Posesión De La muñeca De Algodón Del Maníaco Obsesivo - Novela

Cap 9

—Hmm, sólo llámame Mikael.

—¿De verdad?

—De verdad.

Los ojos de Yul se ampliaron ante la inesperada respuesta. Por supuesto, había pensado que él quería ser llamado con los más altos honoríficos, pero era sorprendente que le permitiera llamarlo por su primer nombre.

Yul se estaba preguntando si estaba bien llamarlo por su primer nombre, pero, ya que él mismo lo había permitido, realmente parecía estar bien.

—Okay, okay, Mikaelcito³.

—¿Qué?

Mikael explotó en carcajadas. Yul se sintió aliviado de ver a Mikael sonriendo.

Mikael, ¡a este bastardo le gustaba algo así después de todo! ¡Una relación amistosa! ¡Como mejores amigos!

Yul, que se sintió motivado por su reacción, habló de nuevo y añadió las palabras que quería decir.

—Oye, Mikaelcito. ¿A dónde vamos? ¿No vas a venderme, verdad?

Los ojos de Levi, que estaba sentado detrás de Yul, estaban teñidos de vergüenza, pero no había manera de que Yul, que sólo miraba a Mikael frente a él, pudiera ver la reacción de Levi ya que no tenía ojos en la parte de atrás de la cabeza.

Mikael, que había estado sonriendo durante todo el tiempo que Yul bromeaba, endureció su rostro en un instante, y abrió su boca fríamente.

—Levi.

—Sí.

—Arroja esto por la ventana.

—Sí, entendido.

—¡Ah, no! ¡¡¡¿P-p-por qué me vas a arrojar?!!!

Yul, que iba a ser repentinamente arrojado fuera del carruaje en movimiento, entró en pánico y agarró el asiento del carruaje, pero era imposible sostener el suave cuero con manos de algodón. Sin mucha resistencia, Yul, sujetado por Levi, se dirigió fuera de la ventana.

El carruaje, conducido por cuatro hermosos corceles, se movía a una velocidad tremenda. Gracias a eso, Yul ni siquiera podía abrir sus ojos apropiadamente. Si caía a esta velocidad, con suerte se lastimaría seriamente, o moriría inmediatamente, si piensas en ello de forma realista.

—Uwahhhh, perdóneme, uwahhhh, ¡mis ojos se congelan!

Yul cerró sus ojos por una ráfaga de viento fuerte, debido a la aceleración y al polvo generados por los corceles corriendo, y suplicó por ayuda. No se olvidó de abrazar el dedo de Levi con toda su fuerza, intentando no caerse de alguna manera con su pequeña mano.

Mikael, que estaba feliz de ver a Yul gritar ruidosamente, miró a Levi. Entonces, Levi asintió ligeramente y nuevamente entró a Yul al carruaje.

Yul, que ni siquiera podía abrir sus ojos y estaba colgando sostenido de la mano de Levi, no notó su comunicación.

—Creo que mis globos oculares se cortaron. Mis ojos me duelen, uhuhu. Entró polvo.

Yul limpió las lágrimas que brotaron en el resplandor del dolor que quedaba.

Después de que pasara algún tiempo, por supuesto, el resentimiento contra Mikael se disparó.

Ese bastardo de hecho era un "profesor". Con el pretexto de una cena laboral, después de embriagarse, era el tipo de profesor que le permitía hablar informalmente pero después reaccionaba gravemente. El rostro de Mikael se superpuso con el rostro del profesor.

—Nunca te dije que me llamaras tan insolentemente.

—Hmph, tendré cuidado.

Frente a las palabras de advertencia de Mikael, Yul calmó su corazón que se sentía ultrajado.