Capítulo 14

19 13 1
                                    

Nota: En este capítulo encontrarás contenido algo fuerte por lo que si no te sientes cómod@ leyendo ese tipo de contenido simplemente puedes brincarte esa parte. Es mi primera escribiendo sobre esto así que no soy nada buena. Bueno, los dejo para que sigan con su lectura. 🖤

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
En algún lugar de España.
Desconocido.
Me encuentro acostado en mi habitación sin poder hacer más nada que pensar en mi mujer. Ella es perfecta en todo uso de la palabra, es una diosa que se ha ganado el deseo del mismísimo diablo. Ella es mía. Por mucho que todos quieran alejarla de mí, ella siempre regresará a mis brazos y de no ser así tengo todo preparado para que me la traigan así sea a la fuerza.

—Amor.—la voz de Katia interrumpe mis pensamientos y al momento me arruina el resto del día.

—¿Qué es lo que quieres? Te he dicho que toques antes de entrar, sino no vengas hasta que yo te llame.—gruño sin levantarme de la cama.

—No seas así, solo quiero darle una buena sorpresa de aniversario a mi novio. ¿Qué tiene de malo eso?

Siento el sonido de los tacones taladrándome los oídos con cada paso que da mientras se acerca a mí. Decido dejar de ignorarla para poder quitármela de encima más rápido. Me siento en la cama y la repaso con los ojos, lleva puesta una lencería de cuero negro que apenas tapa lo necesario. Su cabello está recogido en un moño alto y en su cuello trae puesta la correa que tanto me gusta. Se acerca a mí con pasos firmes mientras yo no dejo de admirar sus curvas. Katia podrá ser todo lo contrario a mi diosa pero para nadie es un secreto que es una mujer muy atractiva y sabe aprovecharlo.

—Ven aquí mi puta.—palmeo mis piernas mientras la miro con deseo.

Se sienta en mis piernas y comienza a deborar mi boca. Le sigo el juego mientras aprieto sus nalgas haciéndola jadear. Comienza a mover sus caderas poniéndome duro al instante. Voy dejando besos húmedos desde su boca hasta el espacio que hay entre sus enormes senos. Le arranco el sostén de un tirón y me prendo a uno de sus senos mientras con mi mano le doy atención al otro. Ella gime mi nombre mientras que yo no veo la hora de que sea otra quien lo haga. Comienzo a pensar en ella, en sus ojos que tanto me miraron con amor, miedo y luego odio, sus curvas que te incitan a pecar y su coño apretado que promete llevarte al mismo infierno. Joder ella me tiene mal y por eso debo de intentar saciarme con otras hasta que sea el momento adecuado para tenerla. Katia safa mi cinturón y luego procede a desabrochar mi pantalón, saca mi pene que se encuentra necesitado de atención. Lo ubica en su entrada y baja con facilidad gracias a su humedad. Comienza a moverse mientras yo le dejo marcas por cada lugar donde tengo acceso, la nalgueo y la ahorco mientras las embestidas son cada vez más fuertes. Noto cómo su coño me aprieta avisando que está por llegar.

—Vamos amore, quiero sentirte. Quiero tenerte bien dentro de mí.—me pide con la voz entrecortada.

—Estás loca si crees que te daré mi sémen cariño, eso sólo le pertenece a una sola persona.—le recuerdo algo molesto por su jodida insistencia de siempre.

—Todavía...esperas a esa zorra, ¿Verdad?—detiene sus movimientos.—Ella no te merece, joder te quiere en la cárcel y te odia. Esa estúpida zorra no es la mujer que necesitas.

Me lleno de rabia al escuchar la forma en la que se refirió a mi mujer y mi mano impacta directamente en su linda cara.

—¿Me...golpeaste?—solloza mientras se toca la cara.

—Ten cuidado con la forma en la que te refieres a mí mujer, aquí la única zorra eres tú, putica. Ve metiendo en tu cabeza que solo voy a descargarme sin condón si es dentro del coño de mi mujer.—le digo con odio.

Estúpido detallista. (Borrador)Onde as histórias ganham vida. Descobre agora