INFANCIA INESPERADA

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El pulso de Alex se debilitaba mientras se encontraba en el suelo del laboratorio, rodeado por libros y máquinas extrañas. Un experimento había salido mal, y su cuerpo, ahora sin vida, yacía inerte. La diosa, una presencia etérea, se materializó frente a él.

"Tu vida ha llegado a su fin, Alex", dijo la diosa con tono sereno. "Pero no todo está perdido. Tu alma está marcada por la búsqueda constante de comprensión, aunque tu forma de buscarla haya sido errónea."

Confundido y aturdido, Alex asintió, dispuesto a escuchar las palabras de la diosa. Ella continuó, "Para darte una nueva oportunidad, te concederé el don de la sabiduría y una forma única en un mundo mágico. Así podrás aprender a entender a los demás de una manera diferente."

En un parpadeo, Alex se encontró flotando en un paisaje extraordinario y, ahora convertido en un slime con una oportunidad de redimirse y comprender la magia de las relaciones. Su viaje hacia la metamorfosis mágica acababa de comenzar.

Alex, aún desorientado, emergió del líquido viscoso anaranjado en el que se encontraba sumergido. Al mirar a su alrededor, descubrió con horror que estaba en medio de un lago de lava. El pánico lo impulsó a nadar desesperadamente en cualquier dirección hasta alcanzar la seguridad de una pradera cercana.

Una vez en tierra firme, observó su entorno con más detenimiento. Para su sorpresa, se encontró rodeado de slimes de su misma especie, cada uno con colores y formas únicas. Aunque inicialmente sintió alivio al ver a otros seres parecidos a él, no podía evitar la sensación de extrañeza al notar que él era diferente, con su tono anaranjado poco común.

Se aproximó con cautela a los otros slimes, sintiendo una mezcla de curiosidad y nerviosismo. Su nueva vida en este mundo apenas comenzaba, y la presencia de sus compañeros slime le ofrecía la primera oportunidad de entender cómo encajaría en esta extraña realidad.

Con el paso de los días, Alex se sumergió en la vida cotidiana de los slimes, aprendiendo a comunicarse con sus compañeros de especie. Descubrió que, tras reproducirse, depositaban sus huevos en la lava, y solo el slime más fuerte emergía vivo de ese ambiente hostil. Esta era una práctica fundamental para la supervivencia de su especie.

Además, los slimes eran resistentes a la lava y a los jugos gástricos de la mayoría de los seres vivos, siempre y cuando no fueran más grandes que una vaca. Esta resistencia les permitía sobrevivir en ambientes extremos y alimentarse de lo que el cuerpo consideraba innecesario, incluyendo la grasa. Alex se sorprendió al descubrir que los slimes se habían vuelto populares entre las mujeres, ya que podían ayudarlas a adelgazar.

Con cada nueva revelación, Alex se adentraba más en el peculiar mundo de los slimes, tratando de comprender su propia existencia y las dinámicas de esta sociedad mágica.

Con la nueva información proporcionada por la habilidad de sabio, Alex se enfrentó a un dilema. Sabía que, para alimentarse y sobrevivir en este mundo, debía seguir el ejemplo de los otros slimes y permitirse ser devorado. Sin embargo, la idea de ser consumido por otro ser le resultaba difícil de aceptar.

La sabiduría le indicó que bastaba con ser devorado una vez para que él pudiera devorar por dentro lo necesario para transformarse en ese ser vivo específico. Esto le ofrecía una forma de obtener nutrientes sin tener que enfrentarse repetidamente a la experiencia de ser devorado.

Aunque esta nueva perspectiva le brindaba una solución práctica, Alex se debatía entre su resistencia natural a ser devorado y la necesidad de adaptarse a las reglas de este mundo mágico. Con esta decisión, iniciaba su viaje de autodescubrimiento y adaptación en un entorno que desafiaba sus conceptos previos de vida y supervivencia.

METAMORFOSIS MAGICAWhere stories live. Discover now