Drift

14.

"Qué estamos haciendo aquí?" mire todo el lugar por fuera, era muy grande.

"No es obvio, dulzura?" me atrajo hacia el mientras me abrazaba por los hombros "Te trajimos a un salón de belleza"

"El mejor de todo Roppongi"

Mire a ambos hermanos sin decir nada, me llevaron dentro del edificio y el olor inundó mi nariz. Fijador y escencias.

"Hoy nosotros te haremos un cambio de look" Ran se slejo de mi y fue directo con una de las muchas chicas que trabajaban en el establecimiento.

"Cuando me llamaron y dijeron que era hora yo creí que me llevarían con mi Takemicchi..."

"Gatito hay que ir por partes, si?" Le mire mal y el solo atino a reír entre dientes "Hemos ideado un plan desde que fuimos a cenar aquella noche, y hay que seguirlo al pie de la letra o si no tu nunca verás a tu Takemicchi y nosotros estaremos tres metros bajo tierra"

"Yo lo seguire buscando y nos encontraremos"

"Ternurita... tu piensas que el no sabe lo que haces?" Rin dejo su actitud juguetona y la cambio por una más seria. "Desde el momento en que saliste del hospital te ha echado un ojo, no siempre te manda a seguir pero si una ves por semana"

Mi corazón empezó a acelerarse y mi rostro se convirtió en un poema, con esta nueva información un sentimiento de querer golpear y abrazar a Takemicchi me inundó.

Todo este tiempo buscándolo como loco y el simplemente viendo todo mi esfuerzo, todo el tiempo y dedicación, incluso mis arranques de desesperación por querer encontrarlo... fueron vistos e ignorados.

"Dulzura te presento a Lana, ella te dejará viéndote como alguien nuevo" Ran llego y me saco de mi mente, presentando a una chicha de cabello rojizo alborotado y una gran sonrisa.

"Ven querido, sígueme"

Ella tomó mi mano y me llevó a la segunda planta del edificio. Los Haitani nos siguieron y se pusieron cómodos.

"Muy bien, veamos" ella empezó soltando mi cabello y cepillando de este con delicadeza "Me encanta su cabello, es un tono natural muy hermoso y lo tienes algo largo..."

Ella examino unos minutos más mientras yo solo miraba por el espejo a ambos Haitani.

"Rin dijo que esta era lo primero en el plan, a que se refieren con eso?"

Ellos se vieron y Ran se levantó de su asiento, poniéndose a un lado mío.

"Tu estas vetado totalmente de nuestros cuarteles, si te ven por los alrededores tenemos ordenado desaparecer de tu panorama." dijo mirándome a través del espejo. "Y te informo que ya nos has hecho huir como cucarachas un par de veces"

Había visitado muchos lugares, también a las afueras de Shibuya llegué a parar. Ahora puedo entender porque no había podido encontrarlos.

"Por qué han decidido ayudarme? Si dices que tienen órdenes de huir de mi... eso aplica también en ustedes o no?"

Ran se quedó como si estuviera meditando y metió sus manos a los bolsillos delanteros de su pantalón.

"No esperaba que todo esto lo fuera a cambiar tanto. Hanagaki tenía una visión parecida a la de tu hermano y quería domar a todo Japón con eso en mente, que todos quisieran seguir su misma ideología" se quedó callado un momento "Pero después de lo que te pasó su percepción cambió, ahora cree que para mantener un Japón bajo su mando debe imponer violencia, sino nadie cedería."

La chica llamada Lana llegó con un carrito repleto de mu has cosas.

"Lana, dale un cambio radical, y dale un toque femenino"