Tan fuera de mi mundo y del tuyo (Saga Blue Axxes, Libro 1)

5. MI VIDA ES ESTA

Daken

Soy Daken Zarecky, y esta es mi vida...

Tengo una hermana cuatro años menor que yo: Nadylla Camille Zarecky. Qué decir de ella, es mi cable a tierra, lo que necesito ver cada vez que me canso del mundo, que cada vez más seguido se cansa de mí y de mis defectos...

Uno de ellos, y quizá el más grande, sea el parecer T.O.C., el trastorno obsesivo compulsivo que tanto me ha quitado. Siempre, desde los ocho años que me lo diagnosticaron, pensé en lo mismo: ¿por qué yo?

Sé de sobra que no era especial entonces, y estaba bien con eso. Pero que esta cosa sea lo que me defina como especial nunca fue lo que quise. ¡Dios! Yo no elegí que me señalaran día tras día con la etiqueta "diferente o rara" en la frente. Simplemente no puedo evitarlo. Es como si hubiera hecho una especie de simbiosis conmigo; es parte de mí, no puedo negarlo. Pero no es lo que soy... y el único que hasta ahora me vio por lo que sí soy es Kerr Benedek...

No quiero arruinar lo que sea que tengo con él.

No volvería de Kerr. Lo necesito en mi vida.

—¿Cómo es eso de que andas por todas partes con el chico más inaccesible de tu escuela? —dispara una atenta Nadylla a lo que le voy contando de Kerr y yo.

—No es como si fuera a todas partes con él... ¡Mira! Ahora estoy aquí contigo, ¿no? —digo, tratando de no parecer nerviosa por sus comentarios.

—Daken Dellayra Zarecky: no te salgas por la tangente... ¡y respóndeme lo que te pregunté! —escupe más que decidida a seguir picándome con la misma aguja, es decir, pregunta.

—Él... s-solo se acercó. Bueno, no una, sino varias veces... hasta que me cansó y terminamos hablando. Y resulta que no éramos tan diferentes después de todo.

—¡Te pillé! Te pones súper nerviosa al hablar del tal Kerr... "Mi amor imposible" —exclama esto último en tono de burla, como si actuara en una obra, con muecas y toda la cosa.

—¡Cállate! ¿Es demasiado pedir eso?

—Deik... no te molestes con tu "pequeña hermana" por las tonterías que dice...

>>Yo solo... estoy feliz de que hayas encontrado un amigo en quien confiar y del que puedas recibir apoyo. Además de mí, no hay nadie en quien confíes. Creo que ese chico te hará muy bien. Solo... ten cuidado —finaliza Nad para irse a su habitación.

¿Qué tenga cuidado? Pero de qué, ¿acaso Kerr sería capaz de lastimarme?

Él sabe que no soy fácil con las relaciones; comunicarse, tener amigos, o cualquier cosa por el estilo.

Lo que sí temo, desde nuestra recién descubierta amistad, es confundirme, ser vulnerable ante él. A necesitarlo tanto.

Por otro lado, están las miradas asesinas que Ruth Allen y Erika Dunne lanzan hacia nosotros, o más en específico, a mí, "La Rara" que no quería hablar con nadie... La que ahora se pasea con el enigmático Kerr Benedek por todo el instituto Linch.

Es claro que en esa escuela hay "grupos" bien definidos. Ruth y Erika no son populares como las del grupito de clones de secundaria que aparecen en las películas juveniles...

No. Ellas son como una mezcla de punk/metal/geek gritando a los cuatro vientos: "no te metas en mi camino o verás cómo te saco de él yo misma".

No es un grupo exclusivo de chicas, están con Kerr, Michael, su primo,  Lukas y Greyson. Son "bastantes respetados", por decirlo así. Están en lo más alto de lo que se llama "estatus de reputación estable" junto con otros grupos en la escuela con los que nadie se mete.

Yo no pertenezco ni quiero encajar en ningún nivel de la "pirámide escolar", como yo la llamo, en la que los que están arriba son los que definen la supervivencia de los de abajo, dicho sea de paso, los más débiles.

No quiero que mi nombre aparezca etiquetado en ningún lado. Nunca adoré ser el centro de atención por bonita o por ser la más indefensa, pero es evidente que mi amistad con "el chico oscuro" trajo una atención que nunca habría tenido de no ser porque ahora a él le interesa "hacer horas comunitarias para los marginados del instituto Linch". Algo va a ocurrir por eso, solo es cuestión de tiempo para ver cuándo.

...

Hoy es día de escuela. No me encuentro de ánimos para asistir a clases, ayer tuve una discusión muy fuerte con mi mamá debido a que ella quiere que asista a unas clases de apoyo para personas con trastornos de ansiedad -algo así como "Alcohólicos Anónimos, pero con mis "problemas mentales"-. Le pregunto a mi madre, con la seguridad de que dirá que no, si puedo faltar por este día nada más, a lo que accede sorprendiéndome con la boca abierta.

—¿Por qué pones esa cara? Te entrarán moscas si no cierras la boca...

—Por nada. Es que no me esperaba que dijeras que sí...

—Oh, bueno... pero no creas que será así de simple... —¡Oh, Dios, no!—. Tienes este día para pensar lo de la terapia de apoyo. Mira, es importante para mí que lo intentes. Creo que te hará muy bien...

>>Investiga en el ordenador si tienes dudas sobre ello. Aunque ya me informé... es acerca de lo que te gusta: "escritura", y no está muy alejado del colegio, por lo que puedes ir después de clases.

—Y todas estas personas que van a estar ahí: ¿tienen T.O.C.? ¡Ah, mamá!

—Sí... y otros problemas de ansiedad también.

—¿Problemas o trastornos?

—¡Basta, Daken! Vas a ir de todas formas, ya lo decidí. Una hora después de la escuela, todas las tardes. Yo te recogeré cuando termines, ¡¿okay?!

—¡¿Qué pasó con eso de que podía pensarlo hoy, mamá?! —grito a la defensiva. No es la primera vez que toma decisiones por mí sin consultarme siquiera.

—Solo... quiero que te acostumbres a la idea, ¿de acuerdo? —exhala con más calma.

No tengo opción. Así que solo asiento con la cabeza.

...

Estuve dándole vueltas a la idea toda la tarde... Puede que no sea tan malo después de todo.

Mi mente siempre hallará motivos para preocuparme. Tengo que hacerlo. Sin pensar en consecuencias maquinadas por la ansiedad... de no saber yo qué sé.

Pero el único punto malo que tiene todo esto es que no podré pasar tiempo a solas con Kerr en la salida mientras espero a que vengan por mí. Hablando de él... seguro va a llamar preocupado por mi falta de hoy. Le enviaré un mensaje de texto.

Yo: ¡Hey! ;) ¿Qué haces? Perdona que no fui hoy...

Kerr: ¡¿Qué pasó?! :(

Me asombra lo rápido que llegó su mensaje. Apenas le envié el mío.

Yo: Estoy pensando...

Kerr: ¡Habla ya! ¿Okay?

Yo: Te lo digo mañana en el instituto. ¡Estoy bien! Gracias por preocuparte :)

Kerr: Eso es todo por hoy entonces.

Ese día no recibo más mensajes. Creo que está enojado conmigo. No me gusta esto... pero ya es tiempo de decirle a Kerr lo que tanto odio de mí. Que sea lo que Dios quiera...

Mientras no sea algo que lo aleje de mi lado.