Miedo

59 7 0
                                    

Pasado

Cuando comencé a trabajar por mi cuenta solía recibir muchas quejas por parte de mi hermano, principalmente eran comentarios diciendo cuan peligroso era el hacer esto solo. Debido a eso, y a un accidente menor, accedí a tener un compañero, al que escogí personalmente, su nombre era Hat. Él era un joven guardia que estaba aquí porque necesitaba pagar medicinas para su madre enferma. Originalmente pertenecía al área de inteligencia, así que era fácil para él ayudarme en algunos de mis puntos más débiles, podía saber todo de todos y eso era sencillamente sorprendente.

Su ayuda me permitió avanzar rápidamente en el número y la complejidad de las misiones, es decir, me ayudó a ganarme la confianza de Korn. Hat era una persona humilde, responsable, leal y sumamente bondadosa, por ello odiaba estar en este lugar. Su más grande sueño era salir de aquí y convertirse en piloto, volar lejos y jamás regresar. Ambos compartíamos la ambición de salir de aquí, pero él necesitaba el dinero así que al comienzo no hacía demasiado por abandonar el lugar. Sin embargo, desgraciadamente su madre falleció a los pocos meses, así que Hat perdió toda obligación con Korn, lo que se tradujo en una ayuda intensa a mi causa.

Él sabía todo acerca de porque quería escapar, yo sabía todo de su vida, era la persona en la que más confiaba aquí. Desafortunadamente, Hat no midió los riesgos y comenzó a salir secretamente con un alto mando de la empresa de Korn, a quién planeaba sacar información durante el sexo. Un día el ejecutivo soltó demasiada información y para evitar que Hat dijera algo lo mató a sangre fría, su cuerpo fue desaparecido, él muy estúpido lo arrojó al río. Tarde casi un mes en encontrar sus restos, la sepultura no fue posible así que lo incinere y lo dejé junto a su madre. Él es otro de las razones por las que hago esto, es la única manera que tengo para vengar su alma y para al menos honrar su muerte cumpliendo con uno de nuestros sueños.

Presente

Comencé a reír con fuerza lo que despertó en él lo que supongo era preocupación, pues su cara lucía extraña.

- ¿Estás bien?

- Ahhh, eres tan tierno.

- ¿Qué?

- Esta situación es algo ridícula, se debe al contexto general, no a ti.

- ¿De qué hablas Porschay?

- Pensé que dirías algo como, ya no quiero esto o me arrepentí, me di cuenta que no me gustas, no vale la pena estar contigo o algo así. Es curioso que dijeras eso.

- ¿Por qué me arrepentiría de querer estar contigo?

- ¡Lo sé es ridículo!- comenté y no pude aguantar la risa, la vida parecía menos seria a su alrededor.

- Jamás te preocupes por algo así de mi parte-. Acarició mi pelo con tanta ternura y mi corazón se volcó por un momento.

- A este paso realmente creeré que te enamoraste de mi.

- Todo es posible en la vida Porschay.

- Macao.

- Vamos a dormir, tengo sueño.

Mi mente estaba demasiado confundida, me sentía algo aturdido por la repentina confesión, aunque mi corazón parecía estar de un humor increíble. Lo seguí a mi habitación esperando que aclarará algo de todo lo que dijo, pero en cambio solo se acostó en mi cama y se alistó para dormir. Cuándo hizo una señal para que subiera con él simplemente obedecí, no tenía ganas de estar en otro lugar de todas maneras.

- ¿De verdad solo vas a dormir?

- Creo que no es el momento, todo llega a su tiempo Porschay.

- Bien-. Giré para quedar al lado contrario, el colocó su brazo a mi alrededor y se acomodo.

Burn downWhere stories live. Discover now