Capítulo 4

327 69 12
                                    

Hoseok se apresuró a sostener al paciente que intentaba caminar por las barras, un paso a la vez, pero al mismo tiempo quería ver el partido de fútbol en la televisión. No pudo evitar soltar una pequeña risa y ayudarlo a ponerse en posición nuevamente.

— No creo que logres terminar la terapia hoy si estás así de desconcentrado, ¿deberíamos apagar la televisión?

— ¡Hoseok! — se quejó el paciente— está jugando el nacional contra el inter. Lo que no entiendo es como tú estás tan concentrado.

— Ni lo intentes— dijo el doctor entrando a la sala de terapias—, Hoseok no vive la pasión del fútbol como el resto de nosotros.

— Hola, doctor Yoongi— saludó el paciente mientras Hoseok bufaba.

— ¿Qué tiene de malo que no siga el deporte más popular del país? — preguntó mientras seguía acompañando a su paciente en cada paso.

— Tiene todo de malo— le dijo Yoongi.

— Aja, como digas— respondió Hoseok—. Por cierto, Seokjin tuvo que quedarse unas horas más en la estación, ¿te diste cuenta de todo lo que sucedió?

Yoongi suspiró mientras asentía. Seokjin y él tenían cuatro años de haberse casado, y antes de eso fueron novios por tres años. Aún así, Yoongi no podía dejar de temer cada vez que su esposo tenía que ir a un rescate. Y, aunque no quería demostrarlo, con toda la situación de los atentados se encontraba sumamente nervioso.

— Él... sabe cuidarse— le dijo Hoseok al notar la mirada nerviosa en el doctor.

Yoongi intentó recuperar la compostura y fingir que no había tenido ese pequeño momento de debilidad. Sus manos habían estado temblando y eso no era bueno para un médico. Tenía que calmarse y confiar en Seokjin.

— Lo sé— dijo, mientras observaba el expediente del paciente que Hoseok ayudaba como voluntario.

— Ya te faltan pocas sesiones de terapia— le dijo con una pequeña sonrisa—. ¿Cómo te sientes?

— Mucho mejor— le dijo el paciente—, he seguido todas sus indicaciones, doctor.

— Se nota— le dijo Yoongi—, cuando termines este recorrido, te haré una pequeña revisión. Hoseok, lo llevas a mi consultorio.

— Si, doctor— respondió Hoseok.

Su paciente y Yoongi se quedaron un rato más enfocados en el partido.

— ¡Gooooool!— gritaron al unísono cuando el jugador estrella del nacional anotó un gol con una jugada espectacular. Hoseok no entendía todo esto, pero sonrió un poco al ver a ambos celebrar.

-🚒-

Hoseok se alistaba para irse de la teletón, pero fue interrumpido por Yoongi.

— Oye Hoseok, ya tengo un paciente nuevo que asignarte cuando termines con éste, ¿podrás seguir ayudando?

— Sabes que sí— le respondió con una sonrisa.

Yoongi asintió y luego suspiró con un poco de preocupación.

— Con esto de los atentados tengo la preocupación de que comencemos a recibir demasiados pacientes y no tengamos suficientes voluntarios.

— Entonces tendré que hacer horas extra— le respondió Hoseok, pero Yoongi negó con la cabeza.

— Eso podría ser contraproducente. Eres bombero y necesitas descansar correctamente—. Hoseok sintió una pequeña calidez por la preocupación de Yoongi—. Estaba pensando en que podría enviar contigo algunos volantes, tal vez más bomberos estén interesados en ayudar aunque sea en ésta época. Quiero que estemos listos para recibir mucha gente. Es mejor que sobre a que falte.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 31, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Benemérito |Junghope| EmisiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora