Como el ambiente estaba un poco intenso crucé por enfrente de Thiago, le dejé a su hermana y me alejé del salón para ir al lavabo. Cuando salí me encontré con ese chico rubio y me ofreció su mano en forma de saludo, pero no la acepté

—Perdona, no me pude presentar me llamó Ryan—me dijo

—Lo siento, me tengo que ir—fue lo único que le dije

Volví al salón y me junté con mis amigos. Entonces Jacob propuso un juego y como vi que todos aceptaron, me acabé sentando entre mi novio y mi hermano.

—El juego es sencillo, cada uno hará una pregunta a la persona que quiera, y si esa persona no quiere responder, deberá beber del vaso que contiene vodka—explicó Jacob

En ese momento, me quería salir del juego porque la última vez que tomé alcohol, casi acabó con un dolor de cabeza que me iba a explotar, pero ahora no podía irme porque iba a quedar mal delante de todos ellos, así que me quedé en mi sitio.

Todos los presentes estuvieron haciendo bastantes preguntas, algunos respondieron y otros bebieron. Entonces, le tocaba preguntar al chico rubio que no me había dejado de mirar, a pesar de las miradas desafiantes que le habían puesto mi hermano y Thiago.

—Mi pregunta va para ti...—dijo y acabé diciéndole mi nombre, ya que sería lo mejor para que esto acabara

—Me llamo Daniela

—Mi pregunta va para ti, Daniela—me crucé de brazos—¿Estás saliendo con Thiago, verdad?—asentí—¿Entonces conocerás a Naya Brown?

¿Qué pregunta era esa? De todo lo que me podía esperar que saliera de su boca, esto estaba muy lejos

—La verdad es que no la conozco

—¿Eres idiota?—le soltó Thiago

—Solo era una pregunta—le contestó el rubio

—Pues mejor cierra el pico, idiota—le dijo mi novio con un tono brusco

—Lo siento, amigo—se disculpó—Pensé que como erais novios le habrías contado la verdad

Estaba perdida, solamente podía mirar a mis amigos y a mi novio que tenían unas miradas de odio hacia Ryan. El ambiente era tan intenso que Thiago le acabó pidiendo a Jacob que se llevará a Mar a otro lado.

—¿Sabes por qué a tu novio le abandonaron sus padres?

No respondí. Sabía que los habían abandonado porque no les importaban y porque solo estaban pendientes de su trabajo, pero en la forma que Ryan insinuaba la pregunta algo me dijo que había otra verdad.

—Oh, ya veo. No lo sabes

—Cállate ya—le ordenó Thiago cabreado

—Perdóname amigo, pero es que la chica merece saber que no vas a hacerle lo mismo—siguió insistiendo el rubio

—¡Imbécil, te juro que como salga una palabra de tu boca, te voy a partir la cara de una vez por todas!—le gritó y apretó sus puños

Estaba cansada de no saber qué estaba pasando y que los demás si lo supieran.

—¡¿Quién es esa tal Naya?!

—Preciosa, pregúntale a tu novio, es quien debería contarte la verdad, en vez de ocultarte secretos—me dijo Ryan

Sus palabras me empezaron a hacer daño. Solo quería creer que el rubio me estaba molestando y que no era verdad que Thiago me ocultaba secretos.

Me giré en dirección de esos ojos verdes y traté de convencerme que Ryan solo quería joder nuestra relación porque se llevaba mal con mi novio.

Corazones en llamas ©Where stories live. Discover now