Capitulo 16

171 17 0
                                    

Capitulo 16 

Narrador omnisciente 

Una semana después...

Dylan se encuentra sentado viendo la luna, no tiene fuerzas para nada, solo reza y reza poder encontrarla, Adalia no sabe que hacer, el mismo horror se repite, Adrien se siente perdido sentado en su despacho, ha mirado el mapa tantas veces que no sabe donde más buscar. Áyax se unió en su búsqueda, solo reza porque ella pueda usar el silbato, así sabría dónde está. 

-Dylan cariño, tienes que comer algo.- dice Megan 

Dylan la mira y sin poder evitarlo se echa a llorar, no entiende nada, no sabe donde buscar y se ha quedado sin voz de tanto pedirle a la luna que se la devuelva sana y salva. 

-¿porque ella?- pregunta-¿porque no me ha llevado a mi?- dice- soy yo quién tiene la culpa de lo que ha pasado.

-Nada es tu culpa, pequeño, no tienes al culpa de los actos de una persona llena con odio.- dice mientras lo acuna entre sus brazos.- tienes que comer y descansar, tienes que hacerlo para reponerte

Entre los brazos de su tía Megan, cierra los ojos y se deja llevar por el sueño y el cansancio.  

***

Mientras tanto en un punto lejano, dónde los árboles se mecen al compás del aire, los pájaros han dejado de escucharse, el agua parece que en algún momento ha dejado de caer por la cascada, solo se escucha el sonido del terror. 

Ayra en un momento dado logra cortar la cuerda con un cristal, no sabe de dónde ha sacado la fuerza, solo sabe que ha tenido que hacerlo, no le queda mucho tiempo. 

La herida de la pierna le dejó de sangrar pero el dolor de la infección es mucho más fuerte, el sudor de la frente y los calambres le incomodan, en una semana se ha aprendido los turnos que toma Lucas para golpearle he insultarle, y esta es su oportunidad, cogiendo el colgante que le regaló su madre y con la poca esperanza que le queda, sube las escaleras  y, abriendo la puerta de sótano, aparece en una cocina, en silencio y con el ruido de la madera ante sus pisadas corre hacia la salida. 

Al salir se encuentra en un claro, y por un momento recordando a Áyax sopla tan fuerte como puede del colgante que le dio, solo espera que sirva de algo. 

***

Áyax corre tan rápido  como puede y al llegar a la casa de Adrien sin esperar que le abran la puerta, este entra sin permiso. 

-¡Adrien! ¡Adrien!- grita- ¡creo que la he encontrado!

Ven y ámame (MTUH parte 3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora