Hackeando el amor

Segundo capítulo

—¿Prim? —Susurraron —¡Prim! ¿Estás bien? —Preguntaron y movieron su hombro.

PrimRose abrió los ojos. La imagen de su salón de clases se hizo presente en su vista. Observó a todos lados hasta ver a quien se encontraba a su lado, era su mejor amigo Zander, quien la miraba preocupado.

—Ah, si si. Estoy bien, ¿qué pasó? —Preguntó PrimRose en voz baja, para no interrumpir.

—Es que llevas la mitad de la clase dormida —respondió—. Hasta el maestro te habló en un momento y no respondiste.

PrimRose hizo una mueca de vergüenza.

—No tuve una buena noche ayer, no pude dormir.

Sí, desde que hackearon la computadora de PrimRose y esta lo restableciera, aunque el hacker ya no tenía acceso a sus cosas, siguió pensando en la situación. Sentía que su privacidad era invadida de cierto punto, tanto así que sentía que la podía escuchar por medio de su celular o que alguien la observaba desde su ventana. Lo que era algo tonto ya que su cuarto se encontraba en el segundo piso. Aun así, no pudo dormir bien por sus nervios y la ansiedad de que algo malo le iba a pasar.

—¿No pasaste la parte final de Mario?

—No, no... no es eso. —Alejó su mirada, iba a mentirle ya que no quería decirle lo que paso. Tendría que darle explicaciones y hablar sobre su secreto, así que prefirió mentir aunque no fuera de su agrado. —Tuve que ayudar a mi madre, ya sabes que ella no está mucho tiempo en casa y se le hace difícil.

—Entiendo. —Respondió Zander y miró al frente para prestarle atención al maestro. PrimRose hizo lo mismo.

El maestro ya no estaba hablando, si no que estaba guardando su marcador y borrando el pizarrón. Luego volteó y miró a PrimRose.

—Bienvenida, Bella durmiente. —Bromeó y sus compañeros rieron. —La clase de hoy terminó aquí chicos. Nos vemos el lunes... bueno, nos vemos hoy en la tarde. ¿Van a venir todos a la fiesta no?

"Si" mencionó la mayoría.

—Entonces nos vemos en la tarde.

Todos agarraron sus mochilas y poco a poco salieron del salón de clases.

—PrimRose, tu quédate.

PrimRose se detuvo justo en la puerta, cerró los ojos y se quejó internamente. Abrió los ojos y observó como su mejor amigo Zander junto a su otro mejor amigo Thiago, se fueron mientras murmuraron "Te esperamos donde siempre".

PrimRose conoció a Zander y a Thiago al mismo tiempo, hace 6 años atrás. Su amistad comenzó por algo tonto que los hizo unir cada día más: Los videojuegos. Si, Prim era nueva en la escuela y al ser su primer día estuvo sola en toda la hora del almuerzo, en una esquina, jugando Pokemón. La musica del juego atrajo a Zander y a Thiago, quienes se emocionaron de ver que a ella le gustaba ese juego. Comenzaron a jugar juntos y hasta el día de hoy son inseparables. ¡Los adora!

PrimRose volteó y se acercó a su maestro.

—¿Sí?

—Tu comportamiento de hoy me tiene inquieto. —Comentó preocupado.

—Solo dormí maestro.

Su maestro siguió hablando. —Usted es una estudiante muy inteligente, nunca había visto esto en usted anteriormente.

—Estuve ayudando a mi mamá hasta la madrugada. —Volvió a mentir, por obvias razones.

—No acepto que vuelvas a hacer esto —continuó hablando, es como si no la escuchara bien —, porque se que eres una buena chica pero esto no esta bien. Espero que no vuelva a pasar, ¿de acuerdo?