Hadas, muerte y amor

Esa increíble bruja, es mi madre

Silencio, oscuridad, velas perfumando la habitación, y un leve tintineo provocado por el viento al rozar el colgante de cristal en la ventana, comúnmente llamado atrapasol; todos elementos indispensables para reunir a los fantasmas que habitaban la casa, es hora de comenzar con la invocación - Espíritus del más allá que no consiguen la paz, atados a una forma terrenal sin voz ni libertad, les prometo la paz encontrar, pero a cambio cumplirán mi voluntad… - ¿y quien reza semejante orden?, es mi madre, especialista en invocaciones, necromancia, espiritismo y todo lo que tenga que ver con muertos básicamente.

Al igual que tu, de momento soy espectadora de semejante escena desde un rincón protegido con sal, solo me limito a verla trabajar, ni siquiera es nuestra casa, es de una familia atea. Al no ser parte de una iglesia, fueron rechazados por todos los exorcistas a los que acudían, y terminaron acudiendo al mercado del ocultismo; adivinos, hechiceros, brujas, santeras, chamanes, toda clase de practicantes de la magia. Es ahí donde se ubica la tienda de mi mamá, ella tiene la mala costumbre de ser tan buena,

que hasta da pena, pues malbarata su trabajo y le ruega a los clientes para que la escojan a ella y no a los mal intencionados, aunque le reconozco que es selectiva con sus clientes, si se topa a un político buscando maldecir a sus enemigos de campaña y después a un padre desesperado por liberar a su familia de una casa llena de apariciones, es lógico que se decantara por la buena voluntad de ayudar a la familia, aunque el político hubiera pagado más y por un trabajo más sencillo.

De alguna forma me molesta un poco que una bienhechora como mi mamá se dedique a la brujería, ¿cómo fue que hizo su selección de carrera? No lo se, pero es bastante irónico que mejore la vida de la gente manipulando a la muerte. Es tan buena, que ni siquiera me escuchó cuando le sugerí aceptar ambos trabajos

— Mamá, podríamos capturar a los espíritus de la casa y enviarlos a maldecir a los enemigos del político
¿Y que hizo ella? me acarició la cabeza como quien no quiere decir en voz alta “Ay niña, qué cosas dices” y sonrió negando con la cabeza. Por favor que alguien me diga, ¿donde estuvo la gracia en mi sugerencia?, ¿seré yo la ingenua? si miro a mi alrededor cualquier otra bruja habría hecho exactamente lo que dije, ¿Que no es de adultos pensar en el beneficio propio?, para colmo le cobró a la familia acorde a sus posibilidades y no a nuestras necesidades, demasiado barato para un exorcismo tan grande, ¡37 espectros!, hasta parece que lo hace a propósito para hacerme enojar.

Bueno, ya pasó, no puedo cambiar a mi mamá, pero si puedo diferir de ella, de momento solo puedo imaginar un futuro bajo mi control, a veces me visualizo manejando la tienda a mi manera, otras veces pienso que esperar a heredar todo sería muy tedioso, mejor abrir mi propia tienda lejos de ella, quizá no me vuelva rica, pero definitivamente ganaría más de lo que ella obtiene regalando su trabajo. Aunque, ella odia la adivinación, puede que tome algunas clases, a ver si se me da bien… mmm, no, los adivinos son muy comunes y no es muy lucrativo, paso.

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Está fue la primera parte, gracias por leer.

La ilustración de la portada y está historia son de mi autoría.

Cuando escribí la historia por primera vez, los personajes no tenían nombre, pero la protagonista y narradora se llamará Yadira, ya veré como le pongo a los demás.

Buen día.