cuerpos. Estaba tan jodidamente enfadado que ni siquiera lo sentía. Me importaba una mierda si era una descarga eléctrica en toda regla. Estaba llegando a mi hermana. Estaba llegando a Emma.
No aparté los ojos de ella en todo el rato. Intenté averiguar si respiraba o no. Juraría que vi su pecho subir y bajar, y eso me bastó para no derrumbarme ante el inmenso dolor que sentía.
Miré a las brujas. Eran débiles. Estaban concentradas en Emma y en el ritual que estaban realizando. Parecía que no podían detener el hechizo. Intentaron concentrarse en nosotras, pero les resultaba demasiado difícil.
Esta era nuestra oportunidad. ¡Teníamos que derribar
el escudo!
El cuerpo de Emma se sacudió cuando las perras le dieron otra descarga eléctrica. Sus ojos permanecieron cerrados.
Gruñí fuerte, golpeando mi cuerpo contra el escudo aún más fuerte que antes.
¡Andrew! Oí la voz de Logan en mi mente. ¿La encontraste?
Lo hice. Lo vinculé mentalmente de inmediato. Hay un escudo alrededor de ella y las brujas. Estamos intentando atravesarlo.
¿Está viva? preguntó Logan, con voz temblorosa. Aún puedo sentir el vínculo, pero se está desvaneciendo...
Se le quebró la voz y dejó de hablar a través de nuestro enlace.
Miré a Emma. Miré su pecho. Hubo un pequeño movimiento.
i¿Andrew?! Logan gritó.
Está respirando. Lo conecté mentalmente. Ven aquí lo
antes posible.
Ya voy. Gruñó. Ya casi terminamos aquí. Casi mato al cabrón, pero cambié de opinión. Vamos a jugar con él un poco antes de dejarlo morir.
Gruñi y volví a golpear el escudo con mi cuerpo.
Empezó a resquebrajarse.
¡Más fuerte! Grité a través del enlace mental con mis guerreros.
Hicieron lo que les dije y oímos cómo la electricidad se propagaba por el aire al desaparecer el escudo.
Las brujas nos miraron, intentando concentrarse.
Uno de ellos levantó la mano y nos apuntó con ella. Sentí que me golpeaba un hechizo, pero era demasiado débil para hacer daño.
Matar. Lo pedí a través del enlace mental.
Oí un gruñido muy familiar detrás de mí.
Leon estaba aquí.
BẠN ĐANG ĐỌC
Traicionada Por Mi Mate - Teresa Lilly
Người sói- Yo, Logan Carter, alfa de la manada Luna Creciente, te rechazo a ti, Emma Parker, de la manada Luna Creciente -. Podía sentir como se me rompía el corazón. Mi lobo aullaba dentro de mi, y podía sentir su dolor. El me miraba directamente, y podía v...
