you again || l.s

veintitrés

—¿Puedo ver ahora? —preguntó el omega mientras sentía los brazos de su pareja guiarlo por su apartamento.

Tenía los ojos cerrados con una pequeña venda amarrada en la parte posterior de su cabeza; Louis había dicho que no confiaba en que no abriría los ojos, al principio se indignó, pero después le dio la razón.

Olía delicioso y su lobo no podía estar más feliz —Sí, dame un segundo.

Se detuvo cuando Louis se lo indicó, esperó un poco antes de que la venda fuera retirada de sus ojos y parpadeó un par de veces antes de lograr ver lo que su alfa había preparado para él.

Había un corto mantel azul claro en su mesita de café, en el centro había una vela encendida y una nueva maceta con varios pequeños tulipanes creciendo en ella; en la parte más larga de la mesa había dos platos con carne y una porción de puré de papa recién servidos.

Además, el lugar olía totalmente a Louis y eso hacia que todo fuera todavía más perfecto —Esto es increíble, alfa —se giró de inmediato para darle un beso cargado de emoción y felicidad; su lobo y su aroma siendo dulces por completo. —Gracias.

—Espero que te guste lo que preparé para cenar, es pollo relleno de queso mozzarella envuelto en jamón de Parma con puré casero.

Sonrió mostrando sus hoyuelos y lo besó por última vez antes de sentarse en uno de los cojines que estaban en el suelo frente a la mesa —Suena increíble.

Louis sacó la botella de vino rosa que había guardado en el refrigerador y lo sirvió en dos copas antes de sentarse a su lado —Toma.

—Vino rosa —mencionó con una sonrisa antes de darle un sorbo —. Sigue siendo mi favorito.

El alfa le sonrió tiernamente y lo vio comer el primer trozo de su plato, aguardó por su reacción con cierto nerviosismo —¿Te gustó?

Harry asintió de inmediato, acción que hizo que la sonrisa de Louis se ensanchara hasta mostrar las arruguitas de sus ojos —Está delicioso, Lou.

Rio ligeramente cuando escuchó al alfa suspirar, ni siquiera notó que había estado reteniendo la respiración —¿Por qué estás tan nervioso, amor? Dijiste que no celebramos nada.

Louis tomó un sorbo de su copa y se encogió de hombros desviando la mirada —¿Yo? Yo no estoy nervioso, estoy bien.

El omega le dedicó una suave sonrisa antes de tomar su mano entre la suya, acariciando el dorso con ternura —Lou... —pidió con cierto tono de reprimenda.

Lo vio suspirar, al menos sabía que no sería nada malo porque su olor estaba tranquilo y suave.

—De acuerdo... Hablé con Zayn hace poco cuando me visitó en mi apartamento, le conté lo que pasó antes y me dio una idea que realmente estoy considerando.

—¿Acerca de que? —preguntó mientras seguía acariciando su piel.

—Creo que voy a comenzar a tomar terapia. Yo... antes creía que ya estaba bien porque me había alejado de mis padres, pero entonces volvimos a estar juntos y empecé a notar ciertas actitudes en mí mismo que no me gustan.

—Oh, amor, creo que esa es una gran idea. Te será de gran ayuda.

Louis le sonrió con ternura y cierto nerviosismo; adoraba verlo, simplemente estar a su lado lo hacía sentirse completo.

Lo amaba tanto, ambos lo hacían —Nunca he hecho algo como esto, estoy algo asustado, pero quiero hacerlo. Venus, sé que me amas, pero quiero ser mejor cada día, quiero ser la mejor versión que puedo ser, por ti y por mi; quiero ser el alfa que mereces para asegurarme de que esto funcionará, porque yo de verdad te amo y sé que es lo que mereces.