~¡Obedeceme! ~ Twilight // Emmett C.~ Seth C.

09~

El resto perseguiría a James.

Alex miró a través del parabrisas trasero del Mercedes de Carlisle y pudo distinguir a Edward hablando por teléfono, muy probablemente de guardia con el humano.

Si pensaba que iba a salir de esta, está totalmente equivocado.

Sin embargo, no fue hasta más tarde en el camino que el teléfono de Alex sonó de repente. Lo miró fijamente mientras el nombre de Alice aparecía en la pantalla antes de contestar.

-¿Hola? ¿Alice?- Respondió, escuchando la voz asustada de Alice desde la otra línea. -Espera, ¿qué? ¡Espera! ¿Cómo? Pero pensé...-

Alex gimió por lo bajo. Esta humana no estaba pensando en absoluto, ¿verdad?

-¡Nosotros estamos en camino!- Él la tranquilizó y colgó la llamada. -Malek, ¡necesito que corras delante de nosotros a algún antiguo estudio de votación! Eres el más rápido, así que llegarás antes que nosotros. Te enviaré a ti y a Edward la ubicación. Él llegará poco después que tú.-

-¿Por qué? ¿Qué está pasando?- Preguntó preocupado el Vampiro más rápido, acercándose desde el asiento trasero.

-Bella se fue sola. James debe haberla contactado cuando Alice y Jasper no estaban cerca, y todo lo que saben es que ella se dirige sola a su antiguo estudio de ballet.- Alex explicó, mientras le enviaba mensajes de texto a Edward al mismo tiempo, aunque estaba seguro de que el lector de mentes tendría noticias de Alice muy pronto.

-¡Entendido! ¡Estoy en camino!- Malek inmediatamente salio del auto en movimiento sin pensarlo dos veces.

El auto se sacudió levemente por la fuerza de la velocidad del hombre. -Dios, ese tipo es rápido.- Emmett resopló, cambiando de marcha y acelerando cuando Carlisle se hizo a un lado para que Edward pudiera despegar también.

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El taxi que Bella tomó, se detuvo en el estudio de ballet y dejó salir a la chica antes de irse.

Bella estaba sola y tenía miedo, pero no tenía idea de lo que este vampiro le haría a su madre, y eso la aterrorizaba más que cualquier otra cosa.

En el momento en que recibió esa llamada telefónica en el hotel, fue como si se le cayera el corazón al estómago. La idea de que su madre estuviera en peligro por algo de lo que ella era parte era una píldora difícil de tragar, y no iba a dejar que su madre sufriera por sus propias malas decisiones.

¿Fue una decisión tonta? Sí. Pero también lo fueron las decisiones que tomó antes de esto, así que ¿por qué detenerse ahora?

"Nunca había pensado mucho en cómo moriría". Ella recuerda su pasado y lo que pensó una vez antes, "pero morir en el lugar de alguien a quien amo era una buena forma de hacerlo."

En este caso, no es por Edward por quien se está sacrificando... es por su madre. Su vida para la persona que más ama.

"No puedo arrepentirme de las decisiones que me llevaron frente a la muerte. Fueron mías". Bella se narró a sí misma, empujándose hacia el edificio. "Tampoco me arrepiento de haber conocido a las personas que tengo. Son mis amigos y mi familia. Pero mis errores también me trajeron a Edward y al mundo que lo rodea... El mundo no es mío. Sé que la culpa no es toda mía, pero para salvar a las personas que amo, siento que debo enfrentar esto sola".

Cada paso que daba hacia el estudio era como si un peso cayera sobre sus hombros. Especialmente cuando entró por las puertas dobles del salón principal.