𝐌𝐲 𝐭𝐫𝐞𝐚𝐬𝐮𝐫𝐞 | 𝖹𝗈𝗋𝗈 𝖱𝗈𝗋𝗈𝗇𝗈𝖺

𝟎𝟏𝟔: 𝐓𝐡𝐞 𝐭𝐫𝐚𝐩

—A veces se me olvida que piensas.— suelto molestandolo y él gira los ojos.

—Esta noche iremos al bar en donde suele el dueño del puerto y Jane deberá usar ese collar.— me dice ignorando mi comentario.

—Sí...yo no puedo dárselo. No creo que acepte un regalo mío.— digo antes de que intente hacerme dárselo.

—¿No crees que ya hice mucho robandolo?— suelta y yo niego.

—Si se lo das tú lo aceptará...Al parecer le gustas.— digo y él aparta su mirada y suelta un suspiro.

—Ya no estoy tan seguro si quiero ser parte de esto.— dice.

—Muy tarde para arrepentirse.— le digo cruzandome de brazos.

Me mira unos segundos directo a los ojos. Los mira como si estuviera buscando una razón para aceptar y luego suspira.

—Bien,pero no creas que haré todo el trabajo. Eres tú a la que amenaza.— dice recordándome que era mi problema.

—Lo sé,yo haré el resto una vez que le des el collar.— asiente al escucharme.

Iba a irse y antes de que pueda hacerlo lo llamó. Se gira a mirarme y suspiro juntando valor para hablar.

—Gracias...de verdad.— le digo y arruga un poco las cejas al escuchar.

Asiente luego de unos segundos y se voltea de nuevo volviendo a la cabaña.
Yo me quedo en mi lugar tratando de hacer tiempo. Se suponía que yo entrenaba.

No sabía si el plan de Zoro funcionaría,pero iba a intentarlo. Temía que si Jane le contaba a Luffy sobre Fujihama,me pida que me vaya.
Ese hombre era capaz de cualquier cosa y temía que Luffy para evitar problemas con él me haga irme.

Aún no comprendía cómo jane sabía sobre mí y él,pero sabía que sí ella lo sabía es porque él debe estar buscándome y haciéndole saber a la gente sobre mí.

Si esto salía bien,iba a contárselo yo misma a Luffy. Debía explicarle bien todo y tal vez logre convencerlo de que me deje continuar con la tripulación.
Ya no quería quedarme en un pueblo lejano para que él no me encuentre. Quería viajar con ellos y vivir más aventuras juntos.

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NARRADOR OMNISCIENTE:

Los sombrero de paja llegaron al bar en donde aquel hombre,al cual le pertenecía el muelle de la aldea,solía visitar cada noche.

El peliverde tuvo mucha suerte al escuchar a dos mujeres hablar sobre el hombre y sus visitas nocturnas al bar,en el mercado. No solía perderse ni una noche,su mujer solía buscarlo una vez que el alcohol lo nublaba completamente.

El lugar era tan grande que podrían caber todos los habitantes de la aldea.
La tripulación busca una mesa libre para cenar. Jane también los acompañaba. Aquel collar brillante de rubí colgaba de su cuello. Se lo presumía sonriente a la castaña,la cual por dentro se alegraba de verla con eso.

—¿Quién será ese hombre?— pregunta el rubio mirando a un hombre bebiendo hasta el fondo.

—Terminará por desmayarse de tanto tomar.— suelta juguetón el moreno mirando divertido al hombre.

El peliverde y la castaña miraban atentos a aquel hombre. Kaly mira a Zoro buscando aprobación para saber si se trataba del hombre que horas antes hablaban.