-Hola- apenas elevó las comisuras pasando por mi lado dejándome confundida.

-Hoy debemos salir- le hable a Charles omitiendo saludarlo, seguía molesta por su comportamiento siempre que Alexandra está presente.

-Si ya Mary me avisó- dijo mientras se sacaba el mono rojo de ferrari- te busco a las 8- paso por mi lado hacia su camerino tal como lo hizo Carlos.

Que les sucedía a estos chicos hoy?

Me giré confundida en dirección a buscar a mi hermana que también estaba molesta el día de hoy, todos están locos.

Caminando por el paddock salude a algunos mecánicos y pilotos, incluso un par de chicas me pidieron una foto, el ambiente estaba más relajado en cuanto a mi relación no relación con Charles, eso me aliviaba.

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-Es injusto que tu salgas a fiestas mientras yo me quedo acá aburrida- se quejó Layla mientras yo me ponía el vestido negro que compré en España aquella vez con Charles, no había tenido una oportunidad para usarlo.

-Quisiera llevarte- respondí con un puchero- pero Mary solo nos consiguió dos pases.

-Debo tener una conversación con Mary- bufó desde la cama y reí lanzándole una almohada.

-Volveré pronto- le sonreí sentándome a su lado- mientras sobrevive sin mi si?

-Lo intentare- dijo ocultando su rostro en la almohada- me aburriré mucho.

-No te quedes acá, baja por algo al restaurante del hotel o al bar que se yo- levante los hombros- pide a nombre de Charles- reí bajo y me imitó.

-Eso haré- se levantó de golpe- me pondré un lindo vestido y buscaré un hombre atractivo esta noche- corrió a la maleta para empezar a sacar sus cosas.

-Esa es mi hermana- la apoyé en risas.

El sonido de la puerta me hizo pegar un leve brinco y me levanté algo nerviosa arreglando mi vestido, sabía que era Charles.

-Llego tu príncipe- rió mi hermana entrando al baño- ve a por el, te amo hermana- se despidió perdiéndose en el baño.

Tome una respiración honda y abrí la puerta, efectivamente Charles estaba del otro lado, tenía un traje elegante azul oscuro, se veía serio y ardiente a la vez, su cabello bien peinado y su reciente barba bien depilada, incluso su olor embriagaba.

-Te pusiste el vestido- dijo con una leve sonrisa escaneando el vestido.

-Así es- asentí tomando mi bolso- nos vamos Leclerc?- pregunté frente a el y asintió.

-Andando Walker- lo seguí hasta el ascensor el cual llegó rápidamente y bajamos sin problemas y en silencio, no había mucho que decirnos.

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-Mi madre preguntó por ti- dijo en el auto camino al dichoso museo.

-La extraño- sonreí nostálgica y rió.

-Dijo que si no te llevaba a ti y a Layla a su cumpleaños iba a desheredarme- confeso y reí por ello.

Fingiendo no amarte • Charles Leclerc Where stories live. Discover now